Vivir en la ciudad a un universitario le cuesta en promedio $10 mil por mes
Es el costo promedio que deberá afrontar un alumno que llegue desde otra localidad.
Su carácter de Polo Educativo hizo de San Francisco una ciudad referente dentro de la región para los estudiantes que llegan de diversas localidades cada año para cursar una carrera universitaria o terciaria, y que optan por quedarse a vivir.
Esto, claro, significa un gasto importante para los padres de los jóvenes que se forman como futuros profesionales y que se ven obligados a destinar una partida mensual de dinero para solventar un alquiler, los servicios, las expensas en muchos casos, el transporte para cuando los jóvenes vuelven a su casa, muebles y alimentos.
El alquiler, $6 mil de base
Los valores del alquiler dependen de varios factores como pueden ser el propietario del lugar, zona, servicios y también la situación económica. A eso se suman las expensas en muchos casos y el pago de impuestos y servicios que en ocasiones quedan a cargo de los inquilinos.
"Hoy los precios por mes de los alquileres parten de una base de 5.500 pesos para arriba. Hay que tener en cuenta acá que a más servicios, mejor ubicación y menos antigüedad el valor se eleva", explicaron desde inmobiliaria Premium a LA VOZ DE SAN JUSTO.
Si se toma como parámetro una zona como barrio Independencia, cercana a la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), el Centro Universitario San Francisco (Cusf), la Escuela Superior de Bellas Artes "Raúl G. Villafañe" y el Conservatorio de Música "Arturo Berutti"; un departamento que aquí cuenta con todos los servicios tiene un costo de alquiler que oscila entre los $6.100 y si es nuevo podría llegar a los $6.500.
"La mayoría tienen expensas porque son en complejos, como se construye hoy con cuatro o más departamentos. Entonces en ese caso se suman impuestos y expensas por lo que el valor puede incrementarse mínimo a $7000", dijo Pablo Pirra, corredor inmobiliario.
Pirra agregó que el precio de los alquileres se incrementó desde el año pasado "considerablemente", pasando de una base en 2017 de $4.900 a una que supera hoy los $6.000.
Muebles y mudanza
La tendencia, a diferencia de otras plazas, sostuvieron desde la inmobiliaria es que los departamentos se entreguen con un paquete de artefactos básico: con muebles de cocina, termo tanque y algunos con calefactor.
El resto de los muebles como heladera, mesa, sillas, cama, indumentaria corren por cuenta del inquilino y se anexan a otro gasto que es la mudanza.
Estrategias de ahorro
Nadia Heck (22) y Micaela Useglio (24) viven juntas en el departamento de la familia de esta última, lo que les significa a las dos un ahorro importante porque en materia de vivienda solo deben cubrir expensas y servicios.
Nadia estudia Comunicación Social y su amiga Micaela es profesora de educación especial con orientación en discapacidad intelectual y, a diferencia de Heck, lleva ya cinco años en la ciudad.
Useglio considera que los gastos más importantes surgen cuando hay que "volver a casa". En su caso, vuelve a Estación Clucellas, donde está su primer hogar, lo que le insume un gasto de 100 pesos por pasaje.
"Hoy los precios por mes de los
alquileres parten de una base de 5.500 pesos para arriba. Hay que tener en
cuenta acá que a más servicios, mejor ubicación y menos antigüedad el valor se
eleva".
Además de cursar en la ciudad y volver los fines de semana a su domicilio familiar encontraron como punto de ahorro traer mercadería desde los lugares donde viven en "la medida que sus valijas tengan espacio".
No solo eso. Para no gastar más dinero, Nadia opta por irse un día de semana y así obtener cobertura del Boleto Educativo Gratuito (BEG) o volver también en un día hábil y no costear un pasaje que le cuesta 100 pesos hasta la localidad de Freyre.
En la ciudad, en tanto, los costos también se abaratan en estos casos ya que optan por la caminata o tener una bicicleta que les permite fácilmente moverse en distancias más largas. También utilizan el colectivo urbano.
Compartir vivienda y gastos también es una opción para María Belén Nari (21), que vive con otras dos chicas en un departamento cerca de la universidad.
"Actualmente estamos pagando $5600 de alquiler, que incluye agua y gas dentro del monto final. Cuando me mudé no tenía ningún mueble, solo la cocina, así que compré todo", describió.
A sus gastos de alquiler le suma unos $1500 de televisión e Internet y al igual que otros compañeros tratan - junto con sus amigas - de aprovechar un día de semana para viajar con el BEG hasta Morteros, de donde provienen.
"Hace 4 años que estamos viviendo en la ciudad y se ve el aumento no sólo del alquiler sino también de los servicios y ni hablar de los alimentos", subrayó la también estudiante de Comunicación Social.
Nadia comparte el departamento con una
amiga. El Boleto Educativo Gratuito y la mercadería que trae de Freyre le
permiten "ahorrar un poco", asegura.
A la inversa
Agustín Bonino (21) entre 2015 y hasta julio de este año vivió en San Francisco en un departamento que alquiló directamente a su dueño, es decir, ahorrando los honorarios propios de una inmobiliaria.
Teniendo en cuenta la baja carga horaria que tenía en este segundo período del año en su carrera tomó la decisión de volver a su pueblo y "ahorrarse" el alquiler.
"Yo pagaba $4500 de alquiler y alcanzaba casi los $6.000 con los servicios e internet. Vivía en barrio Independencia", expresó.
Y dijo: "Este cuatrimestre por la poca carga horaria dejé el departamento, tenía tres días y me iba a volver a mi casa los otros por lo que era un gasto innecesario, así que hablamos con mi papá y lo decidimos teniendo en cuenta también la situación actual".
Bonino entendía "el sacrificio de sus padres", por eso también aprovechando que volvió al pueblo - es de Sastre pero ahora está en Zenón Pereyra, Santa Fe - también encontró trabajo y elige viajar solo los días de cursada. "Es un sacrificio mayor porque ahora viajando se te acortan los tiempos", finalizó.