Alberione volvió a pintarse de verde

Barrio Alberione recuperó su esencia. El domingo, en el duelo entre Sportivo Belgrano y Deportivo Rincón de los Sauces por el partido de vuelta de los cuartos de final del Reducido en busca del ascenso al Torneo Federal A, volvió a sentirse lo que hacía tiempo no se vivía: un estadio repleto, un recibimiento cargado de pasión y un marco de público que hizo pesar la localía.

La popular de la Av. Rosario de Santa Fe fue una postal del fútbol argentino en su máxima expresión. Trapos colgados en cada rincón, banderas desplegadas, papelitos en el aire, silbidos y cánticos que bajaban desde las tribunas. El viejo telón, insignia de otras épocas, volvió a aparecer en el recibimiento y acompañó un clima que mezcló nostalgia y emoción.

La fotografía capturada por Manuel Ruiz, de LA VOZ DE SAN JUSTO, lo sintetiza: la imagen de un club que volvió a latir con fuerza, de un “viejo y glorioso Sportivo Belgrano” que se hizo sentir en Alberione.

Dentro de la cancha, la “Verde” ganó. Ganó sufriendo, ganó con incertidumbre, ganó a lo Sportivo. Porque así lo marca su historia: con lucha, con nervios, con la tribuna empujando. Y esa victoria vale doble, porque significó meterse en las semifinales del Reducido.

Ahora el desafío es mayor. En la próxima instancia espera Atlético de Rafaela, con la certeza de que el “Juan Pablo Francia” volverá a explotar dentro de dos semanas, en el partido de vuelta.

Barrio Alberione volvió a ser de Sportivo. Volvió a sentirse verde, volvió a latir. Y en San Francisco todos saben que todavía queda un largo camino por recorrer, paso a paso, con el sueño intacto.