Acercar el campo a la ciudad, el valor histórico de la Rural
Desde la entidad centenaria distinguieron el trabajo de los pioneros que llegaron a San Francisco y "tenían en su ADN la producción agropecuaria". La Sociedad Rural es protagonista de cien de los 134 años de la ciudad, siendo "la primera institución gremial en defender los intereses del sector".
En la primera década del siglo XX, San Francisco descolló en la producción agropecuaria. Pronto en el pueblo fueron desarrollándose los comercios y las industrias, y entre 1911 y 1920 San Francisco alcanzó el status de "ciudad" (su proclamación oficial fue en 1915).
La industria molinera, fundada en la explotación agrícola, fue la base fundamental sobre la que se expandiría el desarrollo industrial de esta ciudad. Fue en ese período en el que nace también una de las instituciones más antiguas de la ciudad: la Sociedad Rural.
De hecho, su primer presidente fue el molinero y agricultor, Augusto Boero, secundado por un destacado grupo de productores, preocupados todos por instalar con fuerza en la comunidad una entidad que defienda al principal núcleo productor de la riqueza regional.
"El origen de la ciudad está netamente
vinculado con los inmigrantes piemonteses que llegaron en búsqueda de tierras
de trabajo y progreso, siendo la agricultura la actividad que dio origen a las
demás. Ellos vivieron muchos años en la zona rural para luego trasladarse a la
ciudad", expresaron los dirigentes de la entidad local, Javier Cassineri
(presidente) y Juan Carlos Carisio (gerente).
Javier Casineri y Juan Carlos Carisio, presidente y gerente de la Rural, respectivamente
"Con la producción agropecuaria aparecieron las primeras industrias de carruajes y cueros", recordó Carisio.
En este sentido destacaron el rol fundamental de la Sociedad Rural "siendo la primera entidad gremial en defender los intereses del sector, inclusive en todo el departamento San Justo", manifestaron.
Asimismo recordaron que forma parte de la historia de la ciudad siendo una de las pocas instituciones centenarias.
Los entrevistados distinguieron el trabajo de los pioneros que si bien, venían de otras ramas profesionales, "tenían en su ADN la producción agropecuaria, por el lugar en el que nacieron". En esto mencionaron al doctor Tomás Areta, un precursor y visionario que aportó los cimientos para la institución.
En tanto reconocieron que cuando se adquirió el predio que ocupa hoy la Sociedad Rural "ninguno hubiese imaginado que al cabo de 40-50 años ya iba a estar insertada en medio de la urbanización".
Los dirigentes ruralistas rescataron el nexo que supo generar la entidad entre el campo y la ciudad. "la Rural siempre estuvo predispuesta a todos los requerimientos de la ciudadanía, también en cuanto a lo gremial . Esta relación es mutual, valedera y es bueno que perdure", reflexionaron.
Con visión de futuro, los integrantes de la Rural local manifestaron que "el desafío es mantenerse actualizado conforme al avance de la tecnología y a las exigencias de cada sector. Poder sostener lo que consiguieron nuestros visionarios y todas las comisiones a través de estos cien años, el predio y las vinculaciones con el estado y las instituciones que tanto aportan al progreso de la institución y de la ciudad".