Caña con ruda: cómo se toma y cuál es el origen de la tradición del 1° de agosto
El ritual tiene origen en el homenaje a la Pachamama, la Madre Tierra. En San Francisco un comercio preparó mil botellitas para espantar las malas energías.
Cada 1° de agosto, tanto en el norte como en el litoral de nuestro país, se festeja tomando caña con ruda en la fiesta de la Pachamama, un ritual en agradecimiento a todo lo que nos brindad la Madre Tierra.
La Pachamama es la principal deidad femenina de las comunidades andinas, una creencia que proviene del imperio incaico. Simboliza a la "Gran Madre" y, en consecuencia, a la energía femenina como sinónimo de fertilidad, protección y amor incondicional.
En el nordeste de Argentina, así como en Perú, Bolivia y Paraguay, es una práctica ancestral.
Laureano Martín Vaillard de Elbrico, el negocio dedicado a la venta de alimentos, productos naturales y regalería campestre ubicado en la esquina de Bv. Roca y Moreno, preparó 1.000 botellas del tradicional preparado de caña con ruda, que es un clásico en esta época del año en su tienda.
Para el joven, que arrastra el ritual desde la cuna, es importante llevarlo a cabo todos los años para recargar energía. "No solo sirve para venerar la Madre Tierra sino para espantar las malas vibras", apuntó el comerciante.
Agradecer y tomar conciencia
A la hora de cumplir con la tradición, muchos solamente toman los tres sorbos -o un traguito que reemplace- el primero de agosto en ayunas.
Sin embargo, para Vaillard, la costumbre se prolonga todo el mes o al menos, recomienda que se haga durante una semana: "Más días lo hacés, más fuerza tiene el ritual, ya que agosto es un mes crudo, de los vientos y del frío. Yo lo hago los 31 días del mes, pero recomiendo hacerlo al menos durante una semana, o días impares, ya que todo el mes de agosto se celebra la Pachamama", dijo Laureano.
"El 1º de agosto lo que se hace es venerar a la Madre Tierra, que es nuestra casa y la estamos rompiendo, destruyéndola cada vez más. Este ritual es una manera de volver a conectarnos con ella, de volver a cuidarla. Muchas personas además meditan o agradecen por todo lo que nos brinda", precisó.
"La caña con ruda sirve para espantar las malas energías, las pestes, los malos augurios", agregó Laureano.
El comerciante manifestó a su vez que la ceremonia del "sorbito" es una manera de recuperar las viejas costumbres de nuestros antepasados. "Con el tiempo se fueron perdiendo muchas costumbres de nuestros abuelos o de pueblos ancestrales y para mí llevarlo a cabo es una manera de cuidar la historia familiar y trasmitirlo a las nuevas generaciones".
En cuanto a su experiencia personal, para Laureano "es importante que cuidemos las tradiciones, la historia de nuestro pueblo y más en estos dos años de pandemia donde estamos volviendo a nuestras raíces".
Una costumbre
La costumbre de combinar la caña con ruda no es una "simple" moda en la vida de Vaillard. Desde pequeño comparte esta tradición, pero hace ocho años que decidió comenzar a fabricarla y venderla en su local.
Para poder elaborarla, el comerciante recurrió a una mujer muy apreciada por él y su familia que brindó la "fórmula" y se encargada de la producción. "Esto lo conozco desde niño, era una costumbre familiar", contó Laureano.
En la fabricación de este clásico preparado se utiliza caña quemada amarga -la elegida de Vaillard- y hojas de ruda. "Empezamos el primer año con 20 unidades para probar y fue un éxito que fue creciendo. Esta vez llegamos a las mil, muchas de las cuales se revenden porque compran los mayoristas, de hecho, un señor se llevó 30 desde Santa Fe para su vinoteca y dijo que iba a volver por más".
Las botellitas rinden entre 15 o 20 días y valen para llevar adelante el ritual.
Elbrico nació hace 10 años en su dirección actual ofreciendo todo tipo de fiambres, vinos y regalos regionales. Hoy, se convirtió en uno de los almacenes claves de barrio Vélez Sarsfield.
Laureano atiende en bulevar Roca y Moreno de lunes a viernes de 9 a 13.30 y de 16 a 21 (según restricciones). Teléfonos: (03564) 15602107 o 15360886.