Dani, la sanfrancisqueña que busca su DNI sin género
"No soy hombre ni mujer pero soy femenina". No se sienten varones ni mujeres. Así es el género no binario con el que se reconoce esta joven trans oriunda de nuestra ciudad quien inició el trámite para cambiar su partida de nacimiento y obtener su documento sin sexo definido, en el marco de la Ley de identidad de género, a siete años de su promulgación.
Algunas personas no se identifican con ningún género, y hay otros cuyo género cambia conforme el tiempo.
El caso de Dani Olocco Díaz, de San Francisco, aunque vive desde hace dos años en Rosario, donde estudia periodismo, ayuda a entender cómo es el género "no binario", también conocido como genderqueer, un conjunto de identidades transgénero.
"No soy hombre ni mujer, pero soy femenina", aseguró Dani, que inició los trámites para el cambio de su partida de nacimiento y así obtener su DNI sin sexo definido.
Dani -que nació varón- prefiere que identifiquen su nombre con el lenguaje inclusivo o con el pronombre ella, hacia donde se orienta más su sexualidad.
"Soy una chica no binaria y tengo una relación arraigada a lo femenino simplemente porque me hace sentir bien", explicó.
La elección del nombre
Dani no es el nombre que hoy figura en su documento de identidad, pero es con el cual se identifica.
"Lo elegí porque quería un nombre andrógino, que fuera tanto masculino como femenino. Este nombre es neutro y es como quiero llamarme", le dijo tajante a LA VOZ DE SAN JUSTO.
La joven de 20 años comenzará pronto un tratamiento hormonal para mejorar su piel y otros aspectos del cuerpo, pero no pretende la figura precisa de una mujer. "Frente a un espejo, lo que veo es una persona no binaria. Quiero estar bien conmigo misma. Entiendo mi feminidad como quiero y lo expreso como deseo pero no tengo un nivel de disforia que lleve a operarme", comentó.
La identidad de género autopercibida
Este año se celebra el séptimo aniversario de la aprobación de Ley de Identidad de Género (Ley 26.743). Recordamos el 23 de mayo de 2012 como un día en el cual la Argentina se puso a la vanguardia en la ampliación de derechos de la comunidad posibilitando a cualquier persona el reconocimiento de su identidad autopercibida, reconociendo el derecho de todas las personas al trato digno y a la inclusión y acceso a derechos de toda la comunidad travesti, transgénero y transexual.
Con la sanción de la Ley de Identidad de Género se dio un paso fundamental para la visibilidad, identidad e inclusión de las personas trans en nuestra sociedad.
DNI sin indicación de sexo y como un trámite
En nuestro país con la Ley de Identidad de Género se ofrece la institucionalidad necesaria para el ejercicio efectivo de los derechos de todas las personas en igualdad de condiciones, independientemente de su orientación sexual y su identidad de género.
La ley otorga el derecho al reconocimiento de una identidad de género y no plantea que tenga que ser binaria. Sin embargo,existe todavía al respecto una lucha -la de las personas que se autoperciben como no binarias- no ganada del todo, aunque algunas batallas ya ganaron: recientes fallos judiciales obligaron a modificar documentos -emitidos antes de la Ley 26.743- para que no haga referencias ni al sexo masculino, ni al femenino, algo que en algunos países ya es posible, pero en el nuestro es burocrático.
"Mi nombre me identifica como alumna regular del Instituto Superior de Educación Técnica Nº 18 de Rosario donde estudio, así me llama mi novio y de esta manera me conocen mis amigos, pero no es suficiente -señaló Dani-. Quiero mi DNI de persona no binaria porque eso es lo que soy, porque mi identidad es un derecho".
En esa disputa, Dani ya dio el primer paso: "En Rosario inicié los trámites de cambio de partida de nacimiento donde figure mi verdadera identidad sexual y una vez obtenido esto, seguiré con el DNI".
Quizá algunos piensen que es sólo un papel, pero para Dani es el reconocimiento de su identidad.
Enfrentar la discriminación
En la infancia, Dani sufrió la discriminación por su elección sexual. "Sufrí bulliyng toda mi vida por ser femenina. Desde antes de comenzar el jardín de infantes, mis vecinos del barrio se reían de mi voz. Ya en la escuela, los varones se burlaban de mí porque me juntaba con mujeres", recordó.
Cuando cursaba el secundario, en un colegio católico de nuestra ciudad, Dani se enamoró de quien es su actual pareja, un joven músico y Youtuber. "Cuando comencé la relación con mi novio, lo publiqué en las redes sociales y si bien no me importaba el comentario de la gente, ese mismo día de la publicación sentí que todos me miraban despectivamente y hablaban a mis espaldas. No era fácil tener una pareja hombre asistiendo a una institución religiosa", contó.
Alejarse de San Francisco e instalarse en Rosario le dio la posibilidad de expresarse libremente y ser, vivir como se siente.
"Estaba en una clase de Antropología de la carrera de Letras en la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Rosario y nos preguntaron cuál era nuestro género pero en la hoja donde debíamos anotarlo, había dos puntos en vez de opciones y en ese momento entendí lo que debía decir. En otro momento, hubiera tildado la opción de masculino, pero en cabio, decidí escribir que era una persona no binaria", citó.
Cómo vestirse es parte de un acuerdo social
Despojada del prejuicio propio, Dani disfruta vestirse tanto con ropa masculina como femenina. Para ella, la ropa no tiene género sino que es parte de una construcción social. "No creo que exista la ropa de mujer o la de hombre, porque ese es un acuerdo social. Uso vestidos pero no soy más o menos femenina por mi apariencia. Hay una condición social que exige a las mujeres ser femeninas y a las personas trans más aún, pidiéndoles un esfuerzo mayor para demostrar su orientación social, pero eso no es más que una construcción cultural", sostuvo. Dani cuenta con el apoyo incondicional de su familia, aunque reconoce que es difícil que acepten su nombre. "Tuve varias charlas con ellos y les expliqué que era una persona no binaria y me ayudaron con mi tratamiento médico, pero aún les cuesta llamarme Dani. Este proceso de aceptación lo transitamos juntos, en familia".
"Muchas chicas trans se comunican conmigo diariamente porque ven que pude ser quien quiero ser, pero para muchas es difícil acceder a tratamientos médicos porque algunas se topan con profesionales que se niegan a atenderlas a pesar de que la Ley de Identidad de Género nos ampara. A ellas les digo siempre que sigan luchando por sus derechos y que no permitan que les hagan daño porque se merecen ser felices y quienes desean ser", finalizó.
Dani es de nuestra ciudad pero vive en Rosario, donde estudia periodismo
¿Cómo es el género "no binario"?
Habría que partir desde distinguir entre los conceptos de sexo, de acuerdo con los genitales, y el género, manifestado como una construcción binaria masculino-femenino.
En un sentido general, por sexo entendemos las características anatómicas y biológicas que están relacionadas con lo que creemos que es un varón y una mujer. Y cuando nos referimos a género hablamos de una construcción cultural, histórica y situada (y por lo tanto arbitraria), sobre la base de los sexos. Por ejemplo, se define a las personas cis como aquellas cuya identidad de género coincide con el sexo asignado al nacer y a las personas trans como aquellas que se identifican con un género distinto al sexo que les asignaron cuando nacieron.
Fuera del binarismo de género, hay personas que no se identifican ni con lo masculino ni con lo femenino, son no binarias.
El Centro Nacional para la Igualdad Transgénero (Ncte por sus siglas en inglés) explica en su sitio oficial que la mayoría de la gente, incluyendo a las personas transgénero, se identifican como hombres o mujeres.
Es importante diferenciar el sexo al nacer del género (en este caso no binario) y de la orientación sexual. Es decir, alguien puede considerarse no binario y es indistinta su orientación sexual.
Pero algunas personas no necesariamente encajan en una de las categorías de "hombre" o "mujer", "masculino" o "femenino".
Además de "no binario", los términos con los que se describen estas personas son "genderqueer", "sin género" o "bi género"; no significan lo mismo, pero todos se refieren a que no pertenecen a un solo género.
Identificarse como "no binario" no significa ser intersexual, pues aunque en éstos su anatomía o genética no encaja con las típicas definiciones de masculino o femenino, sí se identifican como hombres o mujeres.
En 7 años, 19 personas cambiaron su DNI
A siete años de la sanción de la Ley la
Identidad de Género y desde su entrada en vigencia, en San Francisco fueron 19
las personas que tramitaron el cambio de su DNI bajo esa normativa.
Así lo informaron a LA VOZ DE SAN JUSTO fuentes del Registro Civil, sito en calle Echeverría 157, que además detallaron que en su mayoría se dio el cambio de masculino a femenino.
La norma, que fue el paso siguiente a la sanción de la ley de Matrimonio Igualitario en 2010, fue impulsada por organizaciones sociales como la Federación Argentina LGBT y la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina (Attta) y garantizó el acceso al cambio registral de reconocimiento de identidad autopercibida para mujeres y hombres trans en la Argentina, al tiempo que dispuso al Estado y al sector privado a garantizar la atención integral de la salud de este grupo de personas.
En los casos de personas no binarias, el trámite es el mismo, cuando se debe identificar el sexo de la persona en el documento, se coloca una línea.