Gimnasia y calor: qué hacer para no poner en riesgo la salud
Transpirar la camiseta sin peligro. Hacer ejercicio en verano es necesario y también divertido, pero puede ser perjudicial cuando el termómetro marca temperaturas de más de 35º. En los días en que el calor agobia, no se trata de suspender las rutinas, sino de tomar ciertas precauciones y adaptarse al clima.
Por Isabel Fernández/LVSJ
Tanto en los meses de calor como de frío, muchos sanfrancisqueños tienen el hábito de practicar actividad física de manera regular, una costumbre saludable que ayuda a mantenerse en forma y prevenir enfermedades.
Hacer ejercicio en verano es necesario y también divertido, pero puede ser peligroso cuando el termómetro marca temperaturas de más de 35º. En los días en que el calor agobia, no se trata de suspender las rutinas, sino de tomar ciertas precauciones y adaptarse al clima.
¿Cuáles son los riesgos de hacer actividad física cuando hace calor?, ¿Qué tenemos que tener en cuenta?. LA VOZ DE SAN JUSTO consultó al atleta sanfrancisqueño y médico especialista en Cirugía General Leonardo Delrivo (MP-31323) y a la licenciada en Nutrición, Antonela Crespo (MP- 2864), ambos del equipo del Sanatorio Argentino quienes brindaron consejos para proteger nuestro cuerpo.
Cuidado con el golpe de calor
"El principal riesgo es el famoso golpe de calor, que puede tener serias consecuencias especialmente en personas con enfermedades de base como hipertensión, diabetes, cardiopatías, entre otras", advirtió Delrivo al referirse a lo que puede pasar en nuestro organismo cuando hacemos gimnasia en el verano.
Explicó que cuando exponemos el cuerpo a altas temperaturas se afecta el sistema termorregulador y comienzan a fallar otros sistemas originándose trastornos cardiovasculares, neurológicos, musculares, renales, gastrointestinales y deshidratación.
"Muchas veces la gente comienza a experimentarlo pero no se da cuenta que lo está sufriendo, por eso es importante prevenirlo y aprender a reconocer los síntomas que son cansancio extremo, mareos, náusas, vómitos, calambres, aumento de la temperatura de la piel, pérdida de fuerza o contracturas musculares", afirmó.
Añadió que ante estas señales "es fundamental suspender la actividad física, buscar un lugar fresco, tomar líquido y llamar a un médico".
Prevenir
Cuando se hace actividad física en el verano hay que tomar una serie de medidas para prevenir cualquier complicación en la salud: una buena hidratación y alimentación, tener en cuenta los horarios en los que se hace gimnasia, tener cuidado con el sol, usar lentes de sol, usar gorro y ropa cómoda.
No esperar a tener sed
La hidratación es clave y al respecto el doctor Delrivo explicó que se aconseja tomar agua antes de comenzar la actividad física, durante la misma, tomando traguitos de a poco cada 20 minutos, no solo al aire libre sino también en un gimnasio donde puede hacer calor, y también después de realizarla. Remarcó que es importante "no esperar a tener sed para tomar agua porque la sed ya es signo de que comenzó la deshidratación".
Bebidas isotónicas
Algunas personas hacen actividad física y toman bebidas isotónicas, es decir aquellas con gran capacidad de rehidratación. Incluyen en su composición bajas dosis de sodio, normalmente en forma de cloruro de sodio o bicarbonato sódico, azúcar o glucosa y, habitualmente, potasio y otros minerales. ¿Todos pueden tomarlas?.
Delrivo afirmó que una persona sin ninguna patología que hace actividad física de baja o moderada intensidad y por poco tiempo -media hora o 40 minutos- "no hace falta que se hidrate con una bebida isotónica, con agua mineral alcanza porque no se pierden tantos electrolitos en ese tipo de actividad".
"Es diferente en el caso de una persona que realiza actividad intensa de más de una hora, con mucho calor -aclaró-. Ahí se recomiendan las bebidas isotónicas porque aportan sales minerales como sodio, potasio, cloro, magnesio. Eso es imporante porque en verano se produce una gran pérdida de electrolitos y eso ayuda a la recuperación muscular y la hidratación. También se aconseja tomarlas durante y después de la actividad física y no esperar a tener sed".
El médico y atleta advirtió que hay personas que hacen poca actividad física -dos o tres veces por semana para mantener o bajar de peso- y toman bebidas isotónicas. "Deben tener en cuenta que éstas bebidas también tienen glucosa, si se quiere mantener el peso es complicado porque se le agregan calorías al cuerpo sin necesidad".
Con buena hidratación, alimentación y cuidados con el calor se puede continuar haciendo gimnasia durante el verano
Comer frutas y verduras
Una buena alimentación también es importante cuando vamos a hacer ejercicio. La licenciada en Nutrición, Antonella Crespo aconsejó "tratar de comer al menos dos horas antes de salir a hacer gimnasia. En verano lo ideal es comer frutas y verduras porque contienen líquido y son livianas".
"Si se va a realizar una actividad de más de 40 o 45 minutos es recomendable comer algo cada esa cantidad de tiempo, puede ser alguna barrita de cereales o un turrón. Pueden ser suplementos como barritas energéticas que en general tienen glucosa concentrada que ayuda cuando se realiza una actividad física prolongada", afirmó.
No salir en horas de mucho calor
Lo principal es cuidarse del sol. "La gente muchas veces sale a correr en horas pico en el verano, algunos con la intención de broncearse, eso no es recomendable", dijo Delrivo. Agregó que lo aconsejable en estos días es realizar actividad física "a la mañana temprano o a la tardecita cuando hace menos calor".
Si se sale en horas pico, por no poder hacerlo en otro horario, es recomedable tratar de hacer ejercicio en un lugar que haya sombra o dentro de un gimnasio, en el aire libre usar una gorra para protegerse del sol, protector solar, lentes de sol y llevar ropa cómoda, holgada de colores, que deje transpirar, afirmó el médico.
"Muchos creen que si salen abrigados transpiran más y bajan de peso pero no es así, cuando salen abrigados transpiran porque se están deshidratando y no se pierde peso, porque con la hidratación se recupera", advirtió
Hacer gimnasia con enfermedades crónicas
La actividad física es importante en las personas que tienen enfermedades como hipertensión, diabetes o cardiopatías pero debe ser recomendada y controlada por el médico de cabecera.
"Es fundamental que el médico clínico, diabetólogo o el nutricionista controle la cantidad y el tiupo de ejercicio que deben realizar -aconsejó Delrivo-. Eso dependerá de cada paciente, del tipo y del grado de cada patología".
"En estas personas los cuidados con respecto al sol tienen que ser iguales o mayores que en otros que no tienen la patología, porque una deshidratación o un golpe de calor puede provocar consecuencias más graves en su salud. Además quienes son diabético o cardiópatas debe tener cuidado con las bebidas isotónicas, no es que no las pueda tomar pero hacerlo con recomendaciones en cuanto a cantidad"
Finalmente Delrivo afirmó que el calor "no debe ser razón para abandonar la actividad física, sino adaptarse a los distintos climas y cuidar la salud".