Tabaco: incomprensible inacción argentina
Llama la atención que sea el único país que no participa de las negociaciones y discusiones para el control del contrabando dentro del Mercosur, con lo que queda aislado en la toma de decisiones para luchar contra la ilegalidad.
El próximo 25 de septiembre será ley
internacional el Protocolo para la Eliminación del Comercio Ilícito de
Productos de Tabaco, que forma parte del Convenio Marco de la Organización
Mundial de la Salud (OMS) para el control del tabaco. Al suscribirlo Irlanda y el Reino Unido en
junio pasado, el tratado alcanzó las condiciones para que entre en vigor,
puesto que ha sido suscripto por 40 países, indicó la OPS. Esta norma pretende hacer desaparecer todos
los modos posibles de tráfico ilegal, desde la fabricación hasta el
contrabando.
Según informó la Organización Panamericana de la Salud, el texto establece una serie de medidas para prevenir el comercio ilícito y promover el cumplimiento de la ley, además de proporcionar la base jurídica para la cooperación internacional. Además, señala que seis países de la región adhirieron al tratado: Brasil, Costa Rica, Ecuador, Nicaragua, Panamá y Uruguay. La Argentina aún no lo hizo y se torna incomprensible esta inacción toda vez que el país fue pionero en la adopción de medidas legales tendientes a combatir el flagelo del tabaquismo. Pese a que el Ministerio de Salud ha anunciado que está analizando el protocolo y que posiblemente lo ratificará en breve, esta demora ha generado el reclamo de numerosas organizaciones promotoras de la salud, como por ejemplo la Fundación Interamericana del Corazón.
El acuerdo tiene como objetivo principal combatir el comercio ilegal de productos de tabaco mediante el control de la cadena de suministro y la cooperación internacional. Una de las medidas fundamentales que las partes se comprometen a aplicar consiste en establecer un sistema mundial de seguimiento y localización con miras a reducir y, a la larga, erradicar el comercio ilícito.
Necesario es sostener que el comercio ilegal de cigarrillos en la Argentina es una práctica extendida y poco controlada. La frontera noreste del país, especialmente el límite con Paraguay es un verdadero "colador" de productos relacionados con el tabaco que ingresan de manera subrepticia a nuestro territorio y siguen siendo actividades florecientes.
Además, vale señalar que la epidemia del tabaquismo involucra a casi 9 millones de argentinos y produce 44 mil muertes anuales. El país gastas cada año más de 33.000 millones de pesos en atender las enfermedades que provoca el consumo de tabaco, lo que representa el 12% del gasto sanitario total. A pesar de esta situación, Argentina es el único país de América del Sur que firmó el convenio para el control del tabaco y no lo ha ratificado.
Llama la atención que sea el único país que no participa de las negociaciones y discusiones para el control del contrabando dentro del Mercosur, con lo que queda aislado en la toma de decisiones para luchar contra la ilegalidad. Esto supone una evidente contradicción entre el discurso que manifiesta la voluntad de combatir el tabaquismo y la inacción para ratificar un tratado internacional que brinda protección al comercio pero también es un resguardo más para la salud pública afectada notoriamente por el consumo de tabaco.