Los Parchís: "Nos han drogado, hemos tenido intentos de rapto"
Estas son algunas de las frases surgidas de los miembros del grupos ícono de los '80 que estrenará un documental el 10 de julio en Netflix.
Parchís seguramente la agrupación infantil española más popular. Vendieron 25 millones de discos, actuaron en el Madison Square Garden de Nueva York, hicieron siete películas, viajaban en coches blindados, hacían giras.
También tuvieron épocas en las que no pisaron sus casas en seis meses. Eran cinco chicos vestidos de colores en una vorágine continua. Todo ocurrió en la década de los ochenta. A principio de los noventa su fama decayó y se separaron.
Los integrantes de Parchís rememoran, en un documental que estrena Netflix, la década en la que España entera gritaba sus nombres. Tino Fernández era la ficha roja, Yolanda Ventura era la ficha amarilla, Gemma Prat era la ficha verde, Frank Díaz era la ficha azul y David Muñoz, que vestía de blanco, era el dado. Cinco niños que apenas habían entrado en la adolescencia en 1979.
Tenían entre 8 y 12. "Era una locura constante: yates, aviones, helicópteros, fans...", afirma el grupo en una entrevista de 2017. "Se ganó mucho dinero, pero nosotros no", comentaron a El País.
"Éramos niños con un juguete que nadie más tenía [público y éxito] y era súper divertido. No tuvimos el agobio de que nos estuvieran exprimiendo la vida. No estábamos en el cole, no nos preocupaba si nos iban a pagar o no...", reconoció Tino Fernández.
Sin embargo como explica Frank Díaz, en la década de los ochenta el control laboral de los niños no era el mismo que se ejerce hoy. "Hacíamos jornadas de 19 o 20 horas. Empezábamos a trabajar a las seis de la mañana y acabábamos a la una de la madrugada después de haber hecho un triple concierto".
El documental dirigido por Arasanz muestra cómo el fanatismo que el grupo despertó, tanto en España como en Latinoamérica, tuvo consecuencias que en más de una ocasión pasaron de la anécdota.
"A Tino se le dislocó un brazo porque se rompió un cordón de seguridad y se nos abalanzaron las fans en una gira por México. También hemos tenido intentos de rapto, bombas en los aires acondicionados, nos han drogado subiendo al autobús de la gira!, señalaron.
Los cinco miembros del grupo rondan en la actualidad los 50 años y ya no se dedican a cantar. Frank es fotógrafo, Gemma estudió pediatría pero ahora es administrativa, Tino dirigió una compañía de limusinas y fue comentarista deportivo, y David trabaja en publicidad. La única ligada al mundo del espectáculo es Yolanda. Se fue a trabajar a México como actriz y su fama fue tal que incluso llegó a posar, en 2013, para la edición mexicana de Playboy.