Sindrome de Noé: ¿Qué hace que una persona acumule animales?
Este trastorno provoca daños no solo a los animales, sino también a los humanos ya que socialmente hay problemas por olores, ruidos y molestias. En cuanto a la salud, el hacinamiento puede hacer que sea más fácil la transmisión de enfermedades y parasitosis.
En los últimos días un caso de acumulación de perros en la ciudad movilizó a Bio Animalis que busca hogares para los animales rescatados. Se trata de un caso de "sindrome de Noé" llamado así en alusión a la bíblica arca ya que quienes lo sufren acumulan compulsivamente gran cantidad de animales de compañía como perros o gatos en su hogar o en otros espacios, sin proporcionales los cuidados necesarios.
Aunque estas personas están convencidas de que son salvadoras, los animales que acumulan generalmente sufren maltrato al vivir en estado de hacinamiento, ya que están poco alimentados y atendidos. Provoca daños no solo a los animales, sino también a los humanos ya que socialmente hay problemas por olores, ruidos y molestias. En cuanto a la salud, el hacinamiento puede hacer que sea más fácil la transmisión de enfermedades y parasitosis.
Este sindrome no es algo nuevo, existe desde siempre aunque ahora, en la era de las redes sociales, los casos se conocen más. Incluso en la famosa serie Los Simpsons, es reflejado por uno de sus personajes: "La loca de los gatos".
¿Qué consecuencias en la salud humana puede causar? ¿Por qué algunas personas lo sufren?. El médico psiquiatra, Mario Vignolo (MP-19599) explicó a LA VOZ DE SAN JUSTO que generalmente sufren este trastorno psiquiátrico, personas que están solas y a quienes les cuesta relacionarse con sus semejantes, entonces trasladan sus vínculos sociales a los animales.
"Existe una desviación de las normas de convivencia y generalmente hay una transferencia en el afecto desde la persona hacia los animales. Son reacios a relacionarse con otras personas y entonces van acumulando animales como una forma de sentirse acompañados, pero sienten un pseudoafecto hacia los perros o gatos. Es un trastorno con rasgos esquizoides", advirtió Vignolo.
Aclaró que a diferencia de las asociaciones animalistas que se preocupan por el bienestar de los animales, "estas personas creen que los están salvando pero los tienen en un estado de abandono y maltrato y van haciendo una dependencia"
"Estas personas creen que los están salvando pero los tienen en un estado de abandono y maltrato y van haciendo una dependencia", afirmó Vignolo
El animal es cosificado
Las personas con el sindrome de Noé suelen tener poca comunicación o comunicación violenta para con sus semejantes y canalizan todo hacia los animales convirtiéndolos en un objeto. "Suele ser gente de mediana edad con problemas de socialización. En una situación de convivencia con otras personas siempre terminan en conflicto, con el animal pueden convivir y no tienen conflicto porque la relación no es de igual a igual. Es una forma de evadir la socialización y el animal es cosificado, no lo tienen como una mascota", explicó.
El psiquiatra advirtió que además "están expuestos a muchas enfermedades como las parasitosis que pueden transmitir los animales y pueden causar daños severos en la salud humana. También la falta de higiene puede provocar problemas de salud porque se produce una inmunodepresión transformándolos en un huésped para muchas enfermedades".
Negadores de la situación
Las personas que tienen "Noé" generalmente niegan la situación, no tienen conciencia del trastorno por eso el tratamiento no es tan fácil según Vignolo.
"Estos síntomas generalmente van aumentando y acompañados por otras patologías. No hay muchas herramientas para manejarlo -comentó el profesional-. Se hace terapia conductual se puede hacer pero a veces con pocas esperanzas porque generalmente niegan el problema y entonces no se sienten enfermos por eso la adherencia al tratamiento es casi imposible. Generalmente no hay contención familiar".
Este sindrome se convierte en un problema social y de la salud pública. Según Vignolo es algo que va en aumento porque "las relaciones interpersonales están cada vez más afectadas, hay un nivel de agresividad latente y muchas veces la gente tiende al aislamiento. Ahí es cuando necesitan canalizar y empiezan a acumular animales".
Sufrimiento de animales y también de los humanos
La Fundación Bio Animalis intervino en un procedimiento especial por este síndrome y sigue convocando a familias para una adopción responsable de estos animales, los cuales serán entregados esterilizados, desparasitados, bañados, en perfectas condiciones sanitarias.
Según aseguraron los animalistas, "no se trata de un caso de violación de la Ley 14.346, de maltrato animal, ya que en este caso en particular falta elemento subjetivo del tipo delictivo".
El abordaje que se realizó fue interdisciplinario, "no sólo se pretende ayudar a los animales sino también a los humanos que sufren este síndrome. No proceder así, sería no romper nunca el círculo que produce esta patología. Ya que si se sacaran todos los animales de una sola vez, se corre el riesgo de que el acumulador vuelva a iniciar el proceso agregando más sufrimiento para todos", explicó Gretel Monserrat, integrante de la fundación y abogada animalista.
Recordó que desde la Fundación Bio Animalis, "siempre estamos estudiando y capacitándonos en diferentes temas, para dar respuestas eficientes a los Animales No Humanos protegiendo y luchando por sus derechos. pero nunca podemos dejar de lado a los animales humanos para quienes también trabajamos por reflejo, porque así debe ser si queremos una relación armónica para todos".
Cómo identificarlo
El Síndrome de Noé se ha incorporado a la lista de trastornos mentales de las personas, por lo que es importante que las administraciones tomen conciencia sobre el problema desde un punto de vista médico y se empiecen a tomar medidas preventivas y efectivas respecto a este problema. No tiene nada que ver con el sindrome de Diógenes, en el que las personas también acumulan pero suele ser una enfermedad que aparece como consecuencia de otras patologías previas.
Estos son los criterios para determinar si una persona sufre Síndrome de Noé o simplemente es un amante responsable de los animales:
- Acumulación de gran cantidad de animales de forma compulsiva y desmesurada. El caso de mayor acumulación de animales conocido se fija en 550 animales en una vivienda de USA.
- Incapacidad para mantener a los animales en buenas condiciones. La escasa higiene suele ser consecuencia de la falta de medios (tiempo, espacio, recursos), pero también de la incapacidad de detectar las necesidades mínimas de los animales mantenidos. Esto conlleva enfermedades a esos animales, sufrimiento en las personas y puede llegar a convertirse en un problema de salud pública muy importante.
- Negación del problema. Las personas afectadas por este trastorno suelen pensar que están haciendo un favor a los animales, ya que la mayoría de ellos proceden de la calle.
En algunos casos, los medios de comunicación presentan a las personas que padecen Síndrome de Noé como una especie de héroes rescatadores de animales. Esta imagen distorsionada es muy peligrosa ya que nunca debería confundirse la acumulación patológica con los proyectos legítimos de protección animal.