La realidad virtual llega al mundo del fitness
La realidad virtual llega al mundo del fitness
Existen aplicaciones pensadas para que el usuario haga ejercicio sin tener que salir de su casa.
Existen aplicaciones pensadas para que el usuario haga ejercicio sin tener que salir de su casa.
Estudios
demostraron que la realidad virtual puede ayudar a las personas a desarrollar hábitos
saludables, por lo que en las tiendas en línea ya se pueden encontrar decenas
de juegos y aplicaciones pensadas para que el usuario se levante del sofá y
haga ejercicio sin tener que salir de su casa.
Muchos
investigadores médicos están adoptando la realidad virtual para distintos usos
terapéuticos, como tratar los trastornos de estrés postraumático, mantener la
agudeza mental de las personas mayores y aliviar el dolor de las personas que
sufren quemaduras.

Por este motivo,
los fundadores de Black Box VR se pusieron manos a la obra para crear el primer
juego de fitness de realidad virtual que no está centrado en los ejercicios aeróbicos
sino en el desarrollo de la resistencia.
"Los
atletas son capaces de hacer frente al dolor, superar la adversidad y alcanzar
nuevas metas como por arte de magia. Tienen una mentalidad muy fuerte. Al
entrenar con realidad virtual, el 80% del cerebro se centra en la visión. Si se
aplica el estímulo necesario, es fácil neutralizar la sensación de dolor",
dijo Preston Lewis, cofundador de Black Box VR.

Debido a la
propia naturaleza de la realidad virtual, todos los juegos requieren hacer algún
tipo de ejercicio, no solo los de fitness.
El departamento
de kinesiología de la Universidad Estatal de San Francisco puso en marcha el
Instituto de Salud y Realidad Virtual para desarrollar métodos con los que
probar y evaluar los juegos en función de la cantidad de calorías que permiten
quemar en una sesión.
Aaron Stanton,
asesor de empresas emergentes del Silicon Valley que se dedica a la realidad
virtual y aumentada, explicó que las partes interesadas en el sector del
fitness "empezarán a competir muy pronto por una cuota de mercado de la
realidad virtual" y vaticinó que "en cinco años no habrá ni un solo
gimnasio que no ofrezca actividades relacionadas con la realidad virtual o
aumentada".
"Ya hay
decenas de juegos de fitness que permiten hacer ejercicios aeróbicos con
plataformas como HTC Vive y Oculus Rift.

Los jugadores
utilizan mandos y guantes en todo tipo de juegos para realizar acciones que
consumen calorías, como dar puñetazos o disparar con un arco" comenta
Ricardo Vidal, Director de Ventas para Latinoamérica y Caribe de la marca de
memorias para gaming Ballistix.
Sin embargo, no
hay ningún juego que sustituya un entrenamiento de pesas.
Y eso es justo lo que quiere cambiar Black Box
VR. La empresa planea abrir sus propios gimnasios boutique.
Los clientes
entrarán en una sala individual (o caja negra) donde se pondrán el casco de
realidad virtual HTC Vive y calibrarán varias máquinas de musculación según su
altura y su peso.

El sistema
recordará el historial de entrenamiento de cada usuario y ajustará los ejercicios
para que ofrezcan la resistencia adecuada y de esta forma, los usuarios irán
mejorando su forma física.
Un entrenador
virtual les enseñará técnicas para que hagan sus rutinas de forma segura y
eficaz. Por ejemplo, si un jugador solo hace seis de doce repeticiones, sus
ataques en el juego no serán tan fuertes.
La idea consiste
en que el progreso esté ligado a la forma física de los usuarios, así se crea
un sistema muy satisfactorio que recompensa el esfuerzo.
Cuando uno logra
subir de nivel, recibe una mayor dosis de dopamina que lo impulsa a volver al día
siguiente, lo cual estimula la motivación y permite aumentar la exigencia en el
próximo ejercicio.
Estudios
demostraron que la realidad virtual puede ayudar a las personas a desarrollar hábitos
saludables, por lo que en las tiendas en línea ya se pueden encontrar decenas
de juegos y aplicaciones pensadas para que el usuario se levante del sofá y
haga ejercicio sin tener que salir de su casa.
Muchos
investigadores médicos están adoptando la realidad virtual para distintos usos
terapéuticos, como tratar los trastornos de estrés postraumático, mantener la
agudeza mental de las personas mayores y aliviar el dolor de las personas que
sufren quemaduras.

Por este motivo,
los fundadores de Black Box VR se pusieron manos a la obra para crear el primer
juego de fitness de realidad virtual que no está centrado en los ejercicios aeróbicos
sino en el desarrollo de la resistencia.
"Los
atletas son capaces de hacer frente al dolor, superar la adversidad y alcanzar
nuevas metas como por arte de magia. Tienen una mentalidad muy fuerte. Al
entrenar con realidad virtual, el 80% del cerebro se centra en la visión. Si se
aplica el estímulo necesario, es fácil neutralizar la sensación de dolor",
dijo Preston Lewis, cofundador de Black Box VR.

Debido a la
propia naturaleza de la realidad virtual, todos los juegos requieren hacer algún
tipo de ejercicio, no solo los de fitness.
El departamento
de kinesiología de la Universidad Estatal de San Francisco puso en marcha el
Instituto de Salud y Realidad Virtual para desarrollar métodos con los que
probar y evaluar los juegos en función de la cantidad de calorías que permiten
quemar en una sesión.
Aaron Stanton,
asesor de empresas emergentes del Silicon Valley que se dedica a la realidad
virtual y aumentada, explicó que las partes interesadas en el sector del
fitness "empezarán a competir muy pronto por una cuota de mercado de la
realidad virtual" y vaticinó que "en cinco años no habrá ni un solo
gimnasio que no ofrezca actividades relacionadas con la realidad virtual o
aumentada".
"Ya hay
decenas de juegos de fitness que permiten hacer ejercicios aeróbicos con
plataformas como HTC Vive y Oculus Rift.

Los jugadores
utilizan mandos y guantes en todo tipo de juegos para realizar acciones que
consumen calorías, como dar puñetazos o disparar con un arco" comenta
Ricardo Vidal, Director de Ventas para Latinoamérica y Caribe de la marca de
memorias para gaming Ballistix.
Sin embargo, no
hay ningún juego que sustituya un entrenamiento de pesas.
Y eso es justo lo que quiere cambiar Black Box
VR. La empresa planea abrir sus propios gimnasios boutique.
Los clientes
entrarán en una sala individual (o caja negra) donde se pondrán el casco de
realidad virtual HTC Vive y calibrarán varias máquinas de musculación según su
altura y su peso.

El sistema
recordará el historial de entrenamiento de cada usuario y ajustará los ejercicios
para que ofrezcan la resistencia adecuada y de esta forma, los usuarios irán
mejorando su forma física.
Un entrenador
virtual les enseñará técnicas para que hagan sus rutinas de forma segura y
eficaz. Por ejemplo, si un jugador solo hace seis de doce repeticiones, sus
ataques en el juego no serán tan fuertes.
La idea consiste
en que el progreso esté ligado a la forma física de los usuarios, así se crea
un sistema muy satisfactorio que recompensa el esfuerzo.
Cuando uno logra
subir de nivel, recibe una mayor dosis de dopamina que lo impulsa a volver al día
siguiente, lo cual estimula la motivación y permite aumentar la exigencia en el
próximo ejercicio.