Zumba y Pilates activaron los gimnasios en los barrio
Con el confinamiento muchas personas abandonaron las actividades físicas que llevaban a cabo en gimnasios, clubes y otras instituciones barriales. Desde la semana pasada, el COE central habilitó las clases de danza, teatro y algunos deportes. Entre las actividades permitidas se destacaron zumba y Pilates, las cuales tienen muchos adeptos en nuestra ciudad.
Poco a poco, los sanfrancisqueños van regresando a las viejas actividades deportivas que realizaban antes del parate total por la pandemia del coronavirus.
Zumba y Pilates, dos formas de entrenarse muy diferentes a la musculación en el gimnasio, pero muchos las están eligiendo para moverse y llevar a cabo una actividad física. También esta vuelta, es utilizada por muchas personas para conectarse con otras y disfrutar de un momento compartido cara a cara.
La profesora Milena Ríos ya dejó todo listo en el Centro Vecinal de barrio José Hernández para que los vecinos vuelvan a sentirse parte del lugar. Por otra parte, Melina Varela trabaja al 50% con sus camas de Pilates pero las consultas no dejan de llegar. Volver poco a poco, bajo una nueva normalidad, pero con ganas de reencontrarse.
El barrio al ritmo del Zumba
En el centro vecinal de barrio José Hernández, Milena Ríos está entusiasmada de reencontrarse con sus alumnas del sector pero también con todos aquellos que le consultaron para hacer la actividad. "Se sumó mucha gente que estaba haciendo clases virtuales y ahora eligió hacerlo en el barrio. Además, están aquellos que no pueden hacer sus actividades tradicionales, eligen el zumba para hacer algo diferente y con gente".
El salón del barrio, por sus dimensiones, permite que la actividad se realice sin problemas con muchas alumnas respetando el distanciamiento social. "Puede haber alrededor de 10 personas sin problemas cumpliendo con lo que indica el protocolo", explicó Ríos.
Las clases son de 45 minutos (respetando los 15 minutos restantes de higiene del salón para los que siguen) y deben cumplir con todas las órdenes del protocolo que se indica pero no es necesario usar barbijo en la clase.
"La gente estaba ansiosa de volver porque deseaban interactuar con otros. Si bien nos divertíamos online, el zumba se disfruta de manera presencial y la gente necesita el contacto con el otro", aseguró la profesora. Y agregó: "Esta actividad se hace de otra manera, en confianza entre los vecinos de lugar y lo disfrutan más allá de la actividad física. La clase se hace más amena y llevadera".
La profesora separó las camas a dos metros de distancia como establece el protocolo.
Pilates: la mitad de gente y muchas consultas
En barrio Sarmiento, Melina Varela, de 35 años, se dedica a las clases de Pilates. En su espacio deportivo está trabajando bajo protocolo como corresponde por lo que tiene el 50% de sus alumnos.
"Trabajo de 7 de la mañana hasta las seis de la tarde", bromeó Melina. Hay mucha demanda para ejercitarse y no solo de sus clientes de siempre, sino de aquellos que quieren hacer alguna actividad física. "Lo llamativo es que son personas jamás hizo pilates pero quieren volver a hacer alguna actividad física porque los gimnasios donde iban no están habilitado", comentó la profesional.
Volver, de otra manera
El protocolo de aplicación para el pilates es el mismo que yoga destacándose la limpieza de todos los elementos de trabajo. Se debe higienizar las camillas, distanciamiento entre alumnos, camas separadas a dos metros de distancia; toma de datos personales a cada alumno; entre otros términos.
A pesar de la demanda, la modalidad online sigue siendo de preferencia por la comodidad horaria, por ser del grupo de pacientes de riesgo y el miedo de algunos.
"El regreso fue muy lindo porque trabajar dignifica. Los meses sin trabajar fueron durísimos y llegamos a hacer cosas que jamás imaginamos como clases virtuales o alquiler de elementos".
Por último, Melina citó a Joseph Pilates, el ideólogo del método que ella enseña. "El expresó que el movimiento es salud y todos estamos de acuerdo que eso es lo más importante para sobrevivir a la pandemia".