Remates on line: la forma de comprar hacienda que se acentuó con la pandemia
El aislamiento obligatorio aceleró nuevas modalidades de comercialización que comenzaron antes del coronavirus. Si bien se retomaron las subastas tradicionales (con presencia física), muchos siguen eligiendo la virtualidad para comprar ganado. Consignatarios de hacienda consultados por LA VOZ DE SAN JUSTO aseguran que "es tendencia sobre todo de la mano de las nuevas generaciones".
Con el cambio de paradigma agropecuario en nuestro país se fueron desarrollando nuevas formas de producción y comercialización. En el sector ganadero, alejó actores pero acercó innovación.
El amplio espacio territorial que separa las zonas de cría con los modernos sistemas de engorde, como el incremento de costos en los transportes y bienestar animal permiten aplicar modernas tecnologías para hacer más eficiente la comercialización.
A las subastas convencionales que tienen a los postores de cuerpo presente en el lugar de la feria, se le sumaron las que son filmadas y transmitidas por Internet y hasta las que son televisadas en vivo por canal de cable.
Los negocios vía watsapp o por teléfono, son otra modalidad que ganan terreno en nuestra región y que se acentuaron con las restricciones que impuso el aislamiento social preventivo y obligatorio que impidió durante la fase 1 la realización de las tradicionales subastas en las ferias.
Si bien hoy se retomaron las mismas, las firmas consignatarias de nuestra zona aseguran que un gran porcentaje de las operaciones se siguen realizando de manera virtual.
Ventas telefónicas
"En estos tiempos de pandemia, las ventas virtuales alcanzan el 50% de los negocios ganaderos", señaló a LA VOZ DE SAN JUSTO Damián Durango, de la Cooperativa Agrícola, Ganadera y de Consumo Freyre Ltda.
Aclaró que si bien antes de la pandemia ya se hacían algunas transacciones de este tipo, con el aislamiento obligatorio "se acentuaron" siendo que durante los primeros 15-20 días de la cuarentena los ´remates físicos´ estaban prohibidos.
Autoridad del Senasa a nivel local controlando la hacienda
Durango contó que una vez que se levantaron las restricciones "la hacienda se seguía concentrando y la rematábamos por teléfono".
En este sentido explicó que como consignatarios "clasificamos la hacienda por categoría y después comercializamos el total (por jaula). Vendemos el lote homogéneo por categoría a distintos remitentes como si fuera el remate".
"Se envían las imágenes y videos de la hacienda por watsapp y se concretan las ventas por teléfono", aseveró.
La modalidad elegida por las nuevas generaciones
Durango manifestó que esta modalidad, está vinculada con las nuevas generaciones que lo ven como "una manera práctica de comprar agilizando tiempos y reduciendo gastos".
No obstante, reconoció que "esto se da mucho con la hacienda con destino a faena para frigorífico, pero en el cado de la invernada
(que es la que vuelve al campo para ser engordada), se necesitan de mayores precisiones, por lo que los compradores prefieren comprarla en los tradicionales remates".
A raíz de esto, reflexionó: "hay cosas que van a quedar después de esta pandemia, o que se pueden complementar con los métodos tradicionales de venta.
Finalmente expresó que "nadie sabía como iba a reaccionar el mercado, pero desde que comenzaron los remates televisados a nivel nacional, ésta es una tendencia".
La tendencia
Guillermo Merlo, de Grimaldi Remates Feria y Mauricio Cillis, de la Cooperativa Agropecuaria Mixta Ltda. (Camil) coincidieron en que las ventas virtuales son tendencia en el mercado ganadero
"Mientras se suspendieron los remates físicos, hemos hecho ventas on line sólo de invernada, ya que los que tienen pocos animales prefieren venderlos en la feria para defenderlos mejor", sostuvo Cillis, de Camil,
Con respecto a esta categoría de hacienda, el consignatario contó que "está el productor que prefiere hacerlo de manera virtual , como aquel que atina a la feria porque va a haber muchos compradores y tiene mayor puja".
Asimismo manifestó que el remate director en el campo del productor es otra forma que tomó auge. "Se filma el lote en el campo y luego se ofrece a diferentes destinatarios de manera "on line". De esta forma, el productor se ahorra gastos de movilidad de la hacienda y evita la pérdida de kilos del animal".
"Es una herramienta que está en auge y es tendencia", dijo. No obstante rescató que "van quedar algunas categoría que si o si necesitan ir al mercado concentrador. El resto se puede manejar de manera virtual ", concluyó.
Sin público, sólo los compradores, con barbijos y distancia social, la nueva modalidad en los remates tradicionales
Sólo el comprador
La pandemia obligó a cambiar las
costumbres en las subastas ganaderas presenciales. De acuerdo a los protocolos, ya no puede asistir sólo público
en general y ni siquiera el vendedor, sino que se limita la presencia sólo al
comprador y personal autorizado, esencial para el remate.
"Es como en una fiesta de 15, el que no tiene invitación no entra", manifestaron los consignatarios consultados por LA VOZ DE SAN JUSTO.
"Nosotros informamos la lista de confirmados por lo que todo aquel que no esté habilitado no puede ingresar", agregó.
Entre las ventajas destacaron que se trata de una actividad al aire libre y que por las dimensiones de las tribunas "podemos mantener perfectamente los dos metros de distancia".
También los pagos de la hacienda que se hacían en el lugar, ahora muchos se realizan con dos o tres días de posterioridad preferentemente por vía electrónica.
Otras medidas establecidas por el protocolo son: medición de la temperatura a todos los asistentes (que deberá estar por debajo de los 37,5°); podrán ingresar vehículos con una cantidad máxima de 2 ocupantes; prohibir el expendio comercial de alimentos y bebidas durante la realización de las subastas a fines de evitar la aglomeración de personas y el contacto físico.; marcar las tribunas cada dos metros (a los costados, para arriba y abajo) previo al ingreso del público; ingresar al predio con barbijo no quirúrgico.