A 10 años del renacimiento de Sebastián
Hoy queda solo el recuerdo, pero fue grande la angustia de toda una hinchada que tuvo que ver como su cancha desaparecía de un lugar tradicional. En Frontera, Sebastián tuvo que rehacerse en un sitio diferente y ya pasaron 10 años.
Como muchos
otros clubes del Baby Fútbol, Deportivo Sebastián tuvo que dejar el predio
donde tenía instalada su cancha. El estadio de Calle 58 y 9, que durante tantos
años albergó a la entidad, tenía que dejar su tierra en 2009.
Fue un gran golpe en ese momento. había mucho por trasladar y sobre todo, demasiado por hacer para levantar una nueva estructura. Lo bueno, es que con el trabajo de mucha gente de a poco se fue logrando. Lo malo, era que pasaba el tiempo y el viejo predio era solo un descampado, donde todo lo que se dijo que iba a ser, nunca era.
Lo cierto es que pasaron ya 10 años desde ese hecho y hoy se recuerda como una anécdota. El actual presidente de la institución, Rubén Pavón, así se lo manifestó a LA VOZ DE SAN JUSTO, pero también contó detalles de todo lo que vivió el "rojito" de Frontera en este lapso.
Pasó una década
"Este mes se cumplieron 10 años que estamos en el predio de Calle 58 al 950, pero el club va a cumplir en noviembre 32 años. Uno que está identificado con Sebastián, todavía hoy no entiende porque el club no continúa en el lugar donde estaba antes (Calle 58 y calle 9) y se tuvo que ir por cuestiones políticas, en un sitio donde ya tenía todo armado. Cuando hubo que dejar las tierras, se prometieron muchas cosas que en un futuro iban a ocupar ese lugar, pero todavía hoy es un descampado, y los únicos que lo utilizamos fuimos nosotros, cuando no teníamos lugar de entrenamiento. En ese momento lo vi de afuera al traslado. A la gente que trabajó los conocía, pero no me tocaba estar en Sebastián".
El traslado
"Fue una locura lo que hicieron aquella vez. Los sigo llamando los "locos lindos de siempre", que a pulmón armaron el club donde está hoy. En seis meses armaron una cancha, llevando todo lo que más podían de increíbles maneras, ya que iban cargando en camionetas o autos y hasta caminando, ya que hay pocas cuadras entre un lugar y otro. Trasladaron desde los postes y los tejidos, hasta materiales de lo que era la cantina y lo que se podía recatar iba para el nuevo sitio. El gobierno de esa época los corrió del lugar y solo les dio un nuevo espacio, pero las cosas las llevó la misma gente que estaba en Sebastián. Ese grupo de gente tenía a la cabeza a Luis Pinto, que es una persona que no puede faltar en el club, es alguien que nos identifica, que siempre apoya aún no teniendo ya a los hijos jugando. Luis es mi compañero fiel, somos amigos y le tengo un gran respeto".
Así está hoy el predio donde antes estaba la cancha. Un descampado
Solo promesas
"Donde estaba la cancha vieja, en principio se dijo que iba a estar la terminal de ómnibus de Frontera, después que iban a levantar una escuela, otras cosas también, pero en definitiva no hay nada. El gobierno actual nos prestó ese predio para entrenar, nos pusieron las luces de la vía blanca, pero donde estaba la cancha oficial es un descampado. Es una lástima. La realidad es que no nos quejamos del lugar donde estamos, gracias a Dios lo tenemos, pero está muy al fondo de Frontera y donde estaba antes, hay pavimento, está más cerca del camino interprovincial y eso nos facilitaba las cosas".
Se levantaron
"A finales de 2015 sufrimos mucho con la inundación en el lugar donde está la cancha. El club estaba desbastado y en una charla con Luis, le dije que si no volvíamos a recuperar la cancha, podíamos desaparecer. Era muy triste que el esfuerzo que hicieron ellos hace 10 años, se podía tirar a la basura por la situación que se vivía. La cancha estaba tapada de agua, los pastos ya tenían una altura de casi dos metros, un caballo adentro y otras cosas que daban tristeza. Lo veíamos y se nos caían las lágrimas, porque era mucho el esfuerzo que se había hecho. Pero trabajamos mucho y lo pudimos sacar adelante. El club es una parte fundamental en mi vida. Vivo pensando en Sebastián, que cada día lo hagamos más grande. Entre mucha gente teníamos un sueño, recuperamos todo y sentimos orgullo que siga funcionando de la mejor manera".
Rubén cumplió su ciclo
"Hace 25 años que estoy dedicado al fútbol, me gusta trabajar con los chicos. Pero desde febrero de 2016 le avoqué mi vida al Deportivo Sebastián. En su momento tenía claro que cuando el club tenga su cancha de nuevo en pie, con todos los chicos, me iba a ir para seguir con lo mío. Gracias a Dios se pudo lograr, tenía que ser presidente del club y lo conseguí. El club tuvo la suerte de contar con gente como Luis, Marcelo Taverna, Hugo Molina, Juan Álvarez, Juan Cuello, Gabriel Suárez y muchos más que siempre apoyan. Los clubes crecen cuando los que están adentro tienen sentido de pertenencia y en Sebastián pasa eso. Todos le tenemos respeto y sabemos que son un pilar fundamental los padres, que tienen que valorar la contención hacia los chicos".
La actualidad
"Contamos con más de 100 chicos, se trabajó de menor a mayor en lo deportivo, tuvimos que hacer un trabajo de hormiga, convencer a la gente del barrio, que vean que estábamos saliendo a flote. Queríamos hacerles saber que el "rojito" de Frontera estaba renaciendo y eso se logró, gracias a los dirigentes y al municipio actual de la ciudad, que nos ha dado una mano muy grande en muchos sentidos. En cuanto a la infraestructura también se creció mucho, tenemos la cancha oficial y una auxiliar, además de tribunas, la cantina más el salón, una gran cabina para la prensa y el cerramiento que se le pudo hacer al predio".
"Este año todos los chicos del club han podido viajar a Rafaela a jugar un torneo, que es muy importante para ellos. A finales del mes de agosto fuimos invitados a Córdoba a conocer el predio de Talleres gracias a una charla que tuvimos con Darío Paredes, intermediario de Federico Navarro, un jugador que nació en Sebastián y que hoy juega en Córdoba".
"Presentamos un proyecto para hacer un playón deportivo en nuestro predio. El club, el barrio y la ciudad lo necesitan. Queremos hacer ese playón con arcos de fútbol, además de aros de básquet y una cancha de vóley, que después el día de mañana, con mucha ayuda, está la idea de techarlo y tener un gran salón. Es un gran sueño que tenemos y ojalá se pueda cumplir".