Nahir Galarza se convirtió en 2018 en la mujer más joven en recibir perpetua en Argentina
La chica, de 19 años, fue condenada a prisión perpetua y pasó a integrar la lista de los criminales más famosos de la historia del país.
Nahir Galarza se convirtió en el año 2018 en la mujer más joven en ser condenada a prisión perpetua en la historia criminal argentina, al ser encontrada responsable del homicidio de su novio, Fernando Pastorizzo, a quien mató de dos tiros en diciembre de 2017 en la ciudad entrerriana de Gualeguaychú.
La estudiante de Derecho de rostro angelical se coló de lleno en las crónicas policiales horas después de que Pastorizzo (20) fuera encontrado sin vida en la calle con uno tiro en la espalda y otro en el pecho, y su moto y dos cascos tirados a su lado.
Eran las 5.30 de un 29 de diciembre, casi terminando el año pasado: Nahir primero dijo que había visto por última vez a su novio la noche anterior, pero luego se fueron sumando pruebas, entre ellas un video que la mostraba caminando cerca de la escena del crimen, que derivaron en que la chica terminara presentándose a la Justicia y confesara el hecho.
Asesorada por sus abogados, la joven luego fue cambiando su versión para que el crimen quedara como "accidental" y sostuvo que había mentido porque temió que culparan a su padre policía, que era el responsable de la pistola calibre 9 milímetros reglamentaria que se convirtió en el arma homicida.
Además, la estrategia defensista fue tratar de instalar que Nahir y Fernando no habían tenido una relación de noviazgo, pero tanto testigos como el hecho de que hasta se habían ido juntos de vacaciones a Brasil con los padres de la joven, empezó a desmoronar esa hipótesis.
En el afán de que Galarza obtuviera una pena menor y para mejorar su imagen ante la opinión pública, hasta apareció en escena un manager de artistas que intentó instalar en los medios la idea de que la joven había sido víctima de violencia de género, situación que no se pudo probar a lo largo de todo el expediente.
La investigación del fiscal Sergio Rondoni Caffa fue rápida, la causa elevada a juicio en abril -a sólo tres meses del crimen- y el 4 de junio la joven rubia y de cabello largo ya estaba sentada en el banquillo de los acusados en el marco de un juicio oral que, a diferencia de otros, llamó la atención del público en general.
Exactamente 29 días después y con 19 años, Galarza fue condenada a la mayor pena estipulada en el Código Penal argentino por el delito de "homicidio calificado por la relación de pareja", aunque ni ella ni sus padres estuvieron presentes en la sala para la lectura de la sentencia del tribunal oral, conformado por los jueces Mauricio Derudi, Arturo Dumón y Alicia Vivian.
"Las verdades salen a la luz tarde o temprano, más allá de todo lo el juego mediático que hicieron. Esta es la condena que se merece, eran evidencias muy claras", dijo Carla Pastorizzo, la hermana de Fernando, luego de conocerse el veredicto.
Los jueces dieron por acreditados dos elementos fundamentales: que Nahir y Fernando eran novios y que los disparos efectuados por la joven fueron intencionales.
"Ha quedado destruida la hipótesis de la defensa de que los disparos se produjeron de manera involuntaria", destacaron los magistrados, quienes resolvieron no hacer lugar al agravante de "alevosía" que habían solicitados las dos querellas ni al atenuante de violencia de género solicitado por la defensa.
Nahir declaró que la madrugada del 29 de diciembre Fernando fue a su casa y tuvieron relaciones, pero como él le dijo "zorra" y "puta" decidieron irse para ir a dar una vuelta en moto.
Siempre según la versión de la chica, antes de salir el joven la golpeó, tomó el arma de su padre de arriba de la heladera y se la guardó en el bolsillo para comenzar a andar juntos en la moto.
En medio del trayecto, ella le sacó la pistola y fue en ese momento que se disparó de forma accidental, dos veces.
Pero los peritos descartaron de plano esa hipótesis y dijeron que eso no podía suceder nunca, ya que previamente alguien debió haber preparado el arma para disparar.
Los especialistas calcularon que el primer disparo fue por la espalda cuando ambos estaba arriba del rodado y el segundo en el pecho cuando el joven yacía en el piso, desde unos 50 centímetros.
En tanto, a lo largo del debate oral, la joven se esforzó por negar el vínculo con la víctima e incluso trató de presentar como su novio a otro chico, pero éste negó que tuvieran una relación tan estrecha.
"Nunca fuimos novios, sólo nos veíamos de madrugada para tener sexo", declaró Nahir acerca del vínculo con Pastorizzo, pero los testigos que desfilaron en el juicio aseguraron que tuvieron una relación con idas y vueltas durante cuatro años.
Los relatos hablaban de una relación "enfermiza" en la cual Nahir se comportaba de forma violenta con Fernando, pero luego lo llamaba insistentemente para verse.
Tras la sentencia, la joven cumple su pena en la cárcel de Paraná y espera que la Cámara de Casación que empezará a funcionar en Concordia analice su apelación para no pasar 35 años tras las rejas.