En San Francisco convocan a una apostasía colectiva
Será el próximo 26 de agosto en el Paseo de la Memoria. Apostatar es, básicamente, renunciar a la religión.
Bajo la consigna "Desafiliate de la iglesia", un grupo de jóvenes sanfrancisqueños convocan a la comunidad a realizar la "apostasía", trámite que se realiza para darse de baja de las actas en la Iglesia Católica, apoyando la separación entre la Iglesia y el Estado.
A través de la página en Facebook: Apostasía San Francisco, también en Instagram, el grupo invita el próximo 26 de agosto, en el Paseo de la Memoria (sobre la costanera), a los interesados a sumarse a una "apostasía colectiva".
El movimiento surgió luego de que el Senado no aprobara la ley de despenalización del aborto, la cual había logrado media sanción de parte de Diputados.
"Nos organizamos para hacer la apostasía en forma colectiva porque creemos que visibilizarlo de esa manera también implica mostrar que somos muchos los que estamos en contra de los privilegios que tiene la Iglesia por tener nuestro nombre en un acta que utilizan para ejercer presión en los Estados", aseguró una de las integrantes del grupo, Belén Lencina.
En diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO, remarcó que si una persona "no practica y no está de acuerdo con lo que hace la Iglesia institución, la apostasía es un acto para generar coherencia entre las ideas y la práctica. No tiene nada que ver con la fe y creer en Dios", señaló.
Lencina comentó que el grupo surgió por iniciativa de varios amigos y conocidos que se cuestionaron sobre la implicancia que tiene la Iglesia como institución en las decisiones que se toman en el país en cuanto a política, leyes y derechos.
"Con la última decisión y la presión que estuvo ejerciendo la Iglesia en el debate sobre la legalización del aborto, decidimos que teníamos que organizarnos para empezar a mostrar que estamos en contra de la institución a la que hemos sido afiliados de manera obligatoria, incluso siendo menores de edad sin poder elegirlo", manifestó Lencina.
Explicó que la Iglesia en base a la cantidad de bautizados dice representar el 90% de la Argentina y tener la capacidad de poder presionar o participar en legislaciones, recibir presupuesto o subsidios de parte del Estado y acompañar o no distintas políticas.
"Por más de que la religión no se practique o se esté en contra nadie toma la decisión de apostatar, entonces la Iglesia sigue tomando decisiones, recibiendo dinero en base a nuestro bautismo. Están en contra de muchas leyes y derechos en nuestro nombre, cuando nunca fuimos conscientes ni elegimos estar en la institución ni que nos representen. No es bueno que reciban dinero que puede estar aplicado a otras políticas del Estado", advirtió.
Cómo es el trámite
Lencina explicó que el trámite para apostatar consiste en conseguir los datos de la fecha de bautismo o el año aproximado, el nombre de la iglesia en el que se hizo y si es posible el número de acta. Con esos datos se completa la carta que luego se presentará en forma colectiva al obispado.
"Vamos a llevar cartas en la movida, pueden llevar los datos y la completan, o también en la página www.apostasia.com.ar, se puede encontrar el modelo de la carta, la pueden completar y traerla ese día (26 de agosto). La idea es que se haga una presentación colectiva, luego de eso la Iglesia notificará a cada uno de manera individual para que se acerquen y firmen en el acta de bautismo que apostatan", informó.