Háganse cargo
La dirigencia política -oficialistas y opositores, gobernantes y ex gobernantes-, deben asumir la responsabilidad que les ha dado el voto popular y trabajar en consecuencia para dar vuelta la historia de fracasos, vaivenes y grietas que vive la Argentina.
En los prolegómenos de que se estima será una campaña electoral muy dura, teñida de acusaciones cruzadas y hasta improperios de tono elevado, se está convirtiendo en un clásico la discusión que mantienen en el Congreso el ex ministro de Economía, Axel Kicillof y el actual jefe de Gabinete, Marcos Peña. Sus discusiones y chicanas parece que serán la marca que tendrá la lucha por ganar las elecciones de medio tiempo en el país.
En este marco, una frase ha pasado a convertirse en un símbolo del debate político actual. ¡Háganse cargo! Se gritan legislador opositor y ministro del gobierno nacional en un cruce dialéctico que se está convirtiendo en el round más estentóreo antes de que lleguen los comicios de octubre.
En verdad, las diferencias son muchas y el sentido del "háganse cargo" varía según salga de la boca de uno u otro dirigente. Es preciso reconocer primero que el actual Jefe de Gabinete cumple con el mandato constitucional de informar mensualmente al Congreso sobre los asuntos de gobierno más trascendentes y se expone a los cuestionamientos de la oposición en el recinto. Nunca ocurrió lo mismo en el anterior gobierno.
A partir de allí, ya van dos sesiones de informes del Jefe de Gabinete en el que la frase del título se impone como resumen de los argumentos de uno y otro lado. El ministro se la espetó a Kicillof cuando le reprochó todas y cada una de las situaciones negativas que dejó cuando debió abandonar la cartera de Economía. El ahora vocero casi principal de la oposición en Diputados redobló la apuesta y, usando los mismo términos, le reclamó que asuman que "son neoliberales" y reconozcan la "enorme estafa electoral" a sectores populares, a la vez que consideró que el país se encuentra en una "emergencia alimentaria, farmacológica y de tarifas". Mientras el ex ministro detalló los errores de la política económica según su criterio, el funcionario del gobierno nacional disparó: "Vamos a trabajar para que usted nunca más la maneje porque tan mal la manejó".
En el medio de esta discusión entre dos personajes de alta exposición, se pueden haber minimizado argumentos de uno y otro sector político que llevarían a comprender algunas situaciones vinculadas con la actual situación del país que, por cierto, dista mucho de ser floreciente tanto por la herencia recibida como por las falencias del actual gobierno para lograr la reactivación de la actividad productiva.
En tanto, mientras aguarda con estoicidad la llegada del aluvión proselitista, la ciudadanía asiste a los debates con alguna indiferencia, salvo en los sectores que casi con fanatismo defienden una u otra postura. El ¡háganse cargo! podría adquirir así un tercer significado o sentido. No suena exagerado señalar que, posiblemente, la frase se transforme en un reclamo mayoritario para que toda la dirigencia política -oficialistas y opositores, gobernantes y ex gobernantes- para que de una vez asuman la responsabilidad que les ha dado el voto popular y trabajen en consecuencia para dar vuelta la historia de fracasos, vaivenes y grietas que vive la Argentina desde hace tiempo.