¿Por qué cuesta tanto bajar de peso y ser constante con la alimentación sana?
Muchas veces quedamos atrapados en un círculo vicioso: se comienza la dieta, ejercicios, pero después cae el entusiasmo, mayor consumo, sedentarismo y vuelven los kilos demás. Muchas personas desean bajar de peso y mantenerse en valores saludables, por lo que intentan con dietas, ejercicios y otras posibles soluciones, a veces con resultados que son temporarios.
La obesidad (exceso e inflamación del
tejido graso), ha alcanzado niveles epidémicos estos últimos años,
sobre todo en niños y niñas según informó la Organización
Mundial de la Salud (OMS), es una situación preocupante y se está
trabajando en su prevención.
Adoptar un plan de alimentación saludable que perdure en el tiempo es clave para controlar el peso, junto con la práctica de actividad física, aseguró en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO la licenciada en Nutrición, Antonella Crespo (MP-2864) del Sanatorio Argentino.
La nutricionista aseguró que es difícil bajar de peso porque "vivimos en un mundo de comidas rápidas al alcance de la mano, las cuales no aportan nutrientes esenciales y por el contrario están cargadas de grasas y calorías. No hay tiempo para la compra de alimentos, ni la preparación de la comida".
Agregó que en esto la publicidad de alimentos también influye en el consumidor y hay una mayor oferta de productos procesados. "Todo esto sumado a una forma de vida sedentaria, forman un círculo vicioso de mayor consumo y menor actividad física, que llevan a un exceso de peso", dijo.
"No" a las dietas rápidas
La licenciada Crespo advirtió que uno de los peligros ante esta situación son las dietas rápidas. "Este tipo de dieta no sirve porque como lo indica su nombre brindan una solución rápida, que no se puede mantener en el tiempo", dijo.
Afirmó que por lo general "no son dietas variadas, tienen muchas prohibiciones y aportan muy pocas calorías, por lo tanto, aportan muy pequeñas de alimentos; y no están diseñadas para mejorar los hábitos alimentarios en general".
"Quiénes se someten a este tipo de dietas bajan de peso en poco tiempo, pero cuando no la continúan también suben rápido y pueden hasta duplicar el peso bajado, el famoso efecto rebote", indicó.
La guía de un nutricionista
La licenciada Crespo recordó la importancia de la consulta con un nutricionista que brinde una guía a la hora de comenzar a adoptar hábitos saludables. "La idea es educar a las personas en hábitos alimentarios saludables para que perduren en el tiempo y los trasmitan a sus cercanos, brindando todas las herramientas al alcance", afirmó.
Recordó que en este desafío "el éxito del trabajo no es todo del profesional, sino que es compartido con el paciente, por eso la persona que consulta tiene que estar convencido y ser consiente del cambio de hábitos que realizará y fundamentalmente confiar en el profesional que lo va a acompañar en el proceso, como un alumno confía en su maestro".
Lic. Antonella Crespo
Comer bien cuando todo aumenta
Llegan los días primaverales y las deciciones de empezar a cambiar hábitos. En los últimos tiempos el difícil contexto económico que vivimos en el país influye en nuestros bolsillos y en la compra de alimentos.
¿Cómo hacer para comer saludable en medio de la crisis?. La licenciada Antonella Crespo remarcó que cuando compramos alimentos se deben tener en cuenta "por un lado la estacionalidad de las verduras y frutas. Por ejemplo, no salir a comprar sandía en pleno invierno porque seguramente vamos a pagar más del doble de lo que costará en verano que es su estación de cosecha. Por otro lado, no siempre es necesario comprar primeras marcas, podemos encontrar el mismo producto de una marca no muy conocida y a un mejor precio".
Agregó que otro punto importante es "hacer la compra justa y necesaria, poder planear la comida semanal, por ejemplo, para evitar desperdicios. También es una buena estrategia, la compra en cantidad de alimentos no perecederos cuando están de oferta y poder guardarlos, siempre y cuando estén dentro de la fecha de vencimiento".
Light no siempre es sinónimo de saludable
La diferencia entre light y diet
"Light no es sinónimo de saludable, no hay que confundirse", recordó la licenciada Crespo quien diferenció entre alimentos light y diet:
* Los alimentos diet son aquellos a los que se les quita algún nutriente como restricción para alguna enfermedad específica. Por ejemplo, los productos destinados para quienes tienen diabetes (que no poseen sacarosa o azúcar), los que no contienen gluten (recomendados para celiacos).
Cualquier otro nutriente puede ser retirado de un alimento diet: restricción de grasas o sodio para personas con hipertensión o con colesterol alto, por ejemplo.
* Los productos con etiqueta light, por su parte, son aquellos a los que se les redujo por lo menos el 25% de alguno de sus ingredientes o calorías en comparación con la versión original del producto. Un alimento light es un buen aliado en las dietas porque contiene menos calorías, pero no hay que exagerar. Todo light en exceso engorda igual. Hay que tener cuidado con los productos light porque hay algunos que conservan todavía muchas calorías. Si se va a elegir un producto light se debe buscar alguno cuya disminución calórica sea significativa, algunos tienen hasta 50% menos calorías. Por ejemplo, la margarina light, gaseosas y mayonesa light sí tienen una reducción importante. No obstante, aún siguen conteniendo sustancias químicas (en el caso de las gaseosas) o grasas (en la mayonesa) que no son aconsejables.
Consumir alimentos variados y sin excesos
Qué implica una nutrición saludable
La alimentación saludable mejora la calidad de vida en todas las edades y ayuda a prevenir enfermedades crónicas como la obesidad, hipertensión, diabetes, hasta algunos cánceres.
Eso implica:
* Consumir alimentos variados, de todos los grupos de alimentos (verduras, frutas, carnes, cereales, lácteos descremados, legumbres, huevo) y en porciones recomendadas según la edad, talla, actividad física, sexo. La porción es fundamental, los excesos no son buenos.
* Aplicar técnicas de cocción saludable de los alimentos, para aprovechar mejor los nutrientes, para evitar una sobrecarga de calorías.
* Hacer una correcta distribución de las comidas -desayuno, almuerzo, merienda y cena, y colaciones si fuesen necesarias).
* Realizar actividad física a diario, al menos una caminata de unos 20 minutos. Estós son concejos básicos para la población adulta sana. Es importante consultar con un nutricionista para resolver casos particulares.