Cambios en el IVA de la leche: “necesitamos más claridad para saber si beneficia o perjudica ”
El vicepresidente de Caprolec, Alejandro Leveratto aseguró que "el sector necesita más precisiones" acerca del proyecto presentado por el Gobierno para la unificación de la alícuota a la leche del 10,5%. "No sabemos en que volumen beneficia la baja y en cuanto perjudica el alta", sostuvo.
El Gobierno incluyó en el proyecto de ampliación del presupuesto nacional que envió al Congreso la unificación del IVA a la leche en 10,5%. Hoy, la mayoría de las leches que se venden en las góndolas está alcanzada por el 21% de IVA, y el proyecto rebaja esa alícuota al 10,5% pero también propone eliminar la exención de IVA a la venta de leche en polvo y fluida, llevándola a ese mismo valor.
Esto generó polémica e incertidumbre en el sector con visiones divididas: ¿Una baja o una suba?.
Desde el Gobierno explicaron que la baja del IVA para las leches más consumidas le permitirá a los comercios volver a descargar crédito fiscal que habían acumulado en sus balances y que eso hará que se contenga el precio en las góndolas.
Por su parte, la oposición lo presentó como si fuera una suba, y anunciaron un "aumento de la leche en plena pandemia".
Desde Caprolec piden precisiones
"Es una información parcial porque no tenemos claro si es beneficioso o perjudicial ya que no especifican el volumen de leche que implica la baja de la alícuota y cual, el alta", señaló a LA VOZ DE SAN JUSTO, Alejandro Leveratto, productor lechero y vicepresidente de la Cámara de Productores Lecheros de Córdoba (Caprolec),
"Necesitamos más claridad y precisiones para saber como impacta en el sector, si nos beneficia o nos perjudica", agregó.
En una primera lectura de la situación, Leveratto analizó: "entre el 10 y el 12% de toda la producción nacional va a leche fluída, por lo que es abaja de la alícuota se aplicaría sobre una porción baja de producción y no impactaría sobre el bolsillo de la gente".
"Los productores pasamos de una situación cómoda de precios a una de quebranto; esa es la tendencia", dijo Leveratto
En tanto señaló que el 51% de la leche producida en el país se destina a la elaboración de quesos y cuestionó que "de eso no se habla".
"La mayor parte de la leche en polvo se exporta
y eso tiene reintegro. Hay muchas variables a analizar a la hora de definir si
es buena o no esta medida".
En este sentido, el dirigente de Caprolec consideró que "el Estado debería decir cuanto se industrializa de la leche con aditivos y sin, para llegar a tener una idea clara de cómo impacta en el sector".
No obstante, Leveratto aseguró que "al productor no le llega nada de todo esto. Si se logra se lo va a quedar la industria que ya manda mensajes de lamentos y situación crítica: problemas para vender y para cobrar".
Del "delicado" equilibrio, al borde del quebranto
Por otra parte, Leveratto analizó la situación actual del sector que definió se encuentra en un "´delicado equilibrio´ que tiende al quebranto".
Fundamentó esta realidad en que el precio de la leche que paga la industria al productor está "planchado" desde hace cuatro meses, cuando los costos de producción crecieron cerca del 30%.
"Siempre decimos que para el productor hay equilibrio un litro de leche es equivalente a dos kilos de maíz, cuando estamos muy por debajo de esa relación", sostuvo el productor.
Al respecto explicó que "desde hace cuatro meses, el precio promedio de la leche que recibe el productor se encuentra en $18.25 cuando los costos de los principales granos que son la soja y el maíz subieron considerablemente, hasta un 30%".
"En un contexto inflacionario como el que está viviendo la Argentina ha hecho que los productores pasemos de una situación cómoda de precios a una de quebranto; esa es la tendencia", advirtió.
"De a poco, los industriales nos han llevado a una situación donde no estamos perdiendo plata pero tampoco podemos recuperar el capital perdido años anteriores", cuestionó Leveratto.
La cuarentena impulsó el consumo de leche
En medio de esta situación, el Centro de la Industria Lechera (CIL), señaló que el sector está "frente a una de las crisis más severas de la historia" y que, entre otras razones, debido a la imposibilidad de trasladar la suba de costos hay "muchas empresas al borde del colapso por el quebranto de sus balances".
Según manifestó Leveratto, la baja en el
consumo de lácteos durante la cuarentena no impactó a la producción primaria
siendo que se notó un cambio en el consumo. "Muchos productos como el yogurt
cayeron, pero aumentó el consumo de leche".
Por otra parte, notó un traspaso de leche del mercado informal al formal, ante la imposibilidad de algunos rubros de trabajar durante la pandemia. "En general hay una lechería informal que vende a las pizzerías, hoteles, restaurantes que como cerraron durante la cuarentena, esa leche se volcó al circuito formal apuntalando al crecimiento de la producción".