Aseguran que el decreto que congela alquileres bajó la oferta de casas en la ciudad
El contexto "no es para nada atractivo" para que los propietarios ofrezcan sus inmuebles en alquiler, la venta de inmuebles sigue en baja y crece interés por lotes impulsado por costos de la construcción.
El mercado inmobiliario de nuestra ciudad se mostró en contra de la posibilidad de que se extienda hasta fin de año el congelamiento de alquileres.
El sector salió de esta forma a fijar su posición ante las versiones que circularon en las últimas jornadas respecto a la posibilidad de que se prorrogue la vigencia del DNU que congela alquileres y prohíbe desalojos en el marco de la pandemia de coronavirus, que vence el 30 de septiembre próximo, alegando que la medida juega en contra del desarrollo de la actividad.
Además invocan bajas sobre el incumplimiento del pago de los alquileres de viviendas.
El pedio se suma al que recientemente hizo al Gobierno nacional la entidad que nuclea a los corredores inmobiliarios de todo el país -el Consejo Federal de Colegios Inmobiliarios de la República Argentina-, a través de una carta abierta enviada a la ministra de Desarrollo Territorial y Hábitat, María Eugenia Bielsa. Consideran que "no sería razonable ni oportuno una extensión del DNU, cuando la actividad económica comienza a normalizarse en el país en la mayoría de los sectores de la economía".
Consultados por LA VOZ DE SAN JUSTO, desde el sector advirtieron que de continuar esa situación se perjudicaría aún más la escasa oferta de inmuebles para alquilar que están disponibles en las inmobiliarias de San Francisco entendiendo que el actual panorama "no es atractivo" para que el propietario lo ofrezca en alquiler.
El DNU 320/2020, publicado a fines de marzo pasado con un plazo de vigencia de 180 días, congela las actualizaciones de los precios de alquileres y prorroga automáticamente los contratos vencidos, para mitigar el impacto de la crisis por la emergencia sanitaria de la Covid 19.
La realidad del mercado
Fernanda Oldrino, de Oldrino Inmobiliaria -Perú 196- aseguró que el decreto del Ejecutivo Nacional "es un perjuicio enorme" para los propietarios de inmuebles. "En nuestro caso, por ese decreto tenemos un montón de casas 'paradas', con contratos vencidos y al verse respaldadas por ese decreto no se preocupan demasiado para resolver la situación".
El mercado inmobiliario estaba manejando un incremento que oscilaba entre un 15 y un 20 % de manera semestral aunque este decreto paralizó todo y por ende, los precios de los alquileres están desafasados con respecto a la inflación.
Advierten grises en la nueva ley de alquileres
Oldrino agregó que más allá de este DNU, la nueva ley de alquileres "perjudica de alguna manera" al propietario que "no sabe a ciencia cierta de dónde agarrarse para actualizar el monto de los alquileres en cada renovación" además de perjudicar también al inquilino porque "en cierta manera no tiene un horizonte muy claro sobre qué monto va a pagar dentro de un año".
Teniendo en cuenta estas condiciones del mercado, la entrevistada reconoció que el mismo "no es para nada atractivo" para que los propietarios ofrezcan sus inmuebles en alquiler. "Con estas condiciones no hay mucho interés en ofrecer. En San Francisco hay pocos inmuebles para alquilar".
Para Pablo Berardo, de Inmobiliaria Berardo -Bv. 25 de Mayo 2640- la posibilidad de ampliar la vigencia de dicho DNU "sería una locura así como en su momento lo fue la ley de alquileres, que terminó perjudicando al inquilino por donde lo mires".
La gente invierte en lotes
La compraventa de inmuebles sigue en baja en medio de las restricciones existentes por la pandemia de coronavirus, con pocas operaciones, al tiempo que crece el interés de potenciales inversores por la compra de lotes debido a que los costos de la construcción -medidos en dólares- resultan convenientes en la actualidad.
Berardo advirtió que ante una nueva depresión del mercado inmobiliario "se cae la construcción que es una de las actividades donde más se mueve la economía del país".
Igualmente, reconoció un crecimiento en el interés por la compra de lotes en la ciudad y la causa de ello, según señaló, se debe a que "los lotes que se están moviendo son aquellos que se ubican en ambos extremos de la lista de costos, es decir los más baratos, entre 15 y 20 mil dólares o los considerados de alta gama de 60 mil dólares para arriba. En medio, el mercado está más tranquilo".
Luego remarcó que "aquel que invierte en un terreno es porque le gusta tener un resguardo de valor y la decisión de construir está motivada por lo relativamente barato que significa la construcción".
El entusiasmo por la venta de lotes no acompaña al sector del inmueble terminado. Este último todavía experimenta una seria retracción en el nivel de ventas a raíz de la falta de interés del inversor que no encuentra en un inmueble un elemento tentador para depositar sus activos.
"El inmueble tradicional está un poco atrasado en las ventas y esto es así ya que la mayoría del mercado inmobiliario está conformado por viviendas cuyos costos oscilan entre los 90 y los 120 mil dólares en diferentes estados y sin embargo, no se venden. Hoy cuesta llegar a esos valores y hay que pensar que la que mueve la balanza es la gente de clase media y media alta que en este contexto pasan muchos inconvenientes en sus empresas o emprendimientos privados", explicó Berardo.
La venta de lotes superó claramente al interés por la compra de inmuebles, sobre todo porque es mucho más accesible la adquisición de un terreno que la de una vivienda.
Oldrino también registró esta situación y al respecto señaló que "cada peso que la gente tiene para invertir lo destina a la compra de un terreno y eso hace que se mueva mucho este mercado en este momento".
Además consideró que la compra de un inmueble o un lote para construir "es la manera más segura para invertir porque con el paso del tiempo es algo que va a mantener el valor del capital invertido".
La Cámara de Empresas de Servicios Inmobiliarios (Camesi) reflejó -en su cuarto observatorio mensual que abarcó a tres mil operadores de todo el país- que en el 80% de las propiedades que se encuentran a la venta marcaron una rebaja en los precios de entre 10% y 20% respecto a la prepandemia, y que en el 20% restante las reducciones son de entre 30% y 40%.
"La gran mayoría, por no decir la totalidad de los operadores, está negociando operaciones a la baja. En poco más de la mitad de los casos, esta baja se produce al momento de cierre de la operación. Mientras que alrededor del 40 por ciento la registra al momento de publicar la propiedad", sostuvo el director ejecutivo de la Camesi, Mariano García Malbrán.
La respuesta del Gobierno
Desde la cartera ministerial informaron a Télam que "se está estudiando y trabajando en el tema, no sólo desde nuestro Ministerio", y señalaron que "la continuidad depende de la evolución de las problemáticas sanitarias y económicas".
"El DNU busca proteger los inquilinos tanto de vivienda como de los sectores productivos vinculados con el comercio y las pymes. Entendemos que es el momento de interpretar al alquiler como una política de vivienda", indicaron desde la cartera que conduce Bielsa.
En ese sentido, se afirmó que "se vienen generando instancias de diálogo con las diversas entidades defensoras de inquilinos".
En tanto, el informe mensual de la Cámara de Empresas de Servicios Inmobiliarios (Camesi) indicó que en cuanto a la morosidad en el pago de alquileres "se puede apreciar un mejoramiento respecto de períodos anteriores".
"Las opiniones se dividen en mitades, entre los operadores que informaron que hubo retrasos en los pagos y quienes aseguraron que las rentas están al día. Entre los primeros, la mayoría señala que los atrasos se limitan a un mes de alquiler", según Camesi.
Por su parte, la Federación Nacional de Inquilinos presentó en las últimas semanas al Ministerio de Hábitat el pedido para la extensión del DNU, frente a "la situación desesperante que vienen millones de familias inquilinas en todo el territorio nacional".
"Aproximadamente un millón de familias están en condiciones de ser desalojadas a partir de octubre por las deudas acumuladas", aseguró la Federación.