Nuevos profesionales, quienes más gestionan la ciudadanía italiana
En los últimos 18 meses, la oficina local llevó a cabo alrededor de 250 trámites, que en su mayoría, son iniciados por jóvenes flamantes profesionales que egresan de la universidad.
En los últimos 18 meses se incrementaron notoriamente las solicitudes para la obtención de la ciudadanía italiana en gestiones iniciadas en la Agencia Consular de San Francisco.
En ese lapso, la oficina local llevó a cabo alrededor de 250 trámites, que en su mayoría, son iniciados por jóvenes flamantes profesionales que egresan de la universidad.
De esta manera, cada vez que la Argentina atraviesa por momentos complicados en su economía vuelve a la memoria aquella vieja canción de "Cacho" Castaña llamada 'Septiembre del '88', en la cual se entabla un diálogo entre un porteño y un amigo que se encuentra en Italia respecto de la necesidad de abandonar el país o quedarse, como una eterna disyuntiva ante la crisis.
Gestionarla en Italia
La secretaria de la entidad en nuestra ciudad, Marianela Moroni, explicó a LA VOZ DE SAN JUSTO que "meses después del cambio de gobierno aumentó considerablemente la cantidad de solicitudes. En estos momentos, la mayor cantidad de consultas tiene que ver con que algunos quieren hacer la ciudadanía directamente en Italia. Eso ocurre así porque en la Argentina el trámite demora entre cuatro y cinco años y como la gente no quiere esperar ese tiempo se llevan todos los papeles para hacerla en ese país, donde el trámite demora entre tres y seis meses".
En tanto, "no es fácil hacer la ciudadanía en Italia pero lógicamente por una cuestión de tiempo la gente se arriesga y va a fijar una residencia y si lo logran, pueden presentar la carpeta de ciudadanía", añadió.
Perfil de los solicitantes
La mayoría de las personas que acuden a la Agencia Consular de Italia en San Francisco al iniciar los trámites para la ciudadanía son jóvenes egresados de alguna universidad que se plantean iniciar su actividad profesional en Europa.
"Los recién recibidos son mayoría en el total de personas que vienen a hacer los trámites, pero también tenemos muchos casos de familias enteras que se fueron de San Francisco hacia Italia".
En cuanto a la emigración de familias sanfrancisqueñas y de la región, Moroni describió que "la mayoría se va buscando mejores oportunidades". Mientras que en el caso de los jóvenes que finalizan sus estudios universitarios, "quieren hacer una experiencia en el extranjero y, además, aprovechar para viajar antes de tener un trabajo fijo".
"Señalan que quieren irse porque en la Argentina no hay capacidad de ahorro, ese es el argumento más utilizado y recurrente", agregó la entrevistada.
¿Cómo es el trámite?
La ciudadanía italiana se basa en el principio del "ius sanguinis", en virtud del cual es italiano el hijo nacido de padre italiano o madre italiana.
Por línea paterna, la ciudadanía se transmite de padre a hijo sin límites de generación.
Por línea materna, la transmisión de la ciudadanía es posible sólo para los hijos nacidos después del 1º de enero del 1948 (fecha de entrada en vigor de la Constitución italiana). En ambos casos no se admiten saltos de generación.
El reconocimiento de la ciudadanía italiana está subordinado a la demostración, por parte del interesado, de que sus ascendentes en línea recta hayan mantenido la ciudadanía italiana sin interrupción.
Para esto, el trámite no se presenta tan burocrático. "Lo complicado a veces son las trabas que ponen los consulados en el mundo, sobre todo en los países donde hay más demanda", señaló Moroni. En este caso, en Latinoamérica, la mayor cantidad de solicitudes se presentan en Venezuela, Brasil y la Argentina.
Demora de hasta 5 años para conseguir turno
"Lo primero que le decimos a quien viene a requerir información acerca del trámite de la ciudadanía italiana es que la demora es de cuatro a cinco años. Si bien pueden conseguir la documentación en menos de seis meses, el problema se presenta para conseguir el turno. Ahí está la traba. Después, hay muchos casos en particular que pueden trabar las gestiones porque se han establecido muchas normas y requisitos que antes eran más sencillos", dijo.
En el caso de que la gestión la inicie un hijo de italiano, el trámite se presenta en el acto pero la carta de ciudadanía demora dos años, lo cual es mucho porque antes era una espera de seis meses".
¿Quiénes pueden gestionarla?
Existen tres formas para que una persona pueda obtener la ciudadanía italiana. La principal es por sangre, porque para Italia cualquier hijo de italiano es italiano, independientemente del lugar donde nació. Otra posibilidad es mediante el cónyuge, es decir un italiano que se casa con una persona extranjera; esa persona se convierte en italiana en seis meses en caso de vivir en Italia o en tres años si reside en otro país.
Por último, existe la ciudadanía por residencia, o sea que una persona va a vivir a Italia por diferentes motivos, después de diez años de residencia allí pasa a ser ciudadano italiano.
Respecto a las características de la ciudadanía italiana que existe en San Francisco, aseguran que el 80 por ciento es por derecho de sangre y el 20 por ciento restante, por cónyuge.
El costo, 300 euros
Más allá del costo que se requiere para la obtención de las documentaciones necesarias y sus respectivas traducciones, luego se debe abonar una suma de 300 euros en concepto de tasa consular que se destina al consulado general.
"Como sede del consulado tenemos que recibir la documentación, controlar que esté todo bien, hacer un chequeo del procedimiento y presentarlo desde aquí al consulado para que la gente no se vaya a Córdoba. Solo tienen que viajar a la capital de la provincia al momento de gestionar el pasaporte italiano en el consulado", precisó Moroni.
Antonio Di Monte, nuevo embajador del Abruzzo
El agente consular de Italia en San Francisco, Antonio Di Monte, fue nombrado embajador del Abruzzo en el Mundo, una distinción que otorga esa región de Italia a aquellos italianos que desarrollan una actividad de promoción de la cultura y las costumbres de esa región.
La designación de Di Monte se dio por iniciativa de un diputado de la región del Abruzzo, a partir de las gestiones que el empresario de nuestra ciudad realizó en beneficio de la Escuela Bilingüe Bicultural Dante Alighieri.
De esta manera, el próximo 5 de agosto, Di Monte deberá visitar la ciudad de Pescara donde recibirá la distinción que se otorga por cinco años.
"Jamás esperé algo así pese a que a principios de los años 2000 recibí el título de 'Cavallieri' y luego la Cámara de Comercio de Pescara me premió con un diploma y una medalla de oro junto a otras cincuenta personas de la Argentina en una ceremonia que se desarrolló en la ciudad de Buenos Aires", explicó Di Monte a LA VOZ DE SAN JUSTO.
Al definir las funciones que cumplirá, dijo que "voy a representar a la región en todo lo que sea necesario. Abruzzo está considerada el pulmón verde de Europa, una región muy bella de Italia ubicada en el centro del país, cerca del Adriático. Allí hay mucha naturaleza, es un lugar hermoso", destacó.
Entre las gestiones realizadas entre Italia y la Argentina que luego se tradujeron en hechos concretos, Di Monte intervino en la gestión para la obtención del terreno donde luego se construyó la Escuela Bilingüe Bicultural Dante Alighieri. Luego de transcurridos unos años en los cuales el gobierno de Italia colaboró con fondos para iniciar la construcción del establecimiento educativo, nuevamente Di Monte intervino para garantizar la continuidad de la edificación a través de la entrega de fondos pertenecientes a la Sociedad Italiana, lo que permitió que este establecimiento se encuentre en su décimo año de funcionamiento con una importante matrícula conformada por alrededor de 280 alumnos en los niveles primario y secundario.