Aikido: defensa personal para mujeres contra la violencia
Concurren a las clases mujeres en su mayoría y también algunos niños.
Alrededor de 17 mujeres de nuestra ciudad encontraron en la práctica del aikido una herramienta para defenderse contra los hechos de inseguridad y la violencia de género mientras que 4 niños adoptaron esta técnica para luchar contra el bullying.
Esta cifra corresponde a la cantidad de personas que concurren a la Escuela Aikido San Francisco que dicta sus clases en el Polígono del Club Tiro y Gimnasia, donde el profesor Gustavo Saldaña brinda sus conocimientos a distintos alumnos que desean aprender esta técnica de defensa personal.
El grupo de mujeres que concurre una vez al mes recibe la clase de manera gratuita dentro de un grupo que tiene un promedio de edad que oscila entre los 30 y los 40 años mientras que en el caso de los pequeños, la enseñanza está dispuesta para niños comprendidos entre los 4 y los 11 años.
En diálogo con LA VOZ DE SAN JUSTO, el profesor Saldaña explicó que "la escuela de aikido en San Francisco tiene unos 5 años de antigüedad y en ese tiempo desarrollamos nuestra actividad en el Polígono de Tiro y Gimnasia. Las clases para adultos se dictan de lunes a jueves por la noche mientras que los niños concurren los martes y jueves por la tarde".
De todas maneras, comentó que en el corriente año "comenzamos con el curso gratuito para mujeres compuesto por diez clases en el cual se forman grupos que desarrollan sus actividades durante ese lapso. En la última clase tuvimos unas 17 mujeres participantes mientras que la primera clase que desarrollamos en marzo comenzamos con 14 mujeres".
Al definir las causas que llevan a las mujeres a practicar esta disciplina, dijo que "llegan porque están con un poco de temor y quieren aprender a defenderse de los hechos de inseguridad. Además buscan la manera eficaz de resolver una situación de violencia y en ese sentido en el curso enseñamos técnicas que permitan prevenir esas situaciones y que no caigan en un hecho violento de manera de que no salgan lastimadas".
A manera estadística, el entrevistado comentó que "a nivel mundial, el Aikido está muy repartido en la práctica. Entre el 30 y 40 % de quienes desarrollan esta actividad son mujeres porque la característica de esta disciplina es que no se utiliza la fuerza a la hora de abordar un ataque y eso lo hace atractivo para las mujeres".
Consultado sobre la experiencia que tuvo al implementar esta disciplina en San Francisco, dijo que "estaban buscando un espacio para relacionarse, hablar sobre la violencia que se vive en las calles y formar un grupo de mujeres que puedan sentirse cómodas y trabajar entre mujeres y aquí encontraron eso y la comodidad del lugar permite que puedan practicar esta disciplina de la mejor manera".
Eficaz contra el bullying
En otro orden, el aikido se presenta también como una herramienta eficaz para que los más pequeños puedan hacer frente al bullying, ese flagelo que acecha a quienes intentan desde su infancia relacionarse con otras personas, especialmente en la escuela, y terminan sufriendo acoso y hostigamiento que puede llegar hasta el maltrato físico y agresiones violentas.
Al respecto, comentó que "el bullying está formado por tres componentes: la víctima, el agresor y el público. Las artes marciales en general y el Aikido en particular, trabaja sobre el fracaso y a partir de allí cambiar la mirada sobre eso pensando que puede convertirse en una posibilidad de aprender algo. Desde esa mirada trabajamos sobre el público para que tomen parte activa ante una acción que puede ser mala como una agresión de manera de mostrar que ante un escenario de ese tipo no hay que reírse, hay que tratar de involucrarse en los conflictos sin violencia entendiendo que todos somos distintos y por eso el Aikido trabaja con personas de todas las edades, de diversos tamaños y con mujeres y hombres para fomentar la diversidad entendiendo que allí hay un montón de cosas para aprender y crecer".
¿Qué es?
El aikido es un sistema de combate de origen japonés que se utiliza para la defensa personal; está basado en otras artes marciales pero se caracteriza por que los combates se desarrollan con una armoniosa técnica parecida a la danza; no existen competiciones deportivas.
Se entiende como una forma de vida para mejorar no solo mente y cuerpo sino también el espíritu. Es muy difícil hablar intelectualmente del aikido y definirlo en términos de desarrollo físico, proceso psíquico, o valor moral. Es todo eso a la vez.
Uno de los principios más importantes del Aikido es el que sostiene que la mente y el cuerpo son uno. Cuando el individuo actúa teniéndolo en cuenta, desarrolla gran poder. Ya que los movimientos del Aikido son de naturaleza circular, requiriéndose flexibilidad, equilibrio y timing, no hay necesidad de entrar en conflicto con la fuerza del oponente. Al acompañar el ataque mediante dichos movimientos, es posible tomar control de la fuerza que emplea el atacante y redirigirlo en forma segura y efectiva. La práctica también incluye el aprendizaje de caídas, las cuales constituyen una forma de defensa en sí mismas.