Porcinos: sector que crece aún en medio de la crisis
Según Coninagro, es una de las economías regionales que avizora un futuro promisorio, siendo que presenta "una mejora en el balance comercial y una coyuntura favorable". Se duplicó la producción y el consumo y creció la exportación, con China como nuevo horizonte.
El semáforo mensual de las economías regionales que publica Coninagro, arrojó que una de las actividades que se deja ver próspera es la de los porcinos. "El sector presenta una mejora en el balance comercial y una coyuntura favorable, a la vez crecieron las exportaciones, la producción y el consumo", destaca la entidad.
Para Alejandro Ovando, director de IES Consultores, "en lo que resta del 2019, el sector porcino continuará con el ritmo de crecimiento a pesar del contexto macroeconómico del país".
Esta situación se enmarca dentro de un dato alentador: la Argentina duplicó la producción de carne de cerdo en el transcurso de los últimos 7 años, además el crecimiento fue sostenido manteniéndose en orden al 8%. De esta manera, la exportación de porcinos aportó 22,8 millones de dólares al sector.
Cabe señalar que el relevamiento forma parte del documento "El Campo y La Política IV" presentado a los candidatos a Presidente.
Se duplicó el consumo
En relación al hábito de los argentinos, el estudio indica que en el país se consumen 16 kilos por habitante por año, cuando anteriormente la cifra se reducía a los 8 aproximadamente.
"De los 120 kilos de proteínas de carne que se consumen, antes eran 70% vacuna y ahora de casualidad llega al 50%", sostuvo Daniel Kindebaluc, consejero de Coninagro.
"La otra mitad se divide entre carne aviar y porcina, algo que debe estar en 17, o 18 kilos de carne porcina por habitante por año, cuando tiempo atrás estábamos en 7, 8 o 9 y en esto tiene mucho que ver la oferta de los cortes y los productos", continuó.
En su reflexión, el empresario agrega que: "Los precios de los cortes de cerdo se han equiparado con los de carne vacuna, aumentando la competencia entre las carnes".
El
rol del cooperativismo
Carlos Iannizzotto, presidente de Coninagro, destacó los valores del cooperativismo en la cadena porcina. "El espíritu asociativo hace frente a las necesidades económicas, sociales y culturales. Tomemos nota que de los eslabones de la industria porcina,en 3 de 4 etapas participan cooperativas: producción, comercialización, faena y fiambres y mercado interno".
Asimismo, Anibal Salva Gerente de Alimentos Magros de la Asociación de Cooperativas Argentinas, remarcó: "Si bien la coyuntura económica del país no es propicia para nuevas inversiones en la producción primaria, el mercado tiene potencial para consumir mayor cantidad de carne de cerdo; a través de los cortes frescos, pero fundamentalmente por medio de la sustitución de importaciones de materia prima para la chacinería. En este caso, un tipo de cambio alto favorece la disminución de las compras en el exterior, y abre una oportunidad para la producción local".
Las limitantes
El 98% de la producción se destina para consumo interno. "Un problema que afrontamos es que los insumos están dolarizados, y en el sector porcino gran parte de la demanda está es el consumo interno y ese sector está calmo", redondeó Kindebaluc.
"La otra limitante es que siempre el porcino vale un poco menos que la carne vacuna y al tener un atraso en precios, esto nos trae problemas. De todos modos es una de las actividades agropecuarias que se enmarca en una buena situación", sintetizó.
El cerdo vive una crisis global, afectado
por la peste porcina africana, una enfermedad altamente contagiosa y
fulminante. El gigante asiático produce y consume las dos terceras partes del
cerdo que se faena en el mundo, y en este contexto de búsqueda de nuevos
proveedores de proteína de cerdo por parte de China, es que se aceleraron las
gestiones que la Argentina venía haciendo hace más de 3 años para ingresar a
ese mercado. "En relación a la industria de porcinos, nos favorece un poco la
cuestión de los problemas de China. La Argentina estaba encaminando el sector
externo básicamente hacia Rusia y ahora se están haciendo unos pequeños
embarques a China", destacó Kindebaluc. "Pasamos
de tener una situación en la que éramos abastecidos por carne porcina proveniente
de Brasil a ser exportadores, y eso claramente nos posiciona un poco mejor",
destacó.China, un mercado potencial
La actividad en números
Según el relevamiento, hay unos 80 mil
productores de carne porcina, una cifra que al desglosarla arroja 5,1 millones
de cabezas, 1 millón de chanchas y abarca 7 millones de toneladas de producción.
De la producción nacional, el 54% proviene de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe,
y la ubicación de los criaderos se vincula con la principal producción maicera
del país, insumo de la producción porcina.
La producción porcina en la Argentina se
encuentra en manos de diversa variedad de productores; los no comerciales
tienen una mínima escala, generalmente en estos casos el sistema de producción
se destina a consumo propio y elaboración de chacinados artesanales. Los pequeños,
en tanto, están ubicados generalmente en zonas quintas, pequeñas chacras y
ciudades del interior. Los medianos, combinan el sistema tradicional a campo
con algún grado de confinamiento en las etapas de cría y engorde. Los
productores grandes, por su parte, incorporan tecnología como genética y
alimentos balanceados para cada categoría. Por último, los mega-productores,
incorporan sistemas de punta, con la última tecnología disponible, ambiente
sanitario, altos estándares de producción y altos costos de operación.