Exportaciones de carne marcan un camino
A principios de la década, la ganadería y la industria frigorífica languidecían ante la exasperante presión estatal. Ahora, en medio del tembladeral que significa la actual coyuntura, asoman como un sector que puede liderar la recuperación si a los gobernantes no se les siguen ocurriendo medidas fiscales que asfixien y acrecienten la incertidumbre.
Durante agosto pasado se faenaron en
Argentina 1,13 millones de cabezas de ganado bovino, esto fue 3,5% más que la
cantidad faenada en igual período del año anterior, crecimiento que se viene
reflejando desde hace un tiempo debido al despegue que han mostrado las
exportaciones, de acuerdo con la información difundida por la Cámara de la
Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (Ciccra).
Con estos números, "agosto fue el segundo mes del año con mayor nivel de actividad, al tiempo que se cumplió un año y medio de crecimiento ininterrumpido", reflejó el informe. Así, según informó Ciccra, en el octavo mes del año la producción de carne vacuna totalizó 264 mil toneladas res con hueso, superando en 6,3% el nivel registrado 12 meses atrás.
En medio de la crisis financiera que agobia la producción en el país, bienvenido sea que algunos sectores estén evidenciando repuntes. Si bien varios de ellos se relacionan con las ventajas cambiarias a pesar de la imposición nueva de retenciones a las exportaciones, no es menos cierto que la dinámica de la producción pecuaria ha encontrado un ritmo que hace mucho no se observaba. Basta recordar que en 2010 la caída de la producción de carne en el país llegaba al 23% interanual como consecuencia de la impiadosa y poco efectiva intervención estatal en los mercados que pretendían controlar el precio interno y, por ende, desalentaba la exportación.
Los datos de Ciccra son elocuente demostración de una realidad que puede servir para que otros sectores encuentren también el camino de la recuperación. "En julio de 2018 las exportaciones de carne vacuna alcanzaron el nivel más elevado desde el cierre de 2009". En tanto, los ingresos por las ventas al exterior de carne vacuna ascendieron a 169 millones de dólares durante julio, lo que implicó un aumento de 49,1% interanual. El crecimiento de los embarques a China y Rusia explicó casi 90% del aumento total del volumen exportado de carne vacuna desde Argentina entre enero-julio de 2017 e igual período de 2018", admitió la entidad industrial. "Esa dinámica, en el caso de Rusia, se viene profundizando en los últimos cuatro meses, y esto es lo que explica el mayor ritmo de expansión de la faena de hembras en general y de vacas en particular", se agregó. Chile, Alemania e Israel ocuparon los lugares tercero, cuarto y quinto en las exportaciones en volumen.
A principios de la década, la ganadería y la industria frigorífica languidecían ante la exasperante presión estatal. Ahora, en medio del tembladeral que significa la actual coyuntura, asoman como un sector que puede liderar la recuperación si a los gobernantes no se les siguen ocurriendo medidas fiscales que asfixien y acrecienten la incertidumbre.