Disminuye la mortalidad por cáncer de pulmón en la Argentina
Esta enfermedad que era incurable con un pronóstico malo a corto plazo, parece estar virando a ser una patología prevenible en función de la reducción del tabaquismo y controlable con largos plazos de sobrevida en grupos específicos. Este 1 de agosto se celebra el Día Mundial del Cáncer de Pulmón para generar conciencia, ¿qué es lo que estamos haciendo bien y deberíamos sostener en el tiempo?
El cáncer de pulmón es la primera causa de muerte por cáncer en la población adulta en nuestro país. Si bien no es el más frecuente de los tumores, su elevada mortalidad y la falta de estrategias para su diagnóstico temprano lo convierten en una enfermedad no curable en la mayoría de los casos; solo el 20% de los casos se descubre en etapas tempranas con chances de tratamiento curativo. Sin embargo, la noticia es que esto pareciera estar cambiando.
¿Por qué?. De acuerdo con datos del Instituto Nacional del Cáncer, en Argentina la mortalidad por cáncer de pulmón en varones ha disminuido en forma sostenida desde el año 1980. Este descenso fue estadísticamente significativo hasta 2011.
En el último periodo, 2014-2017, esta disminución es menos marcada aunque continúa el descenso a un ritmo de -1.7% anual. En las mujeres, se produjo un descenso para el periodo 2015-2017 con una disminución promedio anual del 2,1%.
"El motivo más importante es que las argentinas y argentinos fumamos cada vez menos", aseguró el doctor Sergio Benítez (MP-3888), coordinador de la sección Oncología de la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria.
Por otro lado, agregó que los nuevos tratamientos disponibles durante los últimos años, como la inmunoterapia y las terapias dirigidas contra blancos moleculares, tienen un impacto inimaginado y todavía no medible sobre la sobrevida en ciertos grupos de pacientes con cáncer. "Estos enfoques terapéuticos conforman el inicio de la medicina de precisión en cáncer de pulmón y es de esperar que mejoren cada vez más la mortalidad asociada a esta enfermedad", destacó.
Las técnicas de detección precoz en cáncer de pulmón en fase de desarrollo permitirán diagnosticar la enfermedad en fases cada vez más precoces. Al respecto Benítez explicó que ciertas técnicas en estudio "permitirían el diagnóstico del cáncer antes que se manifieste incluso en estudios por imágenes".
"Las nuevas estrategias no quirúrgicas, como la radiocirugía y otras técnicas de ablación no quirúrgicas, permiten acceder a un tratamiento potencialmente curativo a aquellas personas que por diversos motivos no puedan ser operadas. Asimismo las técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas permiten que las cirugías sean mucho menos agresivas y reduzcan también sus complicaciones y mortalidad", analizó el médico.
Por último, aseguró que la conformación de grupos de trabajo interdisciplinarios en el manejo de esta enfermedad tiene un impacto indudable sobre la elección de la mejor estrategia de tratamiento, minimizando los riesgos para los pacientes.
Por tal motivo el cáncer de pulmón, que era una enfermedad incurable con un pronóstico malo a corto plazo, parece estar virando a una enfermedad prevenible en función de la reducción del tabaquismo y controlable con largos plazos de sobrevida en grupos específicos de personas que la padecen. "De todas maneras, la mejor estrategia para no tener cáncer de pulmón es no exponerse al humo de tabaco. No permita que fumen en los lugares que frecuenta y no exponga a las personas a humo de tabaco si usted fuma", aconsejó el doctor Benítez.