Básquet
San Isidro rearma su equipo con una idea clara: continuidad

La dirigencia apunta a renovar a Sebastián Porta y mantener a gran parte del plantel que fue campeón del Apertura y finalista por el ascenso. “Los cambios serán solo para potenciar”, dijo Basso.
San Isidro ya puso primera con vistas a la temporada 2025-2026 de la Liga Argentina de Básquet. Luego de una campaña histórica, en la que fue campeón del Torneo Apertura y cayó en el último partido de la gran final por el ascenso ante Racing de Chivilcoy, el club de calle Corrientes empezó a trabajar en la continuidad de Sebastián Porta como entrenador y en la renovación de gran parte del plantel.
Marcos Basso, jefe de equipo del “santo”, lo confirmó en declaraciones a LA VOZ DEPORTIVA: “Si tenemos que hacer un resumen ahora que ya pasó la etapa caliente, es muy positivo. Llegamos a jugar hasta el último partido de la temporada, que era uno de los objetivos que teníamos”, dijo.

“Logramos un torneo que para nosotros fue histórico por haber salido campeón, y después jugamos una final por el ascenso que sabíamos que iba a ser durísima, pero creo que estuvimos a la altura”, agregó.
La continuidad de Porta, prioridad número uno
El nombre más importante a definir es el del entrenador. Sebastián Porta, quien tuvo su primera experiencia como DT principal tras años como asistente, dejó una gran impresión: fue campeón, llegó a semifinales del Clausura y disputó la final por el ascenso. Según Basso, todo está encaminado para que continúe.

“La idea es que continúe Seba (Porta). Ya tuvimos charlas y la intención de ambas partes es que siga. Esta semana vamos a sentarnos a cerrar el presupuesto y luego sí avanzar con las negociaciones”, explicó.
“En el básquet no es muy común que haya contratos por más de una temporada, así que se renueva año a año. En este caso, el cuerpo técnico y el club queremos seguir el mismo camino”, señaló.
Una base que quiere seguir
A diferencia de temporadas anteriores, donde se cambiaba buena parte del plantel, esta vez San Isidro buscará mantener una base sólida. “Llegamos a la final y estuvimos a un partido del ascenso, entonces evidentemente las cosas estaban bien hechas. Si hay cambios, tienen que ser para potenciar”, afirmó Basso.
Al respecto, detalló: “Coincidimos con Porta en que hay que mantener la base. Lo que haya que renovar, lo vamos a hacer. Pero la idea es que se queden la mayoría de los jugadores posibles”.
Entre los nombres destacados de la última temporada están Nahuel Buchaillot, quien fue el base predilecto del entrenador y figura clave en partidos determinantes; Marcos Saglietti, capitán y hombre de experiencia; Lautaro Mare, sanfrancisqueño con buenas actuaciones pese a una lesión; y Manuel Lambrisca, fundamental en el funcionamiento ofensivo.
También se destacaron Julián Eydallín y Nicolás Álvarez (clave durante el año, aunque irregular en las finales), Facundo Sanz (con gran entrega defensiva) y Jerónimo Suñe, tirador de confianza. Según trascendió, hay una buena relación entre varios de ellos —Mare, Buchaillot, Suñe y Lambrisca— lo que podría favorecer la continuidad del bloque.
Puede interesarte
El mercado y un movimiento inevitable
San Isidro se caracteriza por moverse rápido en el mercado. Sin embargo, Basso aclaró que por ahora están enfocados en resolver lo interno: “Lo primero que se habló fue de todo lo que queremos de la temporada pasada. Aún no se han discutido nombres por afuera del plantel actual”, dijo.
Un dato clave es que Santiago Bruno pasará a ocupar ficha mayor, lo que obliga al club a reacomodar su plantilla, dado que ya tenía las siete fichas de mayores cubiertas. “Eso sí o sí va a generar un cambio, porque ahora Bruno deja de ser U23. Vamos a tener que mover una pieza”, indicó.

Por último, respecto a posibles incorporaciones, Basso aclaró: “Recién ahora los representantes están empezando a pasar listas de jugadores. Todavía no hay nada concreto. Hay que ver también qué jugadores liberan otros equipos como Racing, o los que jugaron instancias finales”.
¿Habrá extranjeros?
El club no descarta sumar algún extranjero, aunque lo económico es un obstáculo: “Los sueldos son muy altos, los costos son elevados. Pero puede haber nombres en el radar. Si llega un extranjero, será para sumar calidad”, concluyó Basso.
Así, San Isidro comienza a escribir una nueva página de su historia. Con la ilusión intacta y una identidad de equipo consolidada, ya se mueve para volver a pelear bien arriba.