Día del Peluquero: unidos para salir adelante
El coronavirus dejó a la luz la importancia de la unión de los profesionales para salir adelante pero también las nuevas formas de trabajo y la tecnología que llegaron con la pandemia.
Como en cualquier rubro, hay nombres que se destacan más que otros, también están aquellos con trayectoria y los que recién comienzan. En el mundo de la peluquería, donde se conjugan la belleza, la estética, la creatividad y el trabajo artesanal del peluquero; las diferencias suelen existir.
Sin embargo, la pandemia de coronavirus que los tuvo más de dos meses sin trabajar, con locales cerrados y sin poder obtener ingresos, hizo que los colegas del sector se unieran, juntaran fuerzas y salieran adelante juntos.
Este 25 de agosto, el Día del Peluquero, se celebra en la pluralidad y con las ganas de trabajar para recuperar el tiempo perdido con nuevas formas de hacerlo que llegaron para quedarse.
El sillón rojo, un clásico del salón de Juncos.
Uno de los que decidió que era momento de dejar diferencias de lado fue el peluquero Alberto Juncos (62), quien puso todas sus energías junto a sus colegas para salir adelante: "Unirnos nos dio la fuerza para agruparnos, tener una espalda y poder dialogar con el intendente, quien siempre nos recibió de la mejor manera", dijo Alberto Juncos.
Nueva normalidad
Alberto es un referente de la peluquería local. Comenzó en el rubro a los 14 acompañando a su papá, quien también fue peluquero.
Hoy, a sus 62 años, vive una nueva forma de trabajar, atravesado por protocolos, turnos y las redes sociales que se convirtieron en el complemento perfecto del rubro para vender productos pero también para marcar tendencia. "Esta pandemia nos enseñó muchas cosas, pero lo más importante son las nuevas formas de trabajar, es decir, con protocolos. Es estar con barbijo, respetando las distancias, el uso de alcohol para desinfectar tanto nosotros como nuestros clientes. Además, nos enseñó a gestionar de otra manera nuestros tiempos de trabajo, ya que antes muchas peluquerías no trabajaban con turno y esto nos llevó a profesionalizarnos y optimizar cada servicio que ofrecemos", explicó el peluquero.
Pero la nueva normalidad trasciende el salón. "Los desafíos de la peluquera actual son las redes sociales, donde encontramos un nuevo camino para la venta de productos que fue lo que nos mantuvo vivos durante la cuarentena obligatoria. Esta tendencia quedó presente y la interacción se mantiene viva", expresó el entrevistado.
Vivir de la tijera
Pareciera que ocurrió hace tiempo, pero fue hace unos meses. El rubro de la peluquería vivió los días más difíciles en su historia por la pandemia del coronavirus.
"El primer mes que cerramos, lo tomamos medianamente bien, porque sabíamos que nos estábamos cuidando de un virus, tanto nosotros como nuestros clientes.
Sin embargo, imaginábamos que iba a pasar más rápido pero entramos al segundo mes y nuestra realidad se tornó mala, la situación casi irrespirable. Fue pasando el tiempo y todos necesitábamos empezar a trabajar para afrontar las deudas, los alquileres, los sueldos; necesitábamos subsistir. Nosotros vivimos de la tijera y no podíamos estar sin atender a nuestros clientes", recordó Alberto.
Para el coiffure, "fueron casi tres meses. Algunos colegas ya estaban cerrando sus puertas y se mudaban a sus casas, dejando atrás el esfuerzo de tanto trabajo; pero juntos salimos adelante".
"Sentí la necesidad de reunirnos para salir adelante. Recibí el llamado de algunos colegas y junto a ellos, hicimos posible que muchos nos reuniéramos y nos juntáramos para hacer algo para todos los del sector".
En este 25 de agosto, un Día del Peluquero tan particular, "nosotros lo celebraremos trabajando porque somos verdaderos artesanos que disfrutamos lo que hacemos. Cuando vi a mi padre trabajar, me enamoré de la peluquería y desde los 18 que tengo mi espacio, trabajo cada día feliz porque esto me da vida", concluyó Alberto.
"Nosotros vivimos de la tijera y no podíamos estar sin atender a nuestros clientes".
¿Por qué se festeja el Día del Peluquero?
A nivel mundial se celebra todos los 25 de agosto como el Día del Peluquero. En Argentina, la fecha se remite a la creación de la "Sociedad de Barberos y Peluqueros", a nivel mundial, la fecha se remonta al siglo XIII.
Comenzando por la historia mundial, el día del peluquero se remite al siglo XIII, donde el servicio de peluquería era solo para la nobleza. En esos tiempos, la clase alta de la sociedad europea utilizaba pelucas y, el peluquero, que pertenecia a la clase plebeya, se ocupaba de perfeccionar esas pelucas y no el pelo natural.
En ese contexto, en Francia, el Rey Luis IX decidió jerarquizar a su peluquero nombrándolo "hombre libre" y dándole un título similar a la de los caballeros y medicos.
La fecha del 25 de agosto, se designa porque fue el día en que la Iglesia Católica santificó a Luis IX.
En Argentina, la fecha se remonta a 1877, cuando Domingo Guillén (peluquero y director de teatro), organizó un evento en el Teatro porteño Coliseo, al que asistieron 400 personas y dónde se creó la Sociedad de Barberos y Peluqueros.
Más tarde, en 1940, el Congreso decretó oficialmente el 25 de agosto como Día del Peluquero.