Estudiantes del Cusf destacan las posibilidades de una carrera que sigue cimentando su espacio de legitimidad
En el marco de la Semana del Comunicador, que tuvo lugar del 5 al 9 de junio, visitamos el Centro Universitario San Francisco, allí donde la carrera de Comunicación Social encontró un genuino espacio, alternativo a plazas como Córdoba o Santa Fe.
Por Juamps Lídiam
Vox populi una pregunta se repite y los estudiantes de Comunicación Social, en ocasiones, ensayan o improvisan respuestas del tipo 'bueno, sí, comunicación es periodismo, pero también...'. Esto sucede por una sencilla razón, se trata de una carrera que sigue buscando, más bien cimentando su espacio de legitimidad.
Asimismo, tres estudiantes de quinto año: Ezequiel Trucco, Franco Droetta e Ivana Acosta destacan las virtudes de la mentada carrera e instan a adolescentes que se encuentran por finalizar el nivel secundario, indecisos o no, a sumarse a una profesión "que brinda muchas posibilidades".
Ezequiel recuerda su ingreso: "Con mis compañeros comenzamos a pensar qué íbamos a hacer al terminar el secundario, a mí siempre me gustó el periodismo porque estamos en contacto siempre con los medios, se ve la televisión, se escucha la radio o se lee el diario. En mi caso, como canto tango de chiquito, tuve la oportunidad de visitar medios por notas que me hicieron y me llamaban la atención esos lugares de trabajo".
"Me decidí por esto -prosigue-, me iba a ir a vivir a Santa Fe a estudiar, pero se abrieron dos posibilidades, una en Uces (Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales), la Licenciatura en Periodismo, y Comunicación Social, acá. Como ninguna de las dos eran seguras (debido a la incertidumbre de si contarían con un determinado número de alumnos para su factibilidad) me anoté a las dos, la convocatoria fue mucho mayor en el Cusf, por eso, quince días antes, me llamaron de Uces diciendo que no iba a abrir periodismo".
Ezequiel no duda, tiene preferencia por la radio, no obstante admite que, transcurridos cinco años, se encuentra "más abierto a otras posibilidades que antes, porque la carrera te abre la mente".
Una carrera dinámica, abierta y flexible
Ivana tenía en claro lo siguiente: le gustaba escribir, hablar, preguntar. Para ello aduce que tenía un abanico de carreras para elegir. "Sucedió que como tengo un hermano más grande, que empezó Ciencias Políticas y Abogacía en Río Cuarto, me fui con él, seguí su mismo camino, hasta que él fue papá y me volví. Y me puse a seguir abogacía en Uces".
"Si bien me gusta abogacía, Comunicación es una carrera mucho más dinámica, más abierta y flexible, hasta me gusta más la Universidad en sí", admite la comunicadora y añade: "Cuando se abrió la carrera le dije a mi mamá que me iba a anotar, ella me dijo que esperara a terminar la otra, pero le dije que no porque Comunicación era lo que verdaderamente me llamaba".
Hoy Ivana sigue estudiando ambas carreras. "Pasados cinco años, me gustan otras cosas además de escribir y a las que pienso dedicarme, como por ejemplo la docencia y la investigación, análisis de medios y todo lo relacionado a la ley de medios me interesa, por ese lado puedo vincular a la comunicación con abogacía".
"Hacer tu propio camino"
Al igual que Ezequiel, Franco se anotó a las carreras del Cusf y Uces. "Desde que uno elige la especialidad en el secundario sabe para qué lado apunta, yo seguí Comunicación Social y Humanidades, era lo que más me gustaba".
No obstante, tras obtener su título de bachiller, Franco debería esperar un año para entrar a Comunicación. "Cuando terminé el secundario en 2011 la carrera todavía no estaba y me incliné por Contador en Uces, pero me costó la parte dura de las matemáticas y dejé".
"Trabajé medio año y luego me enteré que iba a abrir en Uces la Licenciatura en Periodismo. Me pasó lo mismo, me avisaron que no se abría la carrera por falta de alumnos y, sobre último momento, pude gestionar mi ingreso acá, porque mi mamá justo se había anotado. Hicimos los cursillos juntos, aunque después ella no pudo seguir", comenta.
Con el paso de los años, Franco señala que la carrera le encantó y sostiene: "Coincido en la apertura y las posibilidades laborales que brinda. A mí el periodismo no es lo que más me atrapó, lo comprobé en las prácticas, sí lo es la Comunicación Institucional. A eso lo descubrí después, cuando comencé no sabía de esta posibilidad".
Para nada menor es la característica señalada, la de poder realizar diversas pasantías, allí los jóvenes pueden aprender in situ cómo se trabaja en los medios, o bien en entidades donde se puede efectuar la comunicación institucional.
"Hacer tu propio camino" y no necesariamente recurrir a un empleo en relación de dependencia es otra de las posibilidades que Franco destaca.
Por último, los tres coinciden, "vale la pena la carrera, para los decididos y los indecisos, que venga, que la hagan".