Venta y alquiler de campos: advierten “movimiento” de consultas para salir del estancamiento
El desastre producido por las precipitaciones llevó a renegociar contratos de alquiler que derivaron en precios menores a los que se venían dando históricamente.
El anegamiento de campos producto de las intensas lluvias registradas en distintos lugares de la provincia de Córdoba, afectó el desarrollo del mercado inmobiliario rural de San Francisco y la región.
Esta situación se vio reflejada en el análisis de agentes inmobiliarios que se dedican a la compra venta de propiedades rurales y en este marco LA VOZ DE SAN JUSTO dialogó con el operador inmobiliario Javier Balangione, quien dio a conocer aspectos del panorama por el que se desarrolla la actividad.
"Las constantes inundaciones de campos producidas en los últimos dos años produjeron un estancamiento en el mercado inmobiliario rural", afirmó Balangione, quien de esta manera coincidió con lo señalado por la Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales (Cair), aunque este organismo atribuyó esta situación a tres factores tales como las alternativas financieras existentes de bajo riesgo con un dólar que se mantiene quieto; la incertidumbre política reinante en un año electoral de medio término y la firmeza en los valores de la tierra.
Balangione señaló que "las grandes lluvias influyeron mucho en esta situación. Una de ellas se generó casi al final de la cosecha de la soja y la restante se produjo al inicio pero también generó muchas pérdidas. Yo entiendo que el estancamiento se dio pero en el último mes se ha evidenciado un movimiento de consultas que permite comenzar a mover algo el nivel de actividad".
Además señaló que el escaso nivel de actividad registrado en el pasado mes de abril, que fue reflejado en el informe de la Cair, "se dio precisamente por no haber movimiento en función de que están en plena cosecha. En este caso se acentuó el estancamiento en los dos últimos períodos de cosecha por el agua que cayó por las grandes lluvias". Luego reiteró en su análisis la existencia de "un leve movimiento de consultas" por parte de gente que quiere vender junto a "otra cantidad un poco menor" de aquellos que quieren comprar.
En cuanto a los alquileres reconoció que "han caído" por el desastre producido por las precipitaciones, lo que llevó a "renegociar contratos" que derivaron en "precios menores a los que se venían dando históricamente en la zona comprendida en unos 150 kilómetros a la redonda". De todos modos reconoció que "hay explotaciones que se alquilaron siempre y nunca tuvieron agua mientras que el que no tuvo agua la campaña anterior la tuvo ahora o viceversa".
Impacto del blanqueo de capitales
Por su parte, consultado respecto de la influencia que tuvo el blanqueo de capitales en las operatorias de compra venta de inmuebles rurales, Balangione dijo que "esto no se advirtió aún porque en el blanqueo se incluyeron algunos inmuebles que no estaban declarados correctamente. De todas maneras, el blanqueo de efectivo todavía no influyó en la demanda de mayores ventas de campos".
No obstante, el operador inmobiliario recordó que en función de la normativa vigente relacionada con el blanqueo de capitales "deben transcurrir mínimamente seis meses para poder mover el capital. Entiendo que todavía estamos dentro de ese plazo y tal vez se empiecen a notar operaciones en el segundo semestre en función de que a partir de allí se podrán liberar esos fondos".
Por último remarcó que "la expectativa de nuestro sector pasa por el hecho de que se acomode la cuestión climática sumado a las políticas económicas y el gobierno que apoya a la producción agropecuaria hará que aumente el interés en volver a comprar tierras".