La justicia ordenó prohibir los delivery en bicicleta en Buenos Aires
La justicia ordenó prohibir los delivery en bicicleta en Buenos Aires
Cadenas como Rappi o Glovo no cumplen con elCódigo
de Tránsito y Transporte de la capital. La Jefatura de Gobierno porteño apelará el fallo.
Cadenas como Rappi o Glovo no cumplen con elCódigo
de Tránsito y Transporte de la capital. La Jefatura de Gobierno porteño apelará el fallo.
Télam
La Justicia local ordenó hoy al Gobierno porteño que prohíba
el funcionamiento de las empresas de delivery en bicicleta en la Ciudad de
Buenos Aires hasta que cumplan con el Código de Tránsito y Transporte, pero el
gobierno de la ciudad anunció que no acatará la medida porque no está firme y
será apelada.
Las empresas de delivery afectadas por la resolución del
juzgado N° 2 en lo Contencioso Administrativo y Tributario, a cargo de Andrés
Gallardo, son "Rappi", "Glovo" y "Pedidos Ya".
Los repartidores de estas firmas no podrán volver a las
calles hasta que no se garantice "que todos circulen utilizando
casco", que "la caja portaobjeto esté anclada a la moto o bicicleta y
no en la espalda" del conductor, que posean "seguro de vida y
accidentes", "libreta sanitaria" y que los rodados "cuenten
con adecuada señalización mínima (luminosa y refractaria)".
La Secretaría de Transporte del gobierno porteño anunció hoy
que "apelará la medida del juez Gallardo que busca prohibir la actividad
de empresas de reparto y mensajería y lo recusará por abuso de autoridad,
parcialidad y prejuzgamiento"
"En este contexto, el gobierno porteño no debe acatar
la medida porque no está firme y va a ser apelada", informó la Secretaría
en un comunicado.
En su fallo, Gallardo, aseguró también ordenó que "se
diseñe y ejecute un plan de contingencia económica y social para compensar la
reducción de ingresos de los repartidores hasta que se normalice la situación,
a través del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat porteño"
La secretaría a cargo de Juan José Méndez explicó que con la
sanción de la Ley 5526 "se creó el Registro Único de Transporte de
Motovehículos y/o Rodados (RUTRAMyC) que tiene como objetivo principal velar
por la seguridad vial de las personas que realizan la actividad de mensajería y
reparto a domicilio de sustancias alimenticias como también la regularización
de la misma".
Indicó además que la ley "se promulgó en el 2016 pero
no entró en vigencia hasta que en conjunto con el sector se trabajó en un
decreto reglamentario que se dictó a mediados del 2018"
En ese decreto "se estipula un plazo de 180 días
hábiles para que los prestadores puedan completar los requisitos exigidos por
la normativa. Al día de la fecha hay varias empresas que dieron inicio al
trámite para la inscripción en el registro"
A requerimiento del juez Gallardo, la Policía de la Ciudad
realizó un relevamiento de más de 400 ciclorodados que arrojó que el 77%
circula con el portaobjetos cargado en su espalda, el 70% desempeña tareas sin
seguro alguno, y el 67% circula sin casco, según publica el portal de noticias
del Consejo de la Magistratura porteño, Ijudicial.
En función de ese relevamiento, Gallardo indicó que el
servicio de mensajería urbana y reparto a domicilio de sustancias en CABA por
parte de las firmas prestatarias Rappi Arg. S.A.S., Kadabra S.A.S. (Glovo) y
Pedidos Ya S.A. "se realiza en franca transgresión a la normativa vigente
y sin dar cumplimiento a las normas básicas de seguridad".
Gallardo se refiere al Código de Tránsito y Transporte, que
estipula la obligación de usar casco e indumentaria con bandas reflectivas;
contar con los seguros obligatorios; que la caja portaobjeto cumpla con
determinadas características y esté firmemente amarrada al rodado.
Juan Manuel Ottaviano, abogado de la Asociación de Personal
de Plataformas (APP), consideró "auspicioso que un fallo ponga blanco
sobre negro respecto del incumplimiento de las normas laborales, tributarias y
municipales de las plataformas".
Pero añadió que son "cautelosos respecto de los efectos
del fallo" porque temen que "todo el costo de la prohibición se
cargue sobre los trabajadores".
"Cada día recibimos decenas de denuncias de
trabajadores que son parados en la calle como si fueran motochorros y deben
pagar multas que deberían aplicarse a los empleadores", contó Ottaviano. Y
agregó: "el problema es que (los repartidores) no son considerados como
empleados por las empresas".
A su vez, el Ministerio de Salud porteño sumó información al
expediente, al advertir que en el lapso de un mes, y siempre hablando del
sistema público de Salud de la Ciudad, se atendieron 25 víctimas de accidentes
en la vía pública, mientras desempeñaban su tarea de delivery.
Javier, un venezolano que llegó a la Argentina hace un año y
reparte en bicicleta para PedidosYa, dijo hoy a Télam: "Nos enteramos por
la radio que nos van a exigir libreta sanitaria, pero hasta ahora desde la
empresa nadie avisó y estamos trabajando como todos los días".
"Algunos tenían miedo o pensaban que la policía nos iba
a parar en la calle, pero hasta ahora se trabaja bien", agregó Martín,
también venezolano, quien llegó a la Argentina hace dos semanas y reparte en
bicicleta para Rappi con la mochila y el usuario que le prestó un compatriota.
"Me parece bien que haya medidas de seguridad, pero si
van a exigir más cosas es la empresa la que se tiene que hacer cargo",
afirmó.
"Llegué hace poco y éste es el único trabajo que
encontré, hay mucha gente que está como yo y no pueden dejarnos sin
trabajar", concluyó.
La Justicia local ordenó hoy al Gobierno porteño que prohíba
el funcionamiento de las empresas de delivery en bicicleta en la Ciudad de
Buenos Aires hasta que cumplan con el Código de Tránsito y Transporte, pero el
gobierno de la ciudad anunció que no acatará la medida porque no está firme y
será apelada.
Las empresas de delivery afectadas por la resolución del
juzgado N° 2 en lo Contencioso Administrativo y Tributario, a cargo de Andrés
Gallardo, son "Rappi", "Glovo" y "Pedidos Ya".
Los repartidores de estas firmas no podrán volver a las
calles hasta que no se garantice "que todos circulen utilizando
casco", que "la caja portaobjeto esté anclada a la moto o bicicleta y
no en la espalda" del conductor, que posean "seguro de vida y
accidentes", "libreta sanitaria" y que los rodados "cuenten
con adecuada señalización mínima (luminosa y refractaria)".
La Secretaría de Transporte del gobierno porteño anunció hoy
que "apelará la medida del juez Gallardo que busca prohibir la actividad
de empresas de reparto y mensajería y lo recusará por abuso de autoridad,
parcialidad y prejuzgamiento"
"En este contexto, el gobierno porteño no debe acatar
la medida porque no está firme y va a ser apelada", informó la Secretaría
en un comunicado.
En su fallo, Gallardo, aseguró también ordenó que "se
diseñe y ejecute un plan de contingencia económica y social para compensar la
reducción de ingresos de los repartidores hasta que se normalice la situación,
a través del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat porteño"
La secretaría a cargo de Juan José Méndez explicó que con la
sanción de la Ley 5526 "se creó el Registro Único de Transporte de
Motovehículos y/o Rodados (RUTRAMyC) que tiene como objetivo principal velar
por la seguridad vial de las personas que realizan la actividad de mensajería y
reparto a domicilio de sustancias alimenticias como también la regularización
de la misma".
Indicó además que la ley "se promulgó en el 2016 pero
no entró en vigencia hasta que en conjunto con el sector se trabajó en un
decreto reglamentario que se dictó a mediados del 2018"
En ese decreto "se estipula un plazo de 180 días
hábiles para que los prestadores puedan completar los requisitos exigidos por
la normativa. Al día de la fecha hay varias empresas que dieron inicio al
trámite para la inscripción en el registro"
A requerimiento del juez Gallardo, la Policía de la Ciudad
realizó un relevamiento de más de 400 ciclorodados que arrojó que el 77%
circula con el portaobjetos cargado en su espalda, el 70% desempeña tareas sin
seguro alguno, y el 67% circula sin casco, según publica el portal de noticias
del Consejo de la Magistratura porteño, Ijudicial.
En función de ese relevamiento, Gallardo indicó que el
servicio de mensajería urbana y reparto a domicilio de sustancias en CABA por
parte de las firmas prestatarias Rappi Arg. S.A.S., Kadabra S.A.S. (Glovo) y
Pedidos Ya S.A. "se realiza en franca transgresión a la normativa vigente
y sin dar cumplimiento a las normas básicas de seguridad".
Gallardo se refiere al Código de Tránsito y Transporte, que
estipula la obligación de usar casco e indumentaria con bandas reflectivas;
contar con los seguros obligatorios; que la caja portaobjeto cumpla con
determinadas características y esté firmemente amarrada al rodado.
Juan Manuel Ottaviano, abogado de la Asociación de Personal
de Plataformas (APP), consideró "auspicioso que un fallo ponga blanco
sobre negro respecto del incumplimiento de las normas laborales, tributarias y
municipales de las plataformas".
Pero añadió que son "cautelosos respecto de los efectos
del fallo" porque temen que "todo el costo de la prohibición se
cargue sobre los trabajadores".
"Cada día recibimos decenas de denuncias de
trabajadores que son parados en la calle como si fueran motochorros y deben
pagar multas que deberían aplicarse a los empleadores", contó Ottaviano. Y
agregó: "el problema es que (los repartidores) no son considerados como
empleados por las empresas".
A su vez, el Ministerio de Salud porteño sumó información al
expediente, al advertir que en el lapso de un mes, y siempre hablando del
sistema público de Salud de la Ciudad, se atendieron 25 víctimas de accidentes
en la vía pública, mientras desempeñaban su tarea de delivery.
Javier, un venezolano que llegó a la Argentina hace un año y
reparte en bicicleta para PedidosYa, dijo hoy a Télam: "Nos enteramos por
la radio que nos van a exigir libreta sanitaria, pero hasta ahora desde la
empresa nadie avisó y estamos trabajando como todos los días".
"Algunos tenían miedo o pensaban que la policía nos iba
a parar en la calle, pero hasta ahora se trabaja bien", agregó Martín,
también venezolano, quien llegó a la Argentina hace dos semanas y reparte en
bicicleta para Rappi con la mochila y el usuario que le prestó un compatriota.
"Me parece bien que haya medidas de seguridad, pero si
van a exigir más cosas es la empresa la que se tiene que hacer cargo",
afirmó.
"Llegué hace poco y éste es el único trabajo que
encontré, hay mucha gente que está como yo y no pueden dejarnos sin
trabajar", concluyó.