Crecen llamados a un impeachment contra Trump tras declaración del fiscal del Rusiagate
El informe, de 448 páginas, detalla hasta 10 instancias en las que Trump pareció intentar obstruir la justicia, pero Mueller, haciendo notar que la política del Departamento de Justicia es que un presidente en funciones no puede ser procesado, optó por no pronunciarse sobre si el mandatario había o no cometido el delito.
La declaración del fiscal especial Robert Mueller, de que no podía exonerar al presidente Donald Trump de posibles delitos por la interferencia de Rusia en las elecciones de 2016, desató hoy nuevos pedidos en el Congreso de iniciar un juicio político al mandatario, algo a lo que se resistían hasta ahora los líderes demócratas.
Sorprendiendo a Washington con sus primeras -y quizás últimas- declaraciones públicas sobre la investigación que lideró durante casi dos años, Mueller dijo ayer que directivas de larga data del Departamento de Justicia le impidieron imputar a Trump, pese a diez posibles actos de obstrucción de la Justicia por parte del presidente.
Pero no imputar a Trump no es equivalente a exonerarlo de toda culpa, dijo el fiscal, que insinuó que el Congreso tenía tanto la potestad constitucional como la responsabilidad de seguir el caso y decidir qué hacía con sus hallazgos. "La Constitución requiere otro proceso, distinto del sistema de justicia criminal", declaró.
Con la oficina de Mueller ya cerrada y sin que se esperen nuevas declaraciones del fiscal, sus breves comentarios fueron, para muchos, una invitación al Congreso a lanzar el procedimiento de impeachment para intentar destituir al presidente, que desde que llegó a la Casa Blanca no logra sacarse del zapato esta piedra del Rusiagate.
"Nos está pidiendo que hagamos nosotros lo que no estaba autorizado a hacer él: hacer responsable al presidente", dijo a CNN la congresista demócrata Val Demings, integrante de la Comisión de Asuntos Judiciales de la Cámara de Representantes, el órgano del Congreso donde suele comenzar un procedimiento de juicio político.
"Nos queda un solo camino para garantizar que se haga justicia", dijo el senador Cory Booker, uno de los precandidatos presidenciales del Partido Demócrata.
"Está claro que la Cámara (de Representantes) debe iniciar los procedimientos de impeachment. Nadie está por encima de la ley", agregó en declaraciones a periodistas en el Capitolio. La acusación indirecta de Mueller desencadenó una nueva tormenta política en Washington, con Trump volviendo a asegurar que el caso está cerrado y que ha quedado completamente exculpado.
"Nada cambia del informe Mueller; no hubo pruebas suficientes y, por lo tanto, en nuestro país, una persona es inocente", afirmó Trump en Twitter, y agregó: "¡El caso está cerrado! Gracias".
Mueller investigó si Rusia y la campaña de Trump se confabularon para que éste ganara las elecciones de 2016 y si el mandatario intentó obstruir la pesquisa sobre esas sospechas.
El mes pasado, el Departamento de Justicia presentó el informe de Mueller sobre la investigación, que señala que no se hallaron pruebas de vínculos entre colaboradores de Trump y funcionarios del Kremlin y evita una conclusión firme sobre la eventualidad de que el mandatario haya incurrido en obstrucción a la justicia.
El informe, de 448 páginas, detalla hasta 10 instancias en las que Trump pareció intentar obstruir la justicia, pero Mueller, haciendo notar que la política del Departamento de Justicia es que un presidente en funciones no puede ser procesado, optó por no pronunciarse sobre si el mandatario había o no cometido el delito.