Ricardo Alfonsín: "Mi padre no hubiera acompañado muchas cosas de este Gobierno"
Ricardo Alfonsín: "Mi padre no hubiera acompañado muchas cosas de este Gobierno"
El
ex diputado nacional, de los más críticos dentro del oficialismo, reflexionó
acerca de cómo hubiese actuado su padre -si estaría vivo- ante distintas
decisiones de Cambiemos.
El
ex diputado nacional, de los más críticos dentro del oficialismo, reflexionó
acerca de cómo hubiese actuado su padre -si estaría vivo- ante distintas
decisiones de Cambiemos.
-
Ricardo Alfonsín visitó San Francisco (Foto: Marcelo Suppo)
Por Nicolás
Albera
El dirigente
de la Unión Cívica Radical (UCR), Ricardo Alfonsín, visitó el último jueves
nuestra ciudad para participar de una cena debate sobre la necesidad del
fortalecimiento del radicalismo como partido político, que se organizó en el
salón del Sport Automóvil Club.
Previo a este
encuentro, Alfonsín fue entrevistado por LA VOZ DE SAN JUSTO, donde se animó a
responder qué pensaría su padre, el ex presidente Raúl Alfonsín sobre la marcha
del gobierno de Mauricio Macri y sus medidas, y también sobre la escasa
participación de la UCR en las decisiones del Ejecutivo siendo que forma parte
de la alianza que dirige el país.
"Me hicieron
varias veces la pregunta pero me negaba a responder porque es una pregunta de
difícil respuesta. Él (por su padre) no está para corregirme. Sin embargo hay
otros que contestan inmediatamente por sí o por no. Les pido a quienes dicen
que lo quieren que se abstengan de opinar, por la misma razón que comenté pero
además porque aunque acertaran con la respuesta estoy seguro que no darían los
mismos fundamentos", comenzó diciendo.
Alfonsín
prosiguió: "Hay otra pregunta que se le podría hacer a los radicales.
Pregunten, ¿qué hubiera hecho Alfonsín si hubiese sido presidente del partido
en estos dos años de gestión? Si se hubiera manejado desde el Comité Nacional
(que hoy está a cargo del gobernador de Mendoza, Alfrejo Cornejo, en reemplazo
de José Corral) como se hubiese manejado la recientemente reemplazada
conducción, de manera tan acrítica y tan poco cooperativa, acompañando
decisiones que a priori la UCR no debía acompañar. O si hubiera reclamado la
creación de un mecanismo hacia adentro de Cambiemos para discutir las
decisiones y en el caso de que nadie convenza a nadie llegar a soluciones de
compromiso procurando evitar que se cometan errores", comentó.
-Habla de un radicalismo tibio.
(Raúl)
Alfonsín hubiera conducido al partido de otra manera y hubiera tenido una
relación adentro de Cambiemos muy diferente. Nunca el radicalismo fue tan
acrítico con un gobierno del partido, ni cuando gobernó mi padre o De la Rúa.
No creo que la mejor manera de colaborar sea actuar como el convidado de
piedra, como lo hizo el Comité Nacional.
-Hubo medidas de este Gobierno que fueron criticadas
por la sociedad: las reformas jubilatorias y laboral, por ejemplo. ¿Al respecto
que hubiese opinado su padre?
No hubiera
acompañado la aprobación del mega DNU, la reforma jubilatoria, laboral ni
estaría de acuerdo con que la discusión de los salarios deba limitarse a una
inflación estimada en el 15 por ciento, cuando todos saben que va a ser
superada y no quieren reconocer la cláusula gatillo. Estoy muy seguro que
Alfonsín hubiera intentado convencer de que hay que cambiar esa política.
-Como referente del radicalismo visita distintos
lugares del país: ¿qué le dice la gente, los militantes?
La mayoría de
la gente me pide que el radicalismo se comprometa más y que comprenda que la
mejor manera de colaborar no es actuar como si el PRO y nosotros no tuviéramos
diferencias. Hay muchos que están preocupados por los resultados electorales en
el 2019. Por el temor a que Cambiemos pierda las elecciones, pero no creo que
la derrota o el triunfo dependa del hecho de que hacia adentro se discuta o se
procesen diferencias, o se delibere acerca de su solución. El triunfo dependerá
de que se acierte en la solución de los problemas y la posibilidad de acertar
se asegura más cuando hay debate interno. Hasta ahora no hubo pero espero que
con la renovación de la conducción nacional empiece a discutirse más hacia
adentro de Cambiemos. Y eso, no tengo dudas, lo va agradecer hasta el PRO.
-¿Cómo ve la marcha del Gobierno?
Es un país
difícil. Los indicadores económicos que existían en el 2015, aquellos que nos
hacían decir que la situación iba a ser compleja no son muy diferentes a los de
hoy. Los niveles de actividad económicos no mejoraron sustancialmente, el
desempleo lo mismo, la inflación tampoco se modifica sustancialmente, aunque
hay esperanzas respecto al futuro. Los niveles de inversión no son los que
necesita el país para reactivar la economía, hay déficit fiscal, comercial y un
proceso de endeudamiento que todavía no es preocupante pero que puede empezar a
encender luces amarillas en poco tiempo más sino somos capaces de poder mejorar
la recaudación para equilibrar las cuentas públicas. Estos problemas requieren
para su solución de grandes acuerdos de la totalidad de las fuerzas políticas y
de los sectores del trabajo y del capital. Esta fue mi posición desde que ganó
Cambiemos. Un acuerdo que defina prioridades, definir instrumentos con los que
enfrentaremos los problemas, definir plazos y discutir el esfuerzo que debe
hacer el sector de capital, del trabajo y del Estado. Esto nos permitiría
recuperar la confianza de la sociedad.
-No parece fácil.
No, porque
para ello hay que terminar con la grieta.
-¿Que el radicalismo tenga poca participación dentro
de las decisiones importantes es una falencia propia del partido o del PRO que
no los hace participar?
La UCR no está
haciendo todo lo que debería hacer. Nosotros no ganamos las Paso pero no
significa que no podamos influir en las decisiones. A mí no me interesan los
cargos. La UCR tiene especialistas en políticas públicas, cuadros técnicos para
aportar a la gestión pero no necesitamos estar en la gestión para aportar a sus
contenidos. El radicalismo, a pesar de que dijo que iba a reclamar ser tenido
en cuenta en las decisiones desde el Ejecutivo no lo ha hecho. La verdad que no
participa y eso hizo que se comentan algunos errores, que de haber sido
escuchada nuestra voz no hubiesen ocurrido.
-¿Hablar hoy de reelección es desviar la
conversación de los importante?
Discutirlo nos
aleja de la sociedad. No creo que la sociedad observe con demasiada ilusión una
discusión sobre las candidaturas cuando los problemas son tantos y falta tanto
para las elecciones.
-¿Pero muchas veces se focaliza en personas las
soluciones?
Pero no creo
que quienes promuevan esta discusión le estén haciendo un favor al presidente
ni a Cambiemos. Plantear de manera anticipada esto aleja a la sociedad de la
política. Tenemos que discutir otra cosa.
Por Nicolás
Albera
El dirigente
de la Unión Cívica Radical (UCR), Ricardo Alfonsín, visitó el último jueves
nuestra ciudad para participar de una cena debate sobre la necesidad del
fortalecimiento del radicalismo como partido político, que se organizó en el
salón del Sport Automóvil Club.
Previo a este
encuentro, Alfonsín fue entrevistado por LA VOZ DE SAN JUSTO, donde se animó a
responder qué pensaría su padre, el ex presidente Raúl Alfonsín sobre la marcha
del gobierno de Mauricio Macri y sus medidas, y también sobre la escasa
participación de la UCR en las decisiones del Ejecutivo siendo que forma parte
de la alianza que dirige el país.
"Me hicieron
varias veces la pregunta pero me negaba a responder porque es una pregunta de
difícil respuesta. Él (por su padre) no está para corregirme. Sin embargo hay
otros que contestan inmediatamente por sí o por no. Les pido a quienes dicen
que lo quieren que se abstengan de opinar, por la misma razón que comenté pero
además porque aunque acertaran con la respuesta estoy seguro que no darían los
mismos fundamentos", comenzó diciendo.
Alfonsín
prosiguió: "Hay otra pregunta que se le podría hacer a los radicales.
Pregunten, ¿qué hubiera hecho Alfonsín si hubiese sido presidente del partido
en estos dos años de gestión? Si se hubiera manejado desde el Comité Nacional
(que hoy está a cargo del gobernador de Mendoza, Alfrejo Cornejo, en reemplazo
de José Corral) como se hubiese manejado la recientemente reemplazada
conducción, de manera tan acrítica y tan poco cooperativa, acompañando
decisiones que a priori la UCR no debía acompañar. O si hubiera reclamado la
creación de un mecanismo hacia adentro de Cambiemos para discutir las
decisiones y en el caso de que nadie convenza a nadie llegar a soluciones de
compromiso procurando evitar que se cometan errores", comentó.
-Habla de un radicalismo tibio.
(Raúl)
Alfonsín hubiera conducido al partido de otra manera y hubiera tenido una
relación adentro de Cambiemos muy diferente. Nunca el radicalismo fue tan
acrítico con un gobierno del partido, ni cuando gobernó mi padre o De la Rúa.
No creo que la mejor manera de colaborar sea actuar como el convidado de
piedra, como lo hizo el Comité Nacional.
-Hubo medidas de este Gobierno que fueron criticadas
por la sociedad: las reformas jubilatorias y laboral, por ejemplo. ¿Al respecto
que hubiese opinado su padre?
No hubiera
acompañado la aprobación del mega DNU, la reforma jubilatoria, laboral ni
estaría de acuerdo con que la discusión de los salarios deba limitarse a una
inflación estimada en el 15 por ciento, cuando todos saben que va a ser
superada y no quieren reconocer la cláusula gatillo. Estoy muy seguro que
Alfonsín hubiera intentado convencer de que hay que cambiar esa política.
-Como referente del radicalismo visita distintos
lugares del país: ¿qué le dice la gente, los militantes?
La mayoría de
la gente me pide que el radicalismo se comprometa más y que comprenda que la
mejor manera de colaborar no es actuar como si el PRO y nosotros no tuviéramos
diferencias. Hay muchos que están preocupados por los resultados electorales en
el 2019. Por el temor a que Cambiemos pierda las elecciones, pero no creo que
la derrota o el triunfo dependa del hecho de que hacia adentro se discuta o se
procesen diferencias, o se delibere acerca de su solución. El triunfo dependerá
de que se acierte en la solución de los problemas y la posibilidad de acertar
se asegura más cuando hay debate interno. Hasta ahora no hubo pero espero que
con la renovación de la conducción nacional empiece a discutirse más hacia
adentro de Cambiemos. Y eso, no tengo dudas, lo va agradecer hasta el PRO.
-¿Cómo ve la marcha del Gobierno?
Es un país
difícil. Los indicadores económicos que existían en el 2015, aquellos que nos
hacían decir que la situación iba a ser compleja no son muy diferentes a los de
hoy. Los niveles de actividad económicos no mejoraron sustancialmente, el
desempleo lo mismo, la inflación tampoco se modifica sustancialmente, aunque
hay esperanzas respecto al futuro. Los niveles de inversión no son los que
necesita el país para reactivar la economía, hay déficit fiscal, comercial y un
proceso de endeudamiento que todavía no es preocupante pero que puede empezar a
encender luces amarillas en poco tiempo más sino somos capaces de poder mejorar
la recaudación para equilibrar las cuentas públicas. Estos problemas requieren
para su solución de grandes acuerdos de la totalidad de las fuerzas políticas y
de los sectores del trabajo y del capital. Esta fue mi posición desde que ganó
Cambiemos. Un acuerdo que defina prioridades, definir instrumentos con los que
enfrentaremos los problemas, definir plazos y discutir el esfuerzo que debe
hacer el sector de capital, del trabajo y del Estado. Esto nos permitiría
recuperar la confianza de la sociedad.
-No parece fácil.
No, porque
para ello hay que terminar con la grieta.
-¿Que el radicalismo tenga poca participación dentro
de las decisiones importantes es una falencia propia del partido o del PRO que
no los hace participar?
La UCR no está
haciendo todo lo que debería hacer. Nosotros no ganamos las Paso pero no
significa que no podamos influir en las decisiones. A mí no me interesan los
cargos. La UCR tiene especialistas en políticas públicas, cuadros técnicos para
aportar a la gestión pero no necesitamos estar en la gestión para aportar a sus
contenidos. El radicalismo, a pesar de que dijo que iba a reclamar ser tenido
en cuenta en las decisiones desde el Ejecutivo no lo ha hecho. La verdad que no
participa y eso hizo que se comentan algunos errores, que de haber sido
escuchada nuestra voz no hubiesen ocurrido.
-¿Hablar hoy de reelección es desviar la
conversación de los importante?
Discutirlo nos
aleja de la sociedad. No creo que la sociedad observe con demasiada ilusión una
discusión sobre las candidaturas cuando los problemas son tantos y falta tanto
para las elecciones.
-¿Pero muchas veces se focaliza en personas las
soluciones?
Pero no creo
que quienes promuevan esta discusión le estén haciendo un favor al presidente
ni a Cambiemos. Plantear de manera anticipada esto aleja a la sociedad de la
política. Tenemos que discutir otra cosa.