Leishmaniasis: ¿Cómo cuidar a nuestras mascotas y prevenirla?

Los controles veterinarios, la vacunación y castración son fundamentales, además de proteger a perros y gatos con repelentes que eviten la picadura del flebótomo vector de la enfermedad. El veterinario Roberto Ferrero explica qué hay que tener en cuenta con los animales en casa.
Isabel Fernández|LVSJ
La leishmaniasis es una enfermedad parasitaria que afecta tanto a animales como a personas. Aunque está muy relacionada con los perros, también pueden sufrirla gatos y otros animales salvajes como ratas, zorros, comadrejas, etc. Nuestras mascotas son las principales afectadas y si no se trata a tiempo puede resultar muy peligrosa para los humanos.
Se trata de una zoonosis, se transmite a través de la picadura de un insecto muy pequeño denominado flebótomo o conocido también como torito, plumilla o carachai.
Cuando este insecto pica a un perro infectado con el parásito que causa leishmaniasis, al tomar su sangre también lo ingiere. La próxima vez que pique a otro perro, el parásito lo infectará.
La enfermedad en los seres humanos se produce cuando un flebótomo se alimenta de la sangre de un perro infectado con el parásito y luego pica a una persona. No se transmite de persona a persona ni por el contacto directo con los animales.
En la provincia de Córdoba, en lo que va del 2022 se detectaron 10 perros con infección transmitida por flebótomos. A esos casos se suman a otros seis registrados entre 2019 y 2021, lo que suma un total de 16 casos confirmados. Hasta el momento no se detectaron casos en personas.
Ante esta situación, ¿cómo debemos cuidar a nuestras mascotas para prevenir esta enfermedad?. El médico veterinario Roberto Ferrero del Centro de Zoonosis dependiente de la Secretaría de Salud explicó a LA VOZ DE SAN JUSTO que para evitar la propagación de la leishmaniasis "se deben realizar controles veterinarios a los animales, mantenerlos en buenas condiciones de higiene y reducir la proliferación de los flebótomos que contagian la enfermedad".
"El contagio se produce siempre a través del flebótomo que es el vector -aclaró-, no se produce por contacto directo con los animales, ni de persona a persona".
Advirtió que el flebótomo responsable de la enfermedad "ya está presente en la provincia, en la ciudad de Córdoba y en Parque Síquiman por lo que es posible que pueda afectar a nuestras mascotas. La leishmania es una enfermedad emergente que fue ganando espacio a lo largo del país por los cambios climáticos, ecológicos, demográficos, viajes y como causa de distintos proyectos de desarrollo".
Ferrero dijo que se trata de una enfermedad zoonótica "por lo que se debe realizar el control ambiental del flebótomo y asegurarse que las mascotas, perros y gatos, sean tratados con antiparasitarios y colocarles collares contra la leishmania o utilizar repelentes veterinarios para evitar que el flebótomo pique al animal. Además si se va a viajar con la mascota es importante trasladarlo con todas las medidas de seguridad e higiene para prevenir".
Remarcó que además es importante la castración de las mascotas ya que la leishmania "también se transmite de manera vertical a través de la placenta, por vía sexual y transfusiones de sangre".
"Los perros actúan como reservorios del parásito y, por lo tanto, son los transmisores de estos microorganismos a los flebótomos. Un perro infectado no tiene cura y, aunque no presente síntomas, puede transmitir el leishmania infantum durante toda su vida", detalló.
Con respecto a los repelentes que se pueden utilizar para proteger a las mascotas del flebótomo, Ferrero dijo que es "importante usar productos veterinarios y también específicos para cada uno, no es aconsejable utilizar la misma droga indicada para los perros, en los gatos. Los medicamentos se tienen que comprar exclusivamente en veterinarias".
Cómo se diagnostica
La enfermedad tiene presentaciones cutáneas, viscerales y viscerocutánea. Ferrero afirmó que el diagnóstico "se realiza por medio de signos clínicos en el animal, pruebas serológicas, PCR, cultivos, etc. y su diagnóstico es de denuncia obligatoria al Senasa".
Finalmente explicó que el tratamiento "se realiza durante grandes períodos de tiempo".