No hay cierres de hoteles a la vista pero la situación sigue complicada
En 2020 tres hoteles cerraron las puertas en forma definitiva y hubo despidos, este año no los hubo, sin embargo, están lejos de salir de la crisis. Lo que se gana va directo al mantenimiento, pago de servicios y salarios.
Por Ivana Acosta | LVSJ
El año pasado después que iniciara el Distanciamiento
Social Preventivo y Obligatorio (DISPO) los hoteles de San Francisco, al igual
que en el país, entraron en una vorágine decadente a nivel económico que
terminó con el cierre de cuatro espacios de este tipo (tres en 2020).
En la actualidad su situación es todavía compleja y difícil de transitar porque, aunque pueden trabajar su realidad dista de aquella previa a marzo del año pasado, de hecho, han fortalecido los espacios gastronómicos con que contaban para tener más ingresos.
Pese a todo esto hay un gran esfuerzo detrás de atravesar la situación lo mejor que se pueda sin cerrar ni despedir a la gente y es por eso que en los hoteles activos no hubo más desvinculaciones contractuales porque los ingresos los dueños los destinan básicamente al mantenimiento, servicios y pago de salarios.
"En los hoteles trabajan muy poco y apenas están subsistiendo, mantienen la esperanza de que cuando la gente salga de vacaciones al estar la ciudad en una ruta importante generalmente pernoctan a veces una noche", explicó a LA VOZ DE SAN JUSTO Juan Molina, secretario general de Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (Uthgra) San Francisco,
Recuperación lenta
No contar con eventos masivos como sucede con el teatro, la música o en verano los festivales, tampoco juega a favor de los hoteleros y es por eso que si se avanzara como ahora hacia la normalidad las chances de recuperación mejorarían.
Juan Molina: "En los hoteles trabajan muy poco y apenas están subsistiendo".
"Es un momento terrible para ellos - expresó Molina-. Sin embargo, dentro de este rubro no hubo más despidos, los dueños de hoteles sí han manifestado el sacrificio tremendo que hacen para mantenerlos, estamos esperanzados que desde septiembre las cosas se puedan mover más y haya más aforo en las actividades".
Por el momento esperan que se siga adelante contra la normalización de las actividades y que no se desarrolle otra ola de casos o influya la variante Delta de coronavirus. Acerca de esto subrayó que "la mayoría de los empleados en edad de vacunarse ya lo han hecho porque entienden que es una forma de cuidarse ellos y a la sociedad".
Mejor en gastronomía
De acuerdo a las expresiones de Molina, "en bares y restaurantes o cafés se está trabajando bien" y destacó: "Este año tuvimos una buena temporada porque la gente primero en el verano no se iba de vacaciones y volcó el dinero al esparcimiento mediante la gastronomía; en estos meses hay un buen momento con afluencia de gente principalmente porque la gente se anima a salir si tiene al menos una vacuna".
El referente de los trabajadores de Uthgra valoró positivamente que se están abriendo convocatorias para cubrir puestos laborales que se perdieron el año pasado y que "la situación podría ser mejor si pudiera haber eventos en la ciudad como cumpleaños y casamientos, ya que hay una franja de personas que lo hacen de forma eventual en estos casos y ellos son los más complicados".
En el análisis de la situación consideró que el sector mejoró en cuanto a la afluencia de gente por las intensivas campañas de vacunación de nuestra municipalidad y en Frontera: "Tiempo atrás veíamos que la gente grande no se animaba tanto a salir a un comedor o negocios relacionados, pero ahora sí se anima más cuando tienen aunque sea una dosis. Se sienten un poco más seguros".
El sector perdió 90 mil puestos de trabajo en los últimos dos años
Los restaurantes y hoteles de todo el país perdieron 90 mil empleos formales durante los últimos dos años, ya que se trata de uno de los sectores más golpeados por la pandemia. De acuerdo con un informe elaborado por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), respecto de 2020 la pérdida de empleos registrados es -este año- de 32 mil puestos y respecto a 2019, de 58 mil puestos; la Ciudad de Buenos Aires (CABA) es la jurisdicción más perjudicada por la situación.
En 2020, la pandemia tuvo un fuerte impacto negativo en la actividad económica, situación que continúa hasta ahora: durante el año pasado, el PBI del sector cayó un 49,2% y el nivel de actividad de mayo 2021 fue un 57% inferior al de igual mes de 2019, según el reporte.
El empleo asalariado formal en hoteles y restaurantes inició un fuerte descenso en marzo de 2020 y muestra un mínimo en mayo de 2021, que es el último dato disponible: en el cuarto trimestre de 2020 el empleo fue de 216.560 puestos -47.797 menos que en el mismo trimestre de 2019 (caída interanual de -18,1%). Del último dato de mayo 2021 (201.725 puestos) se aprecia que es inferior en 32.375 puestos al mismo mes de 2020 (caída interanual de 13,8%). Si se compara con mayo de 2019, la pérdida de puestos de trabajos es de 58.022 (-22,3%), detalló el IARAF.
La actividad se concentra en la región pampeana (Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y la Pampa), provincias que tienen el 58,6% de la población y el 43,7% del empleo formal privado. En este caso, se destaca la ciudad de Buenos Aires, quintuplicando el promedio nacional (24 versus 5); le siguen la Patagonia (8), Cuyo (4) y Pampeana (4) y, e el extremo inferior, se encuentran el Noroeste (NOA, 3) y el Noreste (NEA, 2), de acuerdo con el informe.
Con respecto a la estructura productiva formal privada, a nivel país hoteles y restaurantes participa con el 3,7% del total del empleo formal (al cuarto trimestre de 2020). Y al considerar por regiones, esta actividad tiene una mayor participación en la Patagonia (5,2%), CABA (4,9%) y Cuyo (3,9%); con menor participación se encuentran la región Pampeana (3,3%) y NOA (3,3%) y NEA (3,2%), puntualizó el IARAF. A la vez, la entidad señaló que otra caracterización importante es la descomposición por rubros: se aprecia que comparativamente los servicios de alojamiento son más importantes en la Patagonia (41,6%), NEA (40,0%) y Cuyo (36,0%).
Por el contrario, los servicios de expendio de comidas y bebidas son más importantes en la región Pampeana (82,5%), CABA (82,3%) y NOA (68,8%).
En cuanto a la dinámica por región comparando la variación interanual en el cuarto trimestre de 2020 respecto al cuarto trimestre de 2019, el informe reveló que la cantidad de asalariados registrados en este sector tuvieron una caída superior al promedio en CABA (-19,9%) y NOA (-18,9%). Menores caídas se observaron en Cuyo (-17,4%), Patagonia (-17,7%), Pampeana (-17,8%) y el NEA (-17,9%).