Ser maestro, un acto de amor
Maestras y profesoras que diariamente desde su lugar tienen que responder a múltiples demandas relacionadas a la enseñanza, el cuidado, la contención y el acompañamiento.
Este lunes 11 de septiembre se celebra el Día del Maestro y el próximo 17 del mismo mes, el Día del Profesor. Aguerridas, con convicciones y apasionadas por lo que hacen, las directoras de las escuelas que este año celebran cien años de vida dialogaron con LA VOZ DE SAN JUSTO.
Ana Cristina Graffigna, Carolina Rambaldi y Elena Vacchetta de los niveles primario, medio y superior del Instituto Fasta Inmaculada Concepción; Alejandra Bailo de la escuela "Teniente General Julio Argentino Roca" y Norma Turinetto del colegio "Domingo Faustino Sarmiento", aceptaron juntarse y debatir sobre el rol del docente, la educación y la formación de las nuevas generaciones. Además se refirieron a las escuelas que dirigen en este año especial del centenario y sus desafíos.
"Poder transmitir coherencia", "sembrar y esperar; tener paciencia y la esperanza", "producir algo maravilloso en la vida del otro", "el compromiso de guiar y de formar", entre otras frases son las que dejaron las docentes sobre el rol de los maestros en las escuelas.
- ¿Qué significa la docencia para ustedes?
Ana Cristina Graffigna:poder trasmitirles a los docentes y a los chicos coherencia y testimonio de vida.
Carolina Rambaldi:es sembrar y esperar; tener la paciencia y la esperanza en los chicos de que lo que estamos haciendo es algo muy bueno y otros verán esos frutos.
Elena Vacchetta:es sembrar una semilla que a lo largo del tiempo dará sus frutos y esos serán hermosos y producirán algo maravilloso en la vida del otro.
Alejandra Bailo:es el compromiso con los niños, con las familias, de dar lo mejor que tenés, de guiar, de formar. A veces ante tanto compromiso viene el reclamo de los hijos y la familia.
Norma Turinetto: ser maestro para mí es aceptar el desafío de ser profesional, que tiene que estudiar toda su carrera; que lo que a veces se ve en la teoría cuesta llevarlo a la práctica con adolescentes y con niños pero tenemos que hacer lo mejor posible porque en ellos debemos dejar huellas positivas y eso no es tan fácil. Además de que seamos maestros por vocación, tenemos que ser de profesión.
- ¿Cómo se sienten en el vínculo con los alumnos y los padres?
C. R.:hay una falta de autoridad de toda la sociedad. Pasa en la policía, pasa en la política, en la casa y también en la escuela. De la misma manera que cambió la relación de los chicos y los padres, donde hay mayor confianza, también la hay entre docentes y alumnos.
N. T.: todo lo que pasa afuera se mete en la escuela. Hay una relación docente-alumno diferente.
A. B.:lo que tenemos que tener son nuevas estrategias que seguramente hace 30 años atrás no había que tenerlas y hoy las distintas intervenciones adaptadas a los nuevos jóvenes o a las nuevas conformaciones familiares.
- ¿Qué autocrítica harían a la educación en nuestro país?
A. C. G.:la escuela es la única institución que se mantiene firme en la sociedad. Hoy, el asistencialismo, el apoyo social, todo pasa por la escuela.
E. V.:es hora de que el sistema educativo argentino cambie profundamente. No estamos preparados para darles los cambios a los chicos.
- A. B.:me gustaría tener más tiempo para hacer más cosas. El personal directivo y los docentes tenemos mucha capacidad de trabajo pero llega un momento en que las demandas son muchas.
- N. T.: independientemente de la escuela, cargo o realidad, todos abrazamos la tarea con mucha pasión y profesionalismo porque el que no lo tiene en estos tiempos, no subsiste en el sistema.
- ¿Cuál es el mayor desafío para una directora en la actualidad?
A. C. G.: hay que interiorizarse en la formación de virtudes sociales y capacidades de los chicos pero más aún acompañar a las familias que las vemos cada vez más desorientadas en cómo educar a sus hijos, desde hábitos del sentido común que dábamos por sentadas. Ese es el plus, que los chicos aprendan a leer y escribir.
C. R.:en mi caso como directivo del nivel medio es llegar a los adolescentes con sus nuevas formas, nuevas metodologías y trabajar con la familia.
- E. V.:todos trabajamos por la formación integral del niño, del adolescente y del joven adulto.Esto se ve en el nivel superior, con alumnos de distintas localidades que vienen a estudiar a San Francisco que no solo buscan formación sino también contención lejos de sus hogares.
- A. B.:la inclusión en todo sentido, desde las más simples como es la inclusión geográfica y en nuestro caso, a chicos de la provincia de Santa Fe.
- N. T.:el desafío que nos desvela en la educación es poder desarrollar las capacidades de los chicos en el marco de la diversidad, de aulas grandes y heterogéneas en todos los sentidos.
- ¿Qué las estimula a seguir adelante en esta profesión?
A. C. G.:a veces llegás a tu casa cansada pero seguís porque es tu vida. Es por lo que te formaste, le ponés la pasión y la fuerza a la tarea de cada día. No se puede renunciar porque sí. Ante las adversidades hay que seguir. Lo que a uno le queda es el agradecimiento del alumno.
C. R.:el hecho de que un alumno vuelva a la escuela y agradezca la forma en que uno le enseñó y que vengan con sus hijos es una enorme satisfacción.
E. V.:ver que algo se pudo modificar en una personita es lo que hace seguir adelante.
A. B.:¿viste la frase de la canción, el amor es más fuerte? Es eso. Ser docente es un acto de amor.
N. T.:en treinta años pasé por cosas difíciles, pero no sé qué tendría que haberme pasado para abandonar.