Cumbia pop made in San Francisco: Cumbiaravana
La cumbia atraviesa un nuevo período de popularidad y se debe al fenómeno de una corriente de la música tropical: la cumbia pop o cheta. Y San Francio ya tiene su referente en el género.
El grupo Cumbiaravana se encamina a ser un fenómeno en la escena musical sanfracisqueña.
Tras su primera presentación el 24 de diciembre en un boliche local, los chicos de nuestra ciudad ya grabaron su primer tema: "Te vas, me quedo", y planifican grabar su segundo corte después del verano.
Leandro Aldrighi, de 28 años (bajista), convocó a Mariana "Maia" Di Piazza, de 26 (voz), a Lucas Pomiro, de 18 (guitarra y voz), a Emanuel Hernández, de 23 años (percusión); y a Agustín González, de 26 (piano y arreglos), para crear Cumbiaravana, un sueño que quiere ir más allá de la ciudad para llevar cumbia y caravana a todos los rincones del país.
- ¿Cómo nace este grupo?
- Leandro Aldrighi: Fue una idea mía. No había un grupo así en la ciudad, lo más profesional posible. A Maia la conocí a través de las redes sociales; a Agustín y Emanuel, del Conservatorio Superior de Música "Antonio Berutti", donde también estudio, y a Lucas, porque es hermano de un amigo mío. El sueño empezó hace un año y medio pero fue en junio pasado que los convoqué a los chicos, pero la banda nació y se depuró para septiembre. El objetivo era llegar a diciembre con un tema propio arreglado y grabado en estudio y poder salir a tocar con algunos covers de reggaetón y cumbia canchera.
- ¿Por qué se dificultó tanto armarla?
- L. A.: Hay músicos excelentes en la ciudad pero pocos creen que pueden vivir de la música y más de éste género. Nuestra meta es vivir de Cumbiaravana.
- ¿Hay miedo entre los músicos locales de sumarse a la cumbia canchera?
- L. A.:Tengo un grupo de rock y este proyecto hacía mucho lo quería materializar. Sé que muchos me van a criticar pero a mí me gusta la música y punto.Hay mucho prejuicio sobre la cumbia canchera pero es lo más fácil de vender, es decir, de instalarse y de poder tocar y ser convocantes.
-Mariana "Maia" Di Piazza: San Francisco es una ciudad roquera y cuartetera.
- Emanuel Hernández: El problema radica en que el músico que escucha cuarteto, es más abierto para otros estilos pero si es roquero, no va a salir del género del rock.
- Leandro, ¿qué le aporta cada integrante a la banda?
- L.A.: Ellos no se conocían y lo bueno de eso es que nada los condiciona para tocar. Por otro lado, los elegí a ellos porque sé lo profesionales que son cada uno en lo suyo y con su instrumento. Algunos vienen del rock, otros del cuarteto; pero todos son serios en sus proyectos y eso es Cumbiaravana. Yo vengo del palo del rock pero con ganas de hacer esto; Ema tocó en un grupo de cuarteto y conoce del género; Maia es la voz y la belleza del grupo; Agustín le pone su toque personal con el piano y Lucas es la sangre joven.
- ¿Qué descubrieron con Cumbiaravana?
- Lucas Pomiro: El trabajo en equipo. Nunca había hecho este estilo pero salimos adelante y ya tenemos un repertorio de 45 minutos.
- M. D.P.: Hay un trabajo muy serio y mucho esfuerzo económico de Leandro quien es el alma de todo esto.
- ¿Cuál es la meta del grupo?
- L. A.: Quiero que lleguemos a lo más alto como lo hicieron Marama y Rombai, pero con nuestro estilo. Mi sueño es que todos los chicos de la banda puedan vivir de la música. La repercusión que tuvimos en pocos días nos da la pauta que estamos haciendo bien las cosas. Tenemos buena energía en el escenario y poco a poco vamos encontrando nuestra identidad.
- M. D.P.: Queremos llegar donde se pueda. Lo hacemos con mucha responsabilidad. Queremos que la gente disfrute de nuestro grupo, que bailen, que canten pero que también les guste visualmente.
- ¿Hay trabas para crecer?
- L.A.: En este tiempo aprendí de mis fracasos y me di cuenta que la cumbia canchera es el género más fácil de vender, pero por los prejuicios a veces elegimos otros género.
- ¿La tecnología les dio más oportunidades para mostrar su material?
- L.A.: Sí, pero hay más competencia. Por eso, hay que diferenciarse y hacer lo mejor posible.