“LA NIÑA” SEGUIRÁ HASTA MARZO Y PONE EN JAQUE LAS COSECHAS RÉCORDS
“LA NIÑA” SEGUIRÁ HASTA MARZO Y PONE EN JAQUE LAS COSECHAS RÉCORDS
Especialistas y entidades del sector
coincidieron en que esta situación pone en riesgo las variedades tempranas o de
primera de soja y maíz y alejan las proyecciones de producciones récords para este
2022.
Especialistas y entidades del sector
coincidieron en que esta situación pone en riesgo las variedades tempranas o de
primera de soja y maíz y alejan las proyecciones de producciones récords para este
2022.
-
El maíz ya registra pérdidas del 20-40% en los rindes
La persistencia
del fenómeno La Niña sobre la región por lo menos hasta marzo condiciona los
rendimientos de los principales cultivos agrícolas y aleja la posibilidad de
las cosechas récords previstas, coincidieron distintos especialistas y
entidades del sector.
"El fenómeno
La Niña seguirá presente por lo menos hasta marzo probablemente, disminuyendo
su intensidad", aseguró José Luis Aiello, especialista en Ciencias
Atmosféricas.
"Tal cómo
pasó hace un año, en diciembre, el enfriamiento presentó un repunte: es el valor
más bajo que presenta la evolución de esta Niña", agregó el consultor
Alfredo Elorriaga, consultor de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la
entidad rosarina.
Al repunte del
enfriamiento del Océano Pacífico y sin lluvias a la vista para la primera
quincena se sumaron la presencia de un importante centro de alta presión y
temperaturas que volverán a alcanzar valores extremos, indicó la Bolsa de
Comercio de Rosario (BCR).
Para la primera
quincena de enero no se esperan lluvias importantes y el problema de la falta
de humedad se agrava por la presencia de un importante centro de alta presión
ubicado sobre el Este del país; y las temperaturas ascenderán hasta superar los
valores normales para enero y alcanzar valores extremos durante esta semana.
Por su parte,
desde la Bolsa de Cereales pronosticaron para los próximos días
"temperaturas moderadas, seguidas por una ola de calor y precipitaciones
escasas en la mayor parte del área agrícola".
Y para Brasil
esperan "temperaturas moderadas y precipitaciones abundantes en la mayor
parte del Brasil, a excepción de sus extremos nordeste y sur, que recibirán
aportes escasos".
Esta situación
podría provocar "una pérdida aún mayor en los rindes potenciales de
algunos cultivos", como el maíz temprano, advirtió la BCR, que aclaró que
las lluvias de principios de año "no fueron suficientes para frenar el
daño en el cereal".
Maíz: pérdidas
del 20-40% en los
rindes
El maíz temprano
sembrado en las provincias de Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Buenos Aires está
en una situación muy delicada: en la franja este del país se confirman pérdidas
de rindes que van del 20 al 40%.
Así, las
expectativas de rindes van de 60 a 80 quintales por hectárea en los lotes con
condición regular (que alcanzarían a cubrir costos de producción) y de 80 a 100
qq/ha en los que están en buenas condiciones.
"En el 2022
no habrá rindes de 140 qq/ha cómo muchos alcanzaron el año pasado",
explican los técnicos.
Por su parte, la
condición de la soja registró una mejora pero el paso a estadios más críticos
del cultivo requiere entre 50 a 80 milímetros más de agua para que no pierda
potencial de rinde; y en las zonas menos beneficiadas por las lluvias, el
desmejoramiento continúa.
Semanas atrás, la
Argentina tenía excelentes chances de volver a tener una campaña récord de maíz
-superar por primera vez los 56 millones de toneladas- y acercarse a los 50
millones en soja.
A la falta de
lluvias y las temperaturas superiores a los 40°C, así como a las escasas
reservas de humedad existente en los niveles profundos del suelo, se suma el
fenómeno La Niña -leve, pero por segundo año consecutivo- y un centro de alta
presión en el centro del país que "ponen en jaque a la campaña
gruesa", resaltó la BCR.
También a la
cosecha sudamericana
Esta situación
afecta también a Brasil, que por las pérdidas causadas por la sequía y el calor
no podrá alcanzar una cosecha récord de soja este año, estimada inicialmente en
145 millones de toneladas.
Según las nuevas
estimaciones, la producción será inferior a la del año pasado, cuando los
productores brasileños cosecharon 137,3 millones de toneladas, consignó la
agencia Bloomberg.
Las revisiones
realizadas esta semana sobre las estimaciones de cosechas en Brasil pueden
indicar recortes oficiales la próxima semana, cuando el Departamento de
Agricultura de Estados Unidos (Usda, por sus siglas en inglés) y la Conab de
Brasil publicarán sus pronósticos para la cosecha de la nación.
Las
preocupaciones sobre la cosecha sudamericana provocaron un aumento de los
precios en Chicago, donde los futuros de la soja subieron 13% desde diciembre;
y una menor oferta podría aumentar la inflación mundial de los alimentos.
La persistencia
del fenómeno La Niña sobre la región por lo menos hasta marzo condiciona los
rendimientos de los principales cultivos agrícolas y aleja la posibilidad de
las cosechas récords previstas, coincidieron distintos especialistas y
entidades del sector.
"El fenómeno
La Niña seguirá presente por lo menos hasta marzo probablemente, disminuyendo
su intensidad", aseguró José Luis Aiello, especialista en Ciencias
Atmosféricas.
"Tal cómo
pasó hace un año, en diciembre, el enfriamiento presentó un repunte: es el valor
más bajo que presenta la evolución de esta Niña", agregó el consultor
Alfredo Elorriaga, consultor de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la
entidad rosarina.
Al repunte del
enfriamiento del Océano Pacífico y sin lluvias a la vista para la primera
quincena se sumaron la presencia de un importante centro de alta presión y
temperaturas que volverán a alcanzar valores extremos, indicó la Bolsa de
Comercio de Rosario (BCR).
Para la primera
quincena de enero no se esperan lluvias importantes y el problema de la falta
de humedad se agrava por la presencia de un importante centro de alta presión
ubicado sobre el Este del país; y las temperaturas ascenderán hasta superar los
valores normales para enero y alcanzar valores extremos durante esta semana.
Por su parte,
desde la Bolsa de Cereales pronosticaron para los próximos días
"temperaturas moderadas, seguidas por una ola de calor y precipitaciones
escasas en la mayor parte del área agrícola".
Y para Brasil
esperan "temperaturas moderadas y precipitaciones abundantes en la mayor
parte del Brasil, a excepción de sus extremos nordeste y sur, que recibirán
aportes escasos".
Esta situación
podría provocar "una pérdida aún mayor en los rindes potenciales de
algunos cultivos", como el maíz temprano, advirtió la BCR, que aclaró que
las lluvias de principios de año "no fueron suficientes para frenar el
daño en el cereal".
Maíz: pérdidas
del 20-40% en los
rindes
El maíz temprano
sembrado en las provincias de Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Buenos Aires está
en una situación muy delicada: en la franja este del país se confirman pérdidas
de rindes que van del 20 al 40%.
Así, las
expectativas de rindes van de 60 a 80 quintales por hectárea en los lotes con
condición regular (que alcanzarían a cubrir costos de producción) y de 80 a 100
qq/ha en los que están en buenas condiciones.
"En el 2022
no habrá rindes de 140 qq/ha cómo muchos alcanzaron el año pasado",
explican los técnicos.
Por su parte, la
condición de la soja registró una mejora pero el paso a estadios más críticos
del cultivo requiere entre 50 a 80 milímetros más de agua para que no pierda
potencial de rinde; y en las zonas menos beneficiadas por las lluvias, el
desmejoramiento continúa.
Semanas atrás, la
Argentina tenía excelentes chances de volver a tener una campaña récord de maíz
-superar por primera vez los 56 millones de toneladas- y acercarse a los 50
millones en soja.
A la falta de
lluvias y las temperaturas superiores a los 40°C, así como a las escasas
reservas de humedad existente en los niveles profundos del suelo, se suma el
fenómeno La Niña -leve, pero por segundo año consecutivo- y un centro de alta
presión en el centro del país que "ponen en jaque a la campaña
gruesa", resaltó la BCR.
También a la
cosecha sudamericana
Esta situación
afecta también a Brasil, que por las pérdidas causadas por la sequía y el calor
no podrá alcanzar una cosecha récord de soja este año, estimada inicialmente en
145 millones de toneladas.
Según las nuevas
estimaciones, la producción será inferior a la del año pasado, cuando los
productores brasileños cosecharon 137,3 millones de toneladas, consignó la
agencia Bloomberg.
Las revisiones
realizadas esta semana sobre las estimaciones de cosechas en Brasil pueden
indicar recortes oficiales la próxima semana, cuando el Departamento de
Agricultura de Estados Unidos (Usda, por sus siglas en inglés) y la Conab de
Brasil publicarán sus pronósticos para la cosecha de la nación.
Las
preocupaciones sobre la cosecha sudamericana provocaron un aumento de los
precios en Chicago, donde los futuros de la soja subieron 13% desde diciembre;
y una menor oferta podría aumentar la inflación mundial de los alimentos.