Saldo negativo para la soja de primera en Córdoba
Según la Bolsa de Cereales de Córdoba, sin retenciones, la oleaginosa hubiera ganado USD 31,4 por hectárea. Solo la combinación con trigo dejó un resultado económico positivo para el promedio provincial.
La soja de primera cerró la campaña 2019/20 en Córdoba con una rentabilidad negativa del 0,1 por ciento y una pérdida económica de 0,5 dólares por hectárea, según un informe de la Bolsa de Cereales de la provincia.
Atribuyen este resultado a menores rendimientos a nivel provincial, precios desfavorables y mayores derechos de exportación.
Se trata del promedio para todo el territorio que, de acuerdo con el Departamento de Economía de la Bolsa, estuvo afectado por una disminución del 12 por ciento de los rindes y por un precio a cosecha que se redujo a solo 214,6 dólares por tonelada. Este precio fue afectado por la modificación en los derechos de exportación que se incrementaron hasta el 33 por ciento.
La entidad cordobesa precisó que sin suba de retenciones, la oleaginosa hubiera ganado 31,4 dólares por hectárea y una tasa de rentabilidad del 6,2 por ciento, precisó.
Sólo la combinación con trigo dejó resultados positivos para el promedio provincial.
Siete puntos por debajo de la campaña previa
La tasa de rentabilidad en Córdoba para soja de primera fue, en promedio 7 puntos básicos por debajo de la campaña previa. Los principales responsables fueron la caída en el rendimiento promedio provincial, que disminuyó un 12%, y los menores precios a cosecha. Esto llevó a un resultado económico negativo de USD -0,5/ha, USD 37/ha por debajo del ciclo anterior.
"Principalmente porque tuvo menores rendimientos a nivel provincial, menores precios que obedecieron a un contexto internacional más desfavorable y mayores derechos de exportación", detalló Gonzalo Agusto, economista de la entidad.
"De haberse mantenido los mismos derechos de exportación de la campaña previa, la tasa de rentabilidad hubiese sido del 6,2%", precisó.
El informe señala además que también se afectó a la ecuación económica un incremento del arrendamiento de 10,7 quintales por hectárea a 11,1 quintales, pero ayudó que los costos de flete disminuyeron, lo que arrastró al conjunto de los gastos de comercialización a la baja.
Trigo- soja, una combinación exitosa
Por otro lado, señalaron que el planteo de trigo con soja de segunda experimentó un mejor resultado que la soja de primera a nivel provincial, y se observó más lucrativo en 7 de los 17 departamentos analizados.
En ese contexto, "tanto en planteos de trigo, como de trigo y soja de segunda, el resultado fue mejor", aclaró Agusto, y explicó que en este caso, la rentabilidad se ubicó en 5,7 por ciento, con un resultado económico favorable de 30,3 dólares por hectárea, apenas la mitad de la ganancia de la campaña anterior que, vale recordar, tuvo rindes extraordinarios.
El respaldo del trigo fue clave no tanto por los precios, que cayeron en 30 dólares por tonelada, sino por el incremento del 16 por ciento en los rindes y porque los costos directos del cereal se disminuyeron por la caída en los valores de la urea y el fosfato.
San Justo entre los mejores resultados
En lo que hace a este planteo combinado, los mejores resultados se encontraron en la zona este de la provincia, con Marcos Juárez liderando la escala (USD 121/ha), seguido por San Justo (USD 59/ha) y Unión (USD 48/ha).
Por otro lado, los departamentos del oeste provincial han sufrido bajos rendimientos tanto de trigo como de soja de segunda, y es por ello que se observaron
rentabilidades negativas en varios departamentos, entre los que destacan Santa María, Río Cuarto y Río Segundo.