En la neo, la familia es más que una visita
El octavo derecho del Decálogo del Prematuro creado por Unicef establece: "La familia de un bebé prematuro tiene pleno derecho a la información y participación en la toma de decisiones sobre su salud a lo largo de toda su atención". El abrazo poderoso de la familia ayuda a crecer al bebé nacido antes de tiempo, junto a los médicos forman un equipo que trabaja por la vida. En el marco de la Semana de la Prematurez, familias que pasaron por la Neo cuentan su experiencia.
Por Isabel Fernández|LVSJ
Cuando un bebé nace prematuro, la familia es protagonista de su desarrollo. Su abrazo poderoso ayuda a crecer a ese pequeño que llegó al mundo antes de tiempo; junto a los médicos y enfermeras, mamá, papá, los hermanos, los abuelos, son un equipo que trabaja por la vida.
El octavo derecho del Decálogo del Prematuro creado por Unicef establece: "La familia de un bebé prematuro tiene pleno derecho a la información y participación en la toma de decisiones sobre su salud a lo largo de toda su atención".
Por eso, es necesario empoderar a la familia, en especial los padres, para que participe activamente del cuidado del bebé y para eso la información, el acompañamiento y la contención no deben ser impedidas en la neonatología.
Desde el 1 de octubre de 2021 hasta el 30 de setiembre de 2022, es decir en el último año, se registraron 163 bebés ingresados al Servicio de Neonatología del Hospital "J. B. Iturraspe", de los cuales el 36% fueron prematuros. En la Argentina, según los últimos datos actualizados, en el año 2020 nacieron vivos 533 299 niños/as de los cuales 39.087 fueron prematuros moderados y tardíos.
En el marco de la Semana de la Prematurez que este año se realizó bajo el lema "El abrazo de la familia, una terapia poderosa", el Hospital organizó un emotivo encuentro entre familias de prematuros que compartieron sus experiencias al atravesar el camino incierto del nacimiento antes de tiempo, vivencias que transformaron a ambas partes: tanto a las familias, como al equipo de salud que ayudó a emprender ese viaje.
"Es nuestro
milagrito", afirmaron Daiana y Martín los papás de Emilio
"Nuestro milagrito"
Emilio Bernardi Gómez, nació el 14 de febrero de 2022, con 780 gramos en la semana 25 de gestación, hoy, con 9 meses, se encuentra bien y creciendo saludablemente. Emocionados hasta las lágrimas, sus papás Daiana y Martín, contaron cómo fue esa historia de valentía
"Emilio es nuestro milagrito. El pequeño llantito que hizo cuando nació tan chiquito fue la primera esperanza para nosotros, fue un camino duro porque no había muchas esperanzas con él. Fue un bebé muy deseado que esperamos con mucho amor", dijo su mamá Daiana.
Contó que el camino fue "muy difícil por la incertidumbre de ser prematuro. Pero creo que cuando comenzó la lucha, especialmente de él, porque tan pequeñito luchó por sobrevivir. Todos los días cuando lo íbamos a ver, le pedíamos que tenga fuerzas y que se quedara con nosotros, porque lo amamos y lo deseábamos mucho".
"Fue duro verlo pasar por muchas cosas y tratamientos, verlo entubado, que los pinchan, pero gracias a Dios salió adelante. Estamos muy agradecidos con el equipo del Hospital Iturraspe, tanto enfermeras como médicos, porque nos atendieron muy bien y nos apoyaron mucho, nos sentimos muy acompañados. Nunca nos vamos a olvidar de ninguno de los profesionales que nos atendieron", resaltó.
Su papá Martín, aliviado de ver a su pequeño bien, dijo: "sufrí día a día verlo, todo el tiempo con miedo pero gracias a todos pudimos salir adelante y acá estamos felices con Emilio sanito".
Al dejar un mensaje de apoyo para los papás que pasan por la neo ambos afirmaron: "No pierdan la fe porque ellos pueden, tienen una fuerza increíble por vivir. Es importante que los acompañen porque creo que sienten el apoyo de sus papás y la familia".
Erik con mamá,
papá y la abuela. "El amor de la familia es fundamental", afirmaron
"El amor de la
familia es fundamental"
Camila y Alexis tuvieron a Erik Luque Gallardo el 17 de junio pasado que nació con 1.520 gramos de peso a las 32 semanas de gestación. En el encuentro compartieron su experiencia junto a la abuela Norma que los acompañó siempre.
Camila llevó bien el embarazo de Erik pero sufrió una cardiopatía y se produjo el nacimiento prematuro. "Fue un camino duro. Los prematuros son unos guerreros y salen adelante. Es importante dejarse ayudar, dejarse acompañar emocionalmente y sobre todo informarse", dijo.
Emocionado, su papá Alexis dijo que fue algo "muy fuerte, una experiencia nueva, porque vivimos el día a día, pero gracias a Dios y a los profesionales que lo atendieron hoy lo tenemos con nosotros".
La abuela Norma lo vivió desde afuera y destacó que a pesar de las complicaciones, "gracias a Dios Erik fue atendido por este equipo maravilloso. Cuando Erik nació todavía no se podía entrar mucho a la neo por las restricciones del covid pero me daban toda la información constantemente. Cuando escuchábamos de un bebé prematuro nunca nos imaginamos que podíamos sufrirlo también, pero agradezco conocer todo esto y saber un poco más".
"Si se puede salir adelante con un bebé prematuro, el amor de la familia es fundamental", resumió Norma.
Remarcó: "Estoy muy agradecida con todo el equipo porque sé que Camila y Alexis no estaban solos, estaban acompañados, es importante valorar a todo el equipo de salud. Ver que Erik de a poco iba avanzando y evolucionando bien me emociona mucho, seguimos en el camino para que el llegue a la meta. Que Erik y Camila estén con nosotros es un doble milagro porque los dos estuvieron en peligro. Es algo maravilloso, Dios es muy milagroso y guió las manos de quienes los atendieron".
En el encuentro también estuvieron presentes la familia Ceballos, que llegó desde Villa Concepción del Tío y Las mellizas Ema y Emily Cortez, con su mamá Antonella y la tía Ana.
En cuanto el equipo de salud, participaron la jefa del Servicio, la pediatra Celia Finetti, la ex jefa, doctora Mónica Macello, la supervisora de Enfermería, licenciada Claudia Calcagno y el equipo completo integrado por las licenciadas Patricia Tello, Verónica Bejarano, Vanesa Bonino, Carolina González, Vanesa Bonino y Lorena Gandolfo; además de las enfermeras Claudia Plano, Malen Sotelo, Vanesa López y Roxana Trucolo. También las colaboradoras permanentes como Gloria Bertolli y Susana Bertin en representación del grupo de la Virgencita de Schoenstatt, María Isabel García, en representación de Caritas de la Parroquia perpetuo Socorro.
El equipo de
neonatología del Hospital con los pequeños luchadores
La importancia de los estímulos afectivos
Al dejar su mensaje en el marco de esta celebración, la pediatra Celia Finetti, hizo hincapié en la importancia de la participación de la familia en la evolución del desarrollo de los prematuros.
Destacó que el "acompañamiento desde el embarazo, cuando nace el bebé y en la neo a todo el grupo familiar es fundamental porque tiene muchos beneficios para el desarrollo del bebé. Desde la lactancia materna con la idea que se vayan de la neo sosteniéndola. Ahora que salimos de la pandemia la idea es volver a incorporar a la familia a la neo, padres, hermanos y abuelos".
"Incorporar a los
papás con conocimientos que no son tan difíciles como alimentarlo por la sonda,
ayudan mucho y hacen que sientan que colaboran. Se van con conocimientos que
les sirven cuando vuelven a su casa, estando los papás adentro es más fácil
solucionar problemas que puedan surgir en el servicio. Además se facilita el
acceso a la planificación familiar para que puedan esperar el tiempo que sea
prudente y no repetir otro embarazo prematuro", explicó la médica.
Finetti resaltó que es "importante sensibilizar al equipo de salud y todos los trabajadores del hospital, sobre los posibles riesgos y secuelas, del prematuro, realizar evaluaciones para detectar de manera precoz los déficits en el desarrollo, intervenciones necesarias en el seguimiento y coordinar la atención interdisciplinaria. El trabajo en equipo con servicio social o con salud mental, ayuda a identificar problemas como adicciones, violencia familiar, o situaciones que puedan surgir en la familia".
"En el Hospital Iturraspe contamos con una casa para las mamás que tienen a sus bebés internados y la idea es acompañarlas con todo equipo, médicos, enfermería y trabajo social para que puedan compartir con sus pares que están pasando por lo mismo, ver que no solo les toca a ellos", manifestó.
Por su parte la licenciada Calcagno remarcó que cuando se recibe a un bebé prematuro en la neo, "todo se concentra en salvar su vida y queda afuera algo muy importante que son sus padres y su familia. Los estímulos afectivos son muy importantes en la evolución de los bebés que están en la neo, por eso es clave incorporar a la familia".
Explicó que no solo el contacto con la mamá y el papá "es importante, sino también con los hermanos y los abuelos. Los hermanitos sufren estrés porque quieren conocerlo y el de los abuelos es tremendo. Se necesita volver a ese contacto para generar esos vínculos familiares tan necesarios y fundamentales para la recuperación".
Con un encuentro de familias, el servicio de Neonatología del Hospital Iturraspe celebró la Semana de la Prematurez