Pide gesto de humanidad para que sus hijas vean a su madre
El marido de la mujer internada en Córdoba le pidió a las autoridades del COE Regional que lo autoricen a viajar en el día a la ciudad.
Martín Delgado, un vecino de nuestra ciudad, pide poder viajar a la ciudad de Córdoba para que sus hijas Francesca (3) y Martina (13) puedan ver a su madre, María Laura Ferreira (42), quien se encuentra internada en un centro de recuperación de la capital provincial.
El viernes 25 de octubre de 2019, cerca de las 13, María Laura en un intento de arrebato cayó a la calle en la esquina de Bv. Sáenz Peña y General Paz, y sufrió lesiones que la mantuvieron por prolongado tiempo en estado vegetativo en el Hospital Iturraspe de nuestra ciudad.
Aquel mediodía, María Laura venía del Correo Argentino en una motocicleta Guerrero 70cc cuando un individuo -que se encuentra detenido- se le puso a la par e intentó quitarle la mochila. La víctima se resistió al arrebato y cayó al suelo, mientras que el agresor se dio a la fuga, pero luego integrantes de la División Investigaciones lograron identificarlo y detenerlo en su domicilio de la ciudad de Frontera.
Martín, en diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO, pidió a las autoridades del COE Regional que lo autoricen para viajar en el día a la ciudad de Córdoba para que sus hijas puedan ver a su madre. "Estoy pidiendo que mis hijas puedan ver a Laura, su mamá, hace desde el mes de marzo en que comenzó la cuarentena que ellos no pueden tener contacto con su mamá, entendemos que hay una situación de pandemia, nosotros ofrecemos hacernos un hisopado a la ida y a la vuelta, mantenernos aislados 48 ó 72 horas, lo que sea necesario para ir y venir de Córdoba en el día, sin detenernos en ningún lugar".
El hombre se comprometió a cargar combustible tanto al partir de San Francisco como en la ciudad de Córdoba, a los fines de no detenerse a lo largo del trayecto. "No pararíamos en ningún pueblo ni estación de servicios para evitar el contagio del virus, sería un viaje de unas ocho horas, lo haríamos en el auto", explicó.
El esposo de María Laura agregó que "los chicos necesitan abrazarla, besarla, sentirla viva, porque hasta ahora el único contacto que tenemos con ella es el de una videollamada, una vez que ellos estén con la madre, emprendemos el retorno", señaló.
Martín dijo que le pide a las autoridades un gesto humanitario, "ya intenté llegar por todos los medios posibles, fui a hablar con la jueza de Faltas y no me atendió, me envió un policía que hay en el lugar, esta persona fue, le comentó mi caso, pero negó el permiso. Luego, a través del concejal Romero hice una carta elevada al COE Regional y a la municipalidad, pero la respuesta fue negativa", se lamentó.
"Francesca pide por la madre, pregunta a cada rato, primero le decíamos que estaba dormida, pero a medida que fue creciendo, le decíamos que estaba del médico, pero ella la quiere ver, ella con tres años siente la necesidad de ver a su madre", aseguró el padre de familia.
En recuperación
La víctima del motochorro se encuentra internada en el centro de rehabilitación "María Reina", ubicado en el barrio Pueyrredón de Córdoba. "Ella hoy está bien, desde el momento en que ocurrió este accidente ella utilizaba pañales, ahora por suerte los está dejando de a poco, ha comenzado a caminar por sus propios medios. Un kinesiólogo y una enfermera la ayudan y ya comenzó a alimentarse por boca cuatro veces al día. Antes una parte de los alimentos los recibía por medio de una sonda gastrointestinal", reveló su esposo.
La mujer estuvo en estado vegetativo un mes. "El 28 de octubre nos informan de su estado y nos dicen que probablemente le quedaban pocas horas de vida, Dios existe y la ciencia a veces se equivoca", aseguró Martín.
El hombre cree que el acompañamiento familiar y la presencia de sus hijas contribuyó a la recuperación. "Hubo un momento a fines de noviembre donde viajaron las dos nenas, yo estaba en Córdoba, al mes del accidente a Laura la habían pasado a una sala común aunque estaba inconsciente, la bebé Francesca se la apoyó en los pies y le pidió teta, ella la abrazó, se subió la bata y comenzó a amamantarla, fue indescriptible ver a dos personas que no tenían conciencia de lo que hacían, Francesca pedirle la teta y ella, inconsciente, se levantó la bata y la abrazó. Fue algo conmovedor", sentenció el esposo de Laura.