Esperanza latente: los testimonios de los vacunados contra la covid 19
Hombres y mujeres de la salud que ya se colocaron la vacuna Sputnik V, relataron a LA VOZ DE SAN JUSTO cómo se sintieron al recibirla y aseguraron que la esperanza está en la vacunación sin dejar los cuidados preventivos como el lavado de manos, el uso de barbijo y el distanciamiento social.
El 29 de diciembre fue un día histórico en el país y en nuestra ciudad. La vacunación contra la Covid-19 era un hecho y aquellos que están en la primera línea combatiendo el virus, eran protagonistas.
Los días sucesivos y con la llegada de nuevas dosis, más profesionales de la salud se la aplicaron para protegerse y cuidar al resto de la población.
LA VOZ DE SAN JUSTO retrató la expectativa de estos profesionales ante la colocación de la vacuna. Nuevamente, los volvimos a entrevistar para que nos cuenten en primera persona sobre cómo se sintieron a nivel físico, si están más tranquilos luego de la aplicación y que mensaje darían a la población con respecto a la vacunación. Acá los testimonios:
Gabriel Galfré
Enfermero y Chofer de Cruz Verde
"Recibí la primera dosis el 29 de diciembre del año pasado y la segunda, el 19 de enero de 2021. Cuando me colocaron la primera, tuve cefalea y desgano al día siguiente; y con la segunda, solo dolor de cabeza", dijo Galfré.
"Tuve mucha ansiedad al momento de colocármela porque al principio sabíamos poco de la vacuna, pero a la vez, la sensación de tranquilidad al saber que estoy protegido ante el virus".
"Con la vacuna, tengo la posibilidad de seguir trabajando en la salud, esto que hago y amo", aseguró el chofer.
"A la población en general le recomiendo que se la coloque, que no dude de los efectos porque yo tuve y fueron leves. Hay una esperanza ante la pandemia y es vacunándonos", concluyó.
Lourdes Bertorello
Enfermera de Cruz Verde
"El 8 de enero me vacuné con la primera dosis de la Sputnik V y la segunda fue el 19 del mismo mes. Con respecto a los efectos ´post colocación´, puedo decir que fue 50% y 50% porque en la primera dosis, sentí efectos importantes pero no graves como mialgias generalizadas, temperatura alta y cefaleas intensas pero con la segunda, no tuve síntomas", contó Lourdes Bertorello.
"La vacuna es una herramienta más con la que comenzamos a contar para dale pelea a este virus tan dañino y no debemos relajarnos. No podemos olvidar por ninguna causa las medidas que se vienen implementando hasta el momento como son el lavado de manos, el distanciamiento social, el saneamiento de superficies y más".
"Falta bastante camino por recorrer para que la vacuna nos proporcione la inmunidad que tanto necesita toda la humanidad. A título personal, le digo a toda la sociedad que a medida que se puedan colocar la vacuna lo hagan porque no es sólo un acto de protección personal sino también un gesto de altruismo al colaborar pasivamente con la protección de aquel que no la puede recibir", reflexionó la enfermera.
María Florencia Lamberti
Bioquímica del laboratorio "Argenlab" del Sanatorio Argentino
"Recibí la primera dosis el 8 de enero y la segunda, el 29 del mismo mes. En mi caso, no tuve ningún efecto secundario, salvo la molestia normal en el brazo que genera cualquier vacuna por lo que el día de la vacunación y los posteriores fueron días comunes tanto en mi vida personal como en el trabajo, sin complicación alguna", comentó Lamberti.
Sobre su experiencia, la bioquímica comentó que le llamó la atención "la cantidad de personas que me escribieron cuando se enteraron. Muchos felicitándome, otros preguntando dudas con respecto a la vacuna y un grupo gracias a Dios menor cuestionando porque me había puesto ´la rusa´. Esto me hizo notar que varias personas, especialmente en la ciudad, están mal informados y la mayoría a los que les pregunté, ´¿Por qué no?´. No tenían una respuesta fundamentada".
"El día que me llamaron para decirme que me tocaba colocarme la vacuna sentí felicidad porque su llegada es como acercarnos a la meta. Es esa luz de esperanza que todos estamos esperando. ¡Tanta espera valió la pena!", expresó la joven.
"Colocarme la vacuna me dio más tranquilidad en el trabajo pero no por eso debemos dejar de cuidar y proteger. Tener inmunidad no significa que no me pueda contagiar o contagiar al resto".
"Recomiendo a todos que se vacunen ni bien lleguen las dosis porque cuantos más vacunados haya, más cerca estaremos del fin de la pandemia. También les pido que se informen, que no tengan miedo en preguntar, que no se queden con dudas o comentarios que se leen por ahí. Deseo de corazón que lleguen pronto. Mientras esperamos la vacunación masiva sigámonos cuidando como hasta ahora y recuerden que esto aún no terminó", concluyó.
María de los Ángeles
Bertorello
Licenciada en Diagnóstico por bio imagen en el servicio de Diagnóstico por Imágenes en el Hospital J.B.Iturraspe
"La primera dosis me la coloqué el martes 29 de diciembre y la segunda, al mes siguiente sin efectos secundarios incluso, me las coloqué los días que estoy de guardia las 24 horas y la pasé muy bien, sin reacciones, lo que me permitió seguir trabajando con normalidad", recordó María de los Ángeles Bertorello.
"En el momento que me estaban colocando la vacuna sentó una sensación inexplicable, porque fui una privilegiada ya que los de salud fuimos los primeros. Sentí que ahora llegaría a mí casa y podría abrazar a mis hijos y esposo sin culpa de poder contagiarlos, ya que estamos todos los días luchando en el área del covid de nuestro hospital".
Hoy María de los Ángeles se siente más tranquila "pero siguiendo con todos los cuidados y usando todos los elementos de protección porque por más que estemos vacunados, no nos tenemos que olvidar que el virus está y nos podemos contagiar".
"A aquellos que no se vacunaron, mi recomendación es que lo hagan porque tenemos que protegernos nosotros y a nuestros seres queridos. Perdimos muchas vidas en San Francisco y quizás si la vacuna hubiera estado antes, muchos se hubieran salvado".
"Nunca tuve miedo de vacunarme y siempre pensé en hacerlo. Apostemos a la vacuna que es lo mejor que nos puede pasar", reflexionó.