Por la suba de la harina, las pastas aumentan un 15 % sus precios
En mayo ya habían tenido un ajuste similar. Entre los fabricantes de San Francisco hay preocupación por la caída en las ventas. La bolsa de harina pasó de costa $500 a $690 en solo 10 días.
La pasta es uno de los platos más habituales en las mesas de muchas familias. Su amplia variedad, versatilidad en la cocina, facilidad de preparación y propiedades nutricionales la han convertido en uno de los productos y platos preferidos en el día a día de muchos consumidores.
La fuerte suba del dólar y la consiguiente devaluación del peso ocurrida tras las elecciones Paso, generaron un gran impacto en los precios de los insumos y costos fijos de los fabricantes que hicieron que las pastas frescas y secas se comercialicen hoy con una suba promedio del 15 % en sus precios en nuestra ciudad, de acuerdo a lo informado del sector.
En lo que va de 2019, el precio de las pastas se vio incrementado en un promedio que oscila entre un 60 y un 70 %.
El rubro ya había tenido que actualizar sus precios en mayo con subas similares, lo que acumula ahora incrementos superiores al 40 % en sólo tres meses, algo que afecta sensiblemente el volumen de ventas de la actividad que ya registraban caídas del 25 % en el primer semestre del año.
La suba de la harina es el principal factor. La materia prima aumentó un 35 y un 40 %, dependiendo la marca, en los últimos diez días.
Desde el molino Carlos Boero Romano indicaron a LA VOZ DE SAN JUSTO que la bolsa de 25 kilogramos de harina 0000 -que es la que comúnmente usan los fabricantes de pastas- pasó de costar $500 a $690. En tanto, la bolsa de 25 kilos pero de harina 000, ahora cuesta $620 cuando hasta el 12 de agosto valía $450.
"Si aumentamos mucho los precios, no
podemos vender y si por otro lado no aumentamos, tenemos que cerrar las
puertas", dijo Sáez.
Imposible no trasladar el aumento a los precios
Ante esta situación, es insostenible para los fabricantes poder mantener los precios sin variantes.
Martín Ferreyra Tassi, de la fábrica de pastas "La Esquina de los Tassi", calificó como "inevitable" caer en el aumento del precio final del producto "cuando aumenta una materia prima tan directa como es la harina".
Según explicó a este diario el entrevistado, el incremento de la harina obligó a que "hagamos aumentos paulatinos" en el precio de los productos elaborados.
"Se nos está achicando el margen de ganancias porque si bien el aumento se refleja, también suben los costos laborales", continuó Tassi.
El precio de la harina aumentó con la suba
del dólar y ya se trasladó a las pastas
"En este momento, con estas condiciones de la economía, estamos sobre el límite de la rentabilidad", añadió.
Y alertó que la crisis económica afectó "notoriamente" las ventas en la industria de la fabricación de pastas frescas: "En los últimos tres años estamos viendo de manera paulatina una baja en las ventas".
Por su parte, Alicia Sáez, de la fábrica de pastas frescas Módena, coincidió con el diagnóstico al indicar que "el aumento de la harina nos está afectando bastante porque esto nos obliga a recargar. De todas maneras, no podemos aumentar mucho porque si no, no podemos vender".
Esta situación la llevó a destacar que los fabricantes de pastas frescas "estamos en el límite" entre una rentabilidad que le permita sobrevivir y por otro lado, conservar los clientes con precios todavía accesibles.
Martín Ferreyra Tassi, fabricante de pastas
La alta carga impositiva y los costos laborales
"Estamos atravesando por un verdadero dilema. Si aumentamos mucho los precios, no podemos vender y si por otro lado no aumentamos, tenemos que cerrar las puertas", siguió Sáez.
Los costos fijos que representan los empleados en la firma es uno de los problemas más acuciantes a la hora de fijar el precio del producto final. "El costo laboral nos está matando", graficó la entrevistada para luego agregar que "esto es parte de los costos fijos junto con los impuestos que están altísimos".
Precios y variedades
Los tallarines son la pasta fresca más buscada. Los especialistas sostienen que con un kilo de esa pasta, que tiene un costo que oscila entre los $100 y $ 130, pueden elaborarse seis porciones abundantes. Si se le agrega una salsa boloñesa, habrá que invertir entre $ 95 y $ 100 más; entre $ 60 y $ 70 para la crema y entre $ 60 $ 70 para el queso rallado. En total, el kilo de tallarines con salsa boloñesa, crema y queso tiene un costo estimado entre $ 350 y $ 365, es decir, un promedio de $ 60 por persona.