Educación
El Centro de Día de Apadim enfrenta delicada situación que impacta en su servicio
Sin respuestas del Estado y a pesar de su compromiso con la misión social que lleva adelante, la institución se vio obligada a recortar parte de sus actividades debido a graves dificultades económicas. Esta situación afecta directamente a las 43 personas con discapacidad que asisten al centro y requiere ser visibilizada.
A través de un comunicado difundido en redes sociales, la Asociación Civil Apadim hizo pública la preocupante situación que atraviesa el Centro de Día San Francisco, que “repercute directamente en la prestación de nuestro servicio”. La entidad debió reducir prestaciones, lo que afecta tanto a los beneficiarios, como a sus familias y al personal.
“Existen muchas leyes de protección a la discapacidad, tanto nacionales como internacionales, provinciales. Sin embargo, los obstáculos persisten. El apoyo a estas personas y sus familias no termina cuando egresan de una escuela especial. Se prolonga durante toda su vida. Es necesario que esta cuestión se visibilice”, señaló Laura Vignolo, coordinadora del Centro de Día de Apadim, en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO. En la entrevista también participaron Florencia Trucco (coordinadora), Cecilia Origlia (orientadora) y Nahuel González (revisor de cuentas de la Asociación Civil).
Apadim tiene dos servicios. Uno es la escuela de modalidad especial, que depende de la Dirección General de Institutos Privados de Enseñanza y recibe subvención estatal para su personal docente, mientras la Asociación afronta los costos de servicios y del salario del personal de maestranza.
El otro es el Centro de Día, que funciona con cinco grupos: dos por la mañana (de 8 a 12) y tres por la tarde (de 13 a 17). En cada turno trabajan orientadores, auxiliares de cambiado y equipos técnicos conformados por coordinadoras, psicomotricistas, psicólogos, trabajador social, terapista ocupacional y médicos. "Todos los salarios y honorarios corren por cuenta de la entidad", explicaron.
El Centro de Día se sostiene a través de convenios con las obras sociales de los beneficiarios. “Se gestiona junto con la familia, se presenta la documentación y la actividad se financia con los pagos de las obras sociales”. Sin embargo, algunas familias no cuentan con cobertura social y Apadim absorbe esos costos por el compromiso social de su misión. Pero la situación actual plantea obstáculos: “Si bien no es intención de la comisión directiva abandonar esta función debido a diversos factores económicos, este sostenimiento ya no es posible”.
Actualmente, 43 personas con discapacidad (cuyas edades van desde los 18 hasta los 70 años) asisten al Centro de Día. De ellas, 24 son becadas. "Hay familias que no tienen cobertura social ni recursos para pagar una cuota", indicaron. Ante esta problemática, "se iniciaron gestiones ante el municipio para solicitar apoyo a estas familias becadas, pero hasta el momento no hemos recibido una respuesta favorable. También presentamos notas a la provincia y realizamos gestiones con PAMI, ya que 12 de los beneficiarios becados pertenecen a esa obra social”. Si bien hay avances en las gestiones, no se ha logrado aún celebrar un convenio.
Ante la falta de respuestas y la imposibilidad de cubrir los costos, Apadim implementó un ajuste en los servicios. "A los beneficiarios becados les propusimos asistir dos veces por semana con un aporte simbólico de 50.000 pesos. A las familias que pudieran y quisieran, les ofrecimos la posibilidad de continuar con la asistencia diaria mediante una cuota de 150.000 pesos". Sin embargo, "son muy pocos los que pudieron acceder a venir todos los días. Muchas familias recurren a ventas particulares para sostener el servicio, aunque sea dos veces por semana", se explicó. Este ajuste también implicó reducción de personal y de carga horaria.
Vale señalar que se reciben donaciones de insumos y productos de supermercado provenientes de empresas y particulares, así como de familiares, amigos y conocidos. Pero el déficit se mantiene. Y debe ser cubierto la Asociación Civil.
Consecuencias perjudiciales
La reducción en la asistencia genera serios perjuicios para los beneficiarios. "Muchos de los chicos becados necesitan concurrir regularmente a las actividades. Decirles que ya no podrán asistir como antes tiene un impacto muy fuerte", indicaron.
Señalaron que “la mayor incidencia que tiene esta falta de asistencia es la dificultad para mantener las capacidades adquiridas. Sin estimulación constante se produce un retroceso perjudicial”. Además, destacaron que el Centro de Día “no es solo un espacio donde se dictan talleres, sino también un lugar de contención y socialización. En muchos casos, ha funcionado como un agente para detectar situaciones de vulnerabilidad”.
“Uno de los objetivos de nuestro proyecto es mejorar la calidad de vida de los beneficiarios, especialmente aquellos que viven en contextos de vulnerabilidad. Nuestro seguimiento no se limita a las cuatro horas que están acá. Trabajamos con sus familias, gestionamos turnos médicos, tramitamos tratamientos y ayudas cuando el Estado no las provee, y facilitamos el acceso a programas como Incluir Salud", explicaron. "El acompañamiento no es solo para la persona con discapacidad, sino también para toda la familia, que muchas veces enfrenta una realidad muy difícil".
Si bien Apadim reafirma su compromiso con estas familias, se reconoce que “hoy en día no podemos sostener el 100% de la cobertura. Estamos dispuestos a sentarnos, a buscar soluciones en conjunto, porque no queremos abandonar esta misión. Hay una cuestión humanitaria que se debería contemplar”.
Finalmente, aclararon que “nunca se pidió al Estado aporte económico y ahora tampoco lo estamos haciendo. Solo solicitamos que se brinde ayuda a las familias para que los chicos puedan seguir asistiendo”.
Locro. Para recaudar fondos que permitan aliviar la situación, Apadim, junto a la parroquia Santa Rita, organiza la venta de locro para el domingo 4 de mayo. Las tarjetas saldrán a la venta en los próximos días. Todo lo recaudado ayudará a que el Centro de Día siga funcionando.
22 años de trabajo
La Asociación Civil Apadim es una entidad sin fines de lucro creada el 20 de abril de 1979 con el objetivo de proteger, defender y brindar servicios a las personas con discapacidad. Por ello se crearon la escuela de Modalidad Especial en 1979, el servicio de Inclusión Educativa en 1983, el Centro de Día en 2003, el Taller Protegido de producción que funcionó hasta 2014 y el Equipo de Formación Laboral en 2015.
El Centro de Día tuvo su origen ante el cierre del que gestionaba Aprid y por en un anteproyecto elaborado por la subcomisión de discapacidad del Consejo Asesor Municipal, luego de un diagnóstico respecto a la población con discapacidad moderada y severa que egresaba de las escuelas de Modalidad Especial.
Abrió sus puertas en septiembre de 2003 con recursos que en su momento provenían del Consejo Asesor Municipal, de la Asociación Civil y de la comisión de padres. Luego se completó la organización técnica, institucional y edilicia que permitió la categorización del servicio como prestador del Ministerio de Salud.